Tomo _ I
«Origo»
Sobre la historia y sus analogías; que como son cíclicas, se repiten; sobre, nuevas formas del pensamiento, hoy tomadas por la ciencia-ficción; con base, en el estudio a la saga, de métodos trascendentes, de la “Cibernética Inteligente”; capaz de corregir los defectos humanos. -
«Maya»
“La pata y el huevo”.
Contacto II
Por Alberto Galindo Jr.
Investigación, desbrozando en facción con lo tradicional, mediante el estado onírico (por abducción de la memoria genética.) Como explicación del gran avance científico experimentado,
hasta llegar a la (transformación.) La tecnología de la “Cibernética Inteligente”; como sucesora de lo trascendental y/o, del nacimiento de una nueva para-filosofía, hecha realidad, en la nueva “era de la mente”. -
Medellín, Abril del 2008
La Parusía...
OH... mi Dios, te quiero así,
con tus ángeles llegarás.
Mi señor, yo te amo así...
tú mí Jesús, me bendecirás.
E iluminación dentro de mí,
el “Espíritu Santo”... me pondrás... A. G.
Dedicatoria:
Dedico este trabajo... a mis nietos, que tanto amo; ya que, por y para ellos, tuve el valor de terminarlo. A. G.
Prólogo:
Notas:
Mientras nuestras percepciones, - estén de acuerdo con nuestras vivencias terrenales; nuestro espíritu se hallará cautivo por ellas y así, no podrá jamás, trascender a niveles superiores. -
¿No es a todas luces, más injusto, - dejar que cada uno se divierta como quiera y se critique a los estudiosos, máxime cuando la chanza puede conducir a algo serio? ; ¿No pueden las bromas dar pie, para que cualquier lector que no sea romo, saque más provecho, de los argumentos oscuros y caprichosos, de personas que conocemos? Tal es el caso, de los que no cesan de pregonar enfáticamente, las excelencias de la retórica o, de la filosofía; o del que hace la apología de un príncipe; y de ese otro, que constantemente, hace campaña, a favor de la guerra contra el turco (el extranjero.) – (Tomado en paráfrasis, de “Elogio de la locura de Erasmo. Ed. Altaya. 1993. Pág.11.)
Notas:
El valor matemático - de Pi «π» = (3,1416) no fue calculado por civilización alguna; hasta que los griegos(Arquímedes) lo descubrieron por casualidad. (Siglo III a.C.) O sea, la relación con altura de la “gran pirámide” = 146,73 Mtrs.; que, tuviera la misma relación con el perímetro de la base = 921,45; que es la de cualquier circunferencia con su radio. Esta relación es Pi «φ» a saber: 146,729 x 2 x 3,14 = 921,45 Mtrs. -
La apocalíptica “gran transformación”, - se cumple, cuando dentro de las «eras»; por ejemplo: “La Geológica”, en la que el hombre y sus sobrevivientes, son solo un «momentum»; y/o, momento; pues en él, “La Cibernética Inteligente”, permite el paso (o el envase) de la inteligencia, de lo corruptible, a lo incorruptible. -
Nada hay más trivial, - que tratar las cosas, como serias, en broma. Pero tampoco, hay nada más divertido, que tratar los temas banales y ligeros, de forma que parezca, que no lo son. La gente, puede juzgar como quiera; pero si el amor propio no engaña, el elogio de la estulticia, no ha sido fatuo. - (Tomado de “Elogio de la locura” de Erasmo. Ed. Altaya. 1993. Pág.12.)
Quien se ofende - por haber sido herido, está poniendo de manifiesto su conciencia culpable o, al menos, sus temores. -
Nada más insensato - que una sabiduría a destiempo; ni nada más imprudente, que una prudencia fuera de lugar; obra mal, el que no toma las cosas como vienen; el que no baja a andar por la calle; el que no quiera acordarse, al menos, de aquella sabia norma de los banquetes: “O bebes, o te vas”. O, el que pretende, que la comedia no sea comedia. Es, por el contrario, digno del hombre prudente, como mortal que es, no querer una sabiduría superior a su condición humana común; estar dispuesto, a hacer la vista gorda y a reírse de sus desaciertos, con todos los demás. Por esto precisamente, es de necios, no negarlo, con tal de que se admita, que en esto consiste la “representación” de la comedia de la vida. - (Tomado en paráfrasis de “Elogio de la locura” de Erasmo. Ed. Altaya. 1993. Pág.46.)
La *gran evacuación.
(¿Apocalíptica?)
Nota:
“El talento, no es un don celestial, ni un milagro caído del cielo, sino, el fruto del desarrollo sistemático de unas cualidades especiales. (José María Rodero. 1922)
En realidad, será una evacuación en masa; efectuada por los * “Seres de Luz”, para protegernos, de la inminente explosión solar; correspondiente, a la sexta época de la humanidad. Será realizada, por una flota, de miles de grandes *naves, en forma de tabaco; de más de dos mil Mtrs., de largo por 200 Mtrs., de ancho; que aterrizarán, de punta en tandas de a diez c/u., (ellas tienen su propia gravedad; clima, luz estroboscopia; y demás servicios); sobre gigantescas “plataformas” cuadradas; de más dos mil; por dos mil Mtrs. ; ubicadas por nosotros (los creyentes; según especificaciones de: “La Biblia”) para el caso; como sistema defensivo; con cordones de seguridad (gruesas murallas antibombas; de más de 20 pisos de altas; con tres puertas, en cada lado; o sea, doce puertas) y demás efectos, para lograr el orden y evitar sabotajes; ya que no todos, podrán viajar en ellas; ya sabemos que solo lo hará (ascender) ¼ ; de la humanidad, previamente transformada, aprestada y engalanada, para el evento de su vida. (*Ver Apo. 21.)
Nota:
*Pudo, haber ocurrido ya (y varias veces; por lo menos cinco; estamos en la sexta era); hace, siquiera 25 mil años; antes del pasado “Desfogue Solar”; que sucede sin falta, cada 25 mil años; ya que físicamente, tiene que acontecer o, el sol estallaría. Se sabe, que en cada desfogue solar; los astros circundantes, cambian sus polos magnéticos; y sus polos correspondientes, a sus respectivos ejes de giro. Se calcula, que para el próximo año 2025; ocurrirá dicho desfogue; esto según la mitología. Según “La Biblia”; ocurrirá en el 2238/39/40; correspondiente al año 6000 del calendario Judío.
En los futuros... momentos (muy próximos, segundos cosmológicos) de * “La gran evacuación”; ésta se hará en tres fases; y cada una, tendrá algunas variaciones. Así, en el primer grupo humano: Se izarán, todos aquellos seres que hayan logrado una altísima “vibración”. En el segundo grupo humano: Se izarán, las personas que hayan resistido la gran carga de altas presiones. Ya que ellos resistirán, un nivel muy alto de frecuencias vibratorias; a las que se expondrán. En el tercer grupo humano: Se izarán, todas las personas remanentes (las recién transformadas); que puedan resistir el gran embate vibratorio; a pesar, de no poseer las características, de los seres de los primeros grupos.
Así, en cuestión de pocas horas; las naves encargadas de realizar la evacuación general; izarán a todos los seres sobre el planeta; sin embargo, muchos (± 10 mil millones) que no podrán resistir a las altas presiones radiales, a las cuales la Tierra será expuesta. Estos, se desintegrarán; ya que su cuerpo físico (nuestro vehículo terrenal) no podrá con las altas presiones antes aludidas. Luego de ser izados; seremos transportados a otros mundos. Estas naves están construidas con un material electrostático y termostatito; aislante e anticorrosivo. No producen ruido; y están dotadas de dispositivos para hacer levitar a la tripulación. Una de sus características principales es que pueden pasar de una dimensión a otra y su movilidad a grandes velocidades es desde círculos; hasta movimientos en todas direcciones. Pueden quedar suspendidas (estáticas) en el aire; al girar sobre su propio eje.
Sus colores varían; basta con tocar un determinado circuito para obtener el color que se quiera. Las tres polaridades de que gozan estas naves; hacen girar el campo magnético circundante; encargado de situar el aparato en la dimensión requerida en determinado momento. Estas naves no viajan, se sitúan en una dimensión deseada. Así, cuando sus colores varían de acuerdo a la ionización a que esté sometida su frecuencia circundante. Cuando, empieza la aceleración de su campo magnético, la nave se torna roja o sea, su campo magnético; y al ir aumentando gradualmente la aceleración pasa por las frecuencias verde; amarillo; blanco; azul; anaranjado; violeta y ultravioleta; en este instante se vuelve invisible.
Para viajar por el cosmos, (a exa velocidades en Klmtrs./Seg.) utilizan unos caminos; tubos de gases siderales; o, de antimateria; mal llamados también “agujeros negros”. Para orientarse, utilizan las líneas magnéticas del planeta visitado; pues tienen un sistema de localización de estos campos; en la Tierra, por Ejem: Existen 1.270 líneas magnéticas por centímetro cuadrado; de esta manera al estar dentro de la atmósfera terrestre; localizan las líneas magnéticas adecuadas, ubicando el sentido de su polaridad y utilizan el campo de fuerza, atracción y repulsión; según la dirección en que se desee viajar; o, situarse. Una nave de estas, funciona con un sistema de propulsión magnético, usando adecuadamente su polaridad negativa o, positiva. Mediante mecanismos específicos, cambian la polaridad, en el momento debido, ejerciendo el tipo de fuerza tal que la nave puede suspenderse en el aire ingrávidamente. Para elevarse se agrega una mayor intensidad a la energía tal, que siendo rechazada por la energía gravitacional del planeta (visitado); repele fuera de él; logrando así su ascenso.
Resumiendo. Esta naves que son muy grandes (las nodrizas) pueden viajar por todo el cosmos; para su buen funcionamiento, se hallan divididas en varios sectores; los hay de mantenimiento; de descaso y de recreación. Poseen campos de fuerza que repelen todo material peligroso que impacte sobre ella. Tienen compartimientos para todo... hasta para recuperación, en el caso esporádico de una enfermedad, accidental, ya que, más que todo, los extraterrestres utilizan la medicina preventiva. Tiene espacios para la producción; desde materiales para ser reemplazados; hasta un tipo de alimentación avanzado, basado en alimentos procesados y altamente alimenticios. Departamento de mando y de recargue de energía. En fin son naves autosuficientes, que lo producen todo y por tiempo indefinido.
El Idioma, la cultura y la técnica.
Nota:
A través de las analogías, podemos analizar la historia, adivinar; o, analizar su contenido. Hacer cávalas, con el fin de lograr una historia lineal o, positiva; que luego podemos (aprovechando que además es cíclica) analizar, un mundo antiguo, dentro del mundo actual. -
Nota:
La nueva definición del pensamiento, - que ayuda a coordinar las operaciones mentales, con las de la realidad social, aspira a una terapia. El pensamiento está en el mismo nivel que la realidad, cuando se cura de la trasgresión más allá de un marco conceptual que es, o puramente axiomático (la lógica de las matemáticas); o coextensivo con el universo establecido del discurso y la conducta. – (Tomado, del “hombre unidimensional” de H. Marcuse. Ed. Planeta 1993 Pág. 197.)
Nota:
Dentro del nuevo pensamiento sobre la unión espiritual y la remodelación de la conciencia; con el fin de aplicar doctrinas, que unan y mejoren los sentimientos; y los sistemas de vida; vivienda; trabajo y gobierno.
Antes de intentar mostrar un carácter intrínsecamente ideológico, del análisis lingüístico; debo intentar justificar un juego, aparentemente arbitrario y derogatorio, con los términos positivos; y con el «positivismo » ; mediante un breve comentario sobre su origen. Desde su primer empleo, probablemente, en la escuela de “Saint-Simon”; el término «positivismo» ha encerrado: 1) La ratificación del pensamiento cognoscitivo, mediante la experiencia de los hechos; 2) La orientación del pensamiento cognoscitivo, hacia las ciencias físicas, como modelo de certidumbre y exactitud; 3) La fe, en que el progreso en el conocimiento, depende de esta orientación. En consecuencia, el «positivismo» es una lucha contra toda metafísica; trascendentalismo; e idealismo; como formas de pensamiento regresivas y oscurantistas. En el grado en que la realidad dada, es científicamente comprendida y transformada; en el grado en el que la sociedad se hace industrial y tecnológica; el «positivismo» halla en la sociedad, el medio para la realización (y la ratificación) de sus conceptos: La armonía entre la teoría y la práctica; la verdad y los hechos. El pensamiento filosófico, se vuelve pensamiento afirmativo; el crítico filosófico, critica dentro del marco social; y estigmatiza las nociones no positivas, como meras especulaciones, sueños y fantasías. (Tomado, en paráfrasis, de: “El Hombre Unidimensional” de H. Marcuse. Ed. Planeta. 1993. Pág. 199.)
Al decir, que necesitamos comprender, la historia y la evaluación, de las creencias religiosas judías; dirigimos, nuestra atención, a algo vital, para todas las civilizaciones: El leguaje. - La evidencia indica, que la mayoría de los idiomas del sub-continente Hindú; el occidente de Asia; Europa, y algunas partes de África del norte; provienen de una antigua fuente común. Las similitudes de cientos de idiomas, comprobaron este punto. Nos pareció, que lo mismo podía aplicarse, a la religión; porque, mientras los pueblos se dispersaban, llevando consigo el lenguaje, también eran propensos, a cargare con sus leyendas y sus dioses. Creemos, que las conexiones, entre las religiones, en apariencia distintas; pueden revelar vínculos tan claros, como los encontrados por filólogos. –
Los orígenes del idioma, - se han investigado durante miles de años; muchos pueblos primitivos, creían que era de origen divino; y que sino, podían encontrar la forma original o, más pura del idioma; encontrarían, entonces, el léxico de los dioses. Se ha efectuado muchos experimentos, para encontrar una lengua primitiva; o primaria. Como, cuando el faraón de Egipto; Psamtik: Que en el SVII a.C., ordenó, que se criara a dos niños; sin que escucharan una sola palabra hablada; con la esperanza, de que pudieran desarrollar por instinto, una lengua pura y semejante a la de los dioses. Se dice, que de forma espontánea, hablaron en frigio; un leguaje antiguo, del Asia Menor. El mismo experimento, se llevó a cabo después; hace más de dos mil años, por el Rey Jacobo IV; de Escocia; con un resultado, poco convincente; ya que ellos hablaron una lengua conocida; el Hebreo. El primer idioma, del cual, se cree, que surgieron casi todas las lenguas del “Viejo Mundo”; que fue catalogado como proto-indo-europeo. Este resultó ser, la fuente común del francés; el persa; el polaco; el checo; el griego; el lituano; el portugués; el italiano; el nórdico antiguo; el alemán y el inglés; entre muchos otros. Nunca sabremos cuando el proto-indo-europeo; fue una lengua viva única; porque, nuestros conocimientos detallados del pasado, se fundamentan en la siguiente etapa evolutiva, surgida del lenguaje y la palabra escrita. -
El libro del Génesis: - Data de hace casi 2.700 años; mucho tiempo después de la época del Rey Salomón. Pese a su antigüedad, ahora sabemos, que la escritura, se originó hace más de cuatro mil años; en un país llamado Sumeria. Aceptada, como la cuna de la civilización (actual.) Su escritura; teología; y técnica de la construcción: Forjaron los cimientos de todas las culturas posteriores del “Medio Oriente”; y de Europa. A pesar, de que nadie sabe con seguridad, el lugar de procedencia de los Sumerios; ellos, creían ser originarios, de un lugar llamado, Dilumes; el cual, se piensa que es el Bahrain actual; ubicado en la costa oeste del Golfo Pérsico. Ya en el año 4000 a. de C. (los Sumerios) llevaban una existencia próspera, en lo que ahora es el sur de Irak; entre los ríos Tigris y Eufrates. Las extensas planicies fluviales del lugar; los proveían de tierras ricas: Para la agricultura y la ganadería; la cual desarrollaron con excelentes técnicas. Por ejemplo: Los sembrados de trigo, no tenían nada que envidiar, a los de hoy en el Canadá. Además contaban con ríos, en los que abundaba la pesca. Ya en el cuarto milenio a.C., Sumeria, tenía una cultura bien establecida, que contaba con varias ciudades; artesanos especializados; obras comunitarias para la irrigación; centros de ceremonias y registros escritos. Desarrollaron excelentemente, los textiles y la cerámica; el vidrio y la orfebrería. Trabajaron el oro; la plata; el cobre y el bronce. Fueron buenos escultores y trabajaron muy bien la piedra y la carpintería. Su invento más importante fue la rueda.
Investigación:
Nota:
Investigación, - desbrozando en facción con lo tradicional, mediante el estado onírico (por abducción de la memoria genética) como única explicación, del avance científico experimentado por la humanidad; hasta llegar a la (transformación) “Cibernética Inteligente”; hoy, como la gran sucesora de lo trascendental o, el nacimiento a la saga de una nueva para-filosofía, hecha realidad en la nueva “era de la mente”. – A.G.
Notas:
Todo cabe en lo breve; - pequeño es el niño y encierra al hombre; estrecho es el cerebro y cobija el pensamiento; ¿No es el ojo más que un punto y abarca leguas? – (Alejandro Dumas - 1824-1895 – Escritor francés.)
Notas:
Todo cabe en lo breve; - pequeño es el niño y encierra al hombre; estrecho es el cerebro y cobija el pensamiento; ¿No es el ojo más que un punto y abarca leguas? – (Alejandro Dumas - 1824-1895 – Escritor francés.)
Si no puedes ser lo que quieres, - sé con sinceridad lo que puedas. – (Henrik Ibsen – 1828-1906 – Dramaturgo noruego.)
La sociedad moderna, - olvida que el mundo, no es propiedad de una y única generación. – (Oscar Kokoschka – 1886-1980 – Pintor austríaco.)
Solo, el que - piensa, experimenta su vida; en los que no piensan, ésta pasa de largo. – (Marie von Ebner-Eschenbach –1830-1916- Escritora austríaca.)
Jesús... te necesito...
Naufrago sin ti en la vida yo soy,
Luego... sin rumbo y solitario yo voy.
Pero desde tu llegada, el rumbo yo logré,
por tus ojos... mi faro, el rumbo recobré.
Tus ojos me dijeron... yo soy la fe,
pues, desde hace mucho tiempo yo te esperé.
Hasta el día en el que te hallé,
ya... y desde entonces, siento que... yo soy.
La ilusión recobré... y por el sendero yo voy,
es esperanza... la que mi alma en ti ve.
Luego... ya la tristeza y la soledad olvidé,
y ahora... por ti mi vida, contigo yo voy.
Pues, tú llegaste justo cuando cansado... te esperé,
por la sola esperanza de tu amor... hoy.
Con tu cariño... y tu presencia que tanto esperé,
me has devuelto a la vida... y así yo voy. A. G.
No debemos partir rotulando a la religión, y menos a la religión-estado; ya que históricamente, a esto, se debe la consecución de un pensamiento desbordado hacia el bienestar de la comunidad; al respetar, el pensamiento y la forma de obrar dentro de un marco decididamente... muy amplio; tan grande, como lo es, nuestro espíritu. Al pensar así, podremos libremente, hacer “futurismo”; basado en formas desconocidas; pero velando, por que las viejas creencias, no se olviden; sino, que, encuadren, dentro de lo nuevo planteado. Son principios sanos y desde luego, que son revolucionarios; pero que, mediante motores de ánimo e ilusión, prenden a la imaginación; que desarrolla nuevas ideas: frescas, renovadoras. Para ello, qué mejor, por ejemplo: Que “La Biblia”; o qué mejor que las obras literarias superiores; las cuales, contemplan diferentes fuerzas y explicatorios de nuestras terquedades y conceptos, que podríamos, a veces, llamar irremplazables.
Podríamos entonces, combinarlos y formar una amalgama que pegue y conserve nuestro espíritu (renovado) sobre bases, entonces sí, serias y justas. Por ejemplo: El caso del gran científico A. Einstein (1879-1955); autor de la “Teoría General de la Relatividad”; quien además dedicó la mayor parte de su vida a desarrollar su célebre: “Teoría del Todo”; hoy mal llamada: “Sinfonía Inconclusa de Einstein”; que en el fondo, combina las fuerzas de gravedad y magnetismo, tanto positivas como negativas; así como las fuerzas de atracción y repulsión; y trata además, la materia y la antimateria, como un todo indivisible; que en “alguna forma” (aunque parezca paradójico) une a los átomos, mediante la aceleración de partículas; creando un nuevo concepto de la mecánica; o sea, lo que él entendía como: El comportamiento predecible; en su básica y estudiosa idea de la “mecánica cuántica”; hasta hoy, curiosamente, de comportamiento impredecible.
Nota:
Realmente: “Dios, no es ilógico, ni juega a los dados”. (A. Einstein)
Desbrozando con paciencia el «origo». O, el origen esotérico de los conceptos en facción con lo tradicional, generalmente, ecléctico; mediante la abducción onírica, llevada a buen término, por la memoria genética (única razón lógica del trascendentalismo.) Hemos conceptuado nuestro libro: “Maya... la pata y el huevo”; con el deseo, no de saber que fue primero; sino, tratar de establecer, el cómo, de esta paradoja. Sabiendo, que lo interdimensional, favorece definitivamente, nuestra (*bíblica) próxima transformación; sobre una nueva concepción filosófica o, nueva forma de ver las cosas, con base en escritos e ideas al parecer estulticias, espurias (adúlteras); sobre lo establecido en el más allá, que nos explique satisfactoriamente; no el concepto de la creación (× Dios y/o, el origen del mundo y del planeta); sino, la sinergia de su origen, del todo simbiótico.
Pues, sabemos que el “polvo cósmico”, es el origen cosmológico de todo; y que la evolución biótica, es igualmente, el todo dentro un proceso vital; que no es otra cosa, que los mismos elementos aplicados en diferentes circunstancias de temperatura, presión, lugar y tiempo. La prueba, de esto, es que (químicamente) podemos llegar a lo mismo, por los múltiples caminos de la alquimia. Pero, además, dentro el concepto material; esto, no funciona para explicar algunos casos, teniendo que recurrir (en cuanto: a espíritu y alma, escencia y substancia divinas) al proceso omnipotente; o, apelar, a la mitología; a la historia; y por último, a la ciencia; en forma una tanto picaresca (por no tener fijo; el cómo; el porqué; el para qué; el desde cuando; y el en donde, estamos; de lo cual, solo sabemos, que es – aquí... para llegar transformados, a allí... o, quedarnos, en la nada... -); siendo esto, un reflejo (inestable) de la aparente, silente estulticia (locura) humana; causa de su muy desagradecido comportamiento ético y poco ortodoxo; pero... que indudable y agradecidamente; es también el producto de la “memoria genética”; que sí nos funciona (y es de libre recuerdo... todas las noches); por ser, como un fiel espejismo de nuestros, «yo» (genéticos) cronométricamente contemporizados, por medio de la interacción onírica. Pero, que hay veces, no lo reconocemos; o no, lo recordamos, por ego ancestral; y entonces, lo negamos todo... o, lo contradecimos todo; que viene siendo lo mismo. Un ejemplo de ello, es nada menos que “La Biblia”; sus impresionantes mensajes esotéricos y simbólicos, solo nos llegan de lejos, pero que cuando, al interpretarlos, los entendemos: sabemos que son solo la verdad revelada. (*Apo. 21.)
Mediante un nuevo sentido de los hechos, y de una nueva concepción de los mismos; estaremos muy atentos, no a tergiversarlos; sino, a interpretarlos; interesados en cuidar lo que nos parece verdadero; e integrarlos luego, a las demás conjeturas sobre el asunto. Sin catarsis violentas, pero fijadas en lo que puede ser trascendental en nosotros, mediante una metamorfosis con equilibrio. - Así como Dios, es con nosotros. - Igualmente, debemos cuidarnos de que idiomáticamente, nuestro pensamiento, no se deje apresar por el lenguaje utilizado en la expresión del mismo; esto, sin llegar a competir con el Creador. Pues aquí... y ahora... no será ésta, una nueva rebelión luzbeliana. Asimismo, contemplar siempre la idea, de unir el discurso monoteísta en general; dentro nuestras propias conjeturas, sin dejar pasar lo absolutamente primordial, que es el amor a Dios. Aprovechando la capacidad (genética) del subconsciente, que en el estado onírico, puede salir del cuerpo o, trascender; mediante la energía positiva, acompañante inseparable del “Espíritu Santo”; como ayuda principal; dentro del proceso cíclico de lo que, finalmente, parecer ser la evolución e involución espiritual, quien, solo de esa forma nos escoltará.
Finalmente. Mediante una psiquis y una psicósfera multidimensional y conjunta, nuestros ideales, avanzarán en el netamente original “espacio-tiempo”; dentro de las principales etapas metafísicas o, mundos del pensamiento: Emanación; creación; formación y activación. Y todo... mientras llega la parusía... tan esperada por el mundo cristiano. Luego, se cruzarán y revelarán las verdaderas fuerzas que mueven el Universo; en lo que se ha dado por llamar la “nueva era de la mente”; precursora de la 2ª., venida de Cristo. Que según todas las elucubraciones e interpretaciones bíblicas, será para el año seis mil de los hebreos; o sea, en el año 2240 de nuestro calendario. Dando cumplimiento, a la interpretación de las palabras de Jesús: Cuando dijo a sus apóstoles, que su regreso sería: «Después de un tiempo, más un tiempo, más la mitad de un tiempo.» Considerando, desde luego, a cada tiempo, en mil años; de nuestro calendario. ¿Muy claro, verdad?
Naturaleza de la realidad.
Nota:
Iremos... buscando oníricamente, nuestros diferentes «yo» (genéticos) como principales entes, responsables de los sectores de este libro; en su muy útil viaje por el espacio-tiempo; tanto en lo micro, como en lo macro. Descubriremos pues, sus principales experiencias y “vivencias”; hasta la segura y muy próxima transformación del ser; durante la próxima parusía.
El universo es uno... en el todo infinito, aparentemente inmóvil, en una quietud ofrecida por el “espacio-tiempo”; cuando, solo una, es la posibilidad absoluta; uno es el acto; una la forma del alma; una la de la materia como materia; y uno el cuerpo como cuerpo. Es un ente, una sola cosa, uno el ser; uno lo máximo y lo óptimo; lo que no admite comprensión y aún, es eterno e interminable y consecuente, al parecer inmóvil y silente; uno... es el tiempo, que para nosotros es eterno, por la amplitud de su espacio; cuya infinita personalidad le da cuerpo al hombre; ya que no existe nada (para nosotros) que no haya sido descubierto y clasificado, por el ser humano (esté donde esté) y esa, constituye su efímera y escasa verdad.
Así, como la materia, está compuesta por protones y electrones; de igual modo, lo está la sociedad; compuesta por individuos conformando su “mundo”; tanto, como unidad o, como realidad. Lo podemos conocer, como armonía con lo eterno y como verdad en su belleza. Así, el mundo... es humano y es visión científica; es también el ser que la determina. Por lo que, conceptualmente, no se puede separar mundo y hombre; así la ciencia intente hacerlo y la religión, conciba esas verdades, como necesidades del hombre y luego, aplique sus valores a esa verdad sabida y conocida; merced a la armonía que queremos y aspiramos a tener con el “Creador”. En un ideal y en una armonía perfecta, tanto en nuestra mente; como en nuestra inexplicable necesidad de lo sobrenatural. Ya que sí existe una verdad matemática (al parecer independiente del hombre); pero descubierta por él. Y ésta, es una... con el ser-universal; está en la mente del ente-universal; y se llama «maya» (en hindú: Ente de Ilusión.) Está además, en el ser-universal y por lo tanto en el ser-individual. Y es a esa ilusión, a la que nosotros iremos siempre que tengamos necesidad de ello; como seres supra-personales. Es una creencia, que, inclusive, a los seres primitivos, que la admiten les conforma su verdad.
En la aprehensión de la verdad. Existe un eterno conflicto, entre mente universal humana y la misma mente circunscrita al individuo. El perpetuo proceso de reconciliación, lo llevan a cabo: La ciencia, la filosofía y la ética: en cualquier caso, si hubiera alguna verdad totalmente desvinculada de la humanidad... como tal, para nosotros sería inexistente. Las cosas existen y suceden; es más, tienen forma y color: debido exclusivamente a nuestra imaginación; nos entra por los ojos y por los sentidos en general; suceden en el espacio-tiempo; constituyen una verdad relacionada sensorialmente o, racionalmente, con el hombre y su religión, como ser supra-personal. Por lo tanto, no podemos negar, que es intrínseco a nosotros, como seres mentales. –
Para concluir, creo... que yendo a la saga, del pensamiento moderno; podremos, en el ir y venir científico, rastrear una serie de observaciones e historias; que nos inspiran, con la brillantez del sol y de los cielos; sobre el origen del espíritu humano captando la existencia. La cual sin duda, nos es otorgada por Dios; o, como un producto de la naturaleza, que en el fondo, es lo mismo. Ya que, cuando hablamos de materia; no solo nos referimos a la inanimada, que incluye paralelamente, la descripción de la vida y de los seres vivos; pues hoy es concebible el comportamiento de la materia viviente, descrito, por Leyes completas y cuantitativas, que bordean igualmente, el campo de los átomos; hasta el punto, en donde los límites, se confunden y se complementan. Lo que realmente difiere, es su origen; sobretodo, el del espíritu, que sabemos que es también divino. Pues, no puede ser circunstancial, ni fortuito, como tampoco lo es su evolución y menos aún, su (bíblica) futura transformación: Sobre esta base, nos iremos desenvolviendo, hasta llegar (filosóficamente) mediante fuerzas magnéticas y de luz; al estado del que salimos. –
Ahora, en la “era de la mente”, suponemos al hombre, poseedor de una fuerza mental, suficiente, como para llegar a Dios; ya que entonces, lo consideraríamos como una fuerza o, como una energía prístina; a la que debemos llegar por medio de su hijo Jesucristo. Además entenderemos, el poder y el porqué, del “libre albedrío”; otorgado directamente por Dios, en el momento de nuestra creación, como seres humanos. Entonces claramente veremos como esa “Luz de Luz”; se encuentra ínter-dimensionada en el Universo; y por tanto también en nosotros.
Apreciaremos en toda su plenitud, el poder de la oración y el ayuno; Igualmente, veremos como en el estado onírico, nuestra mente se halla primordialmente dispuesta para lograr la ínter-comunicación directa con Dios. Finalmente, sabremos, el cómo y el porqué de los escritos de la Biblia; que se realizaron en un lenguaje esotérico, que solo ahora somos capaces de interpretar correctamente, y al hacerlo comprobamos su verdad. Luego comprenderemos el porqué de la ofensa a Dios, mediante el pecado; y el porqué de su “castigo”; ya que las consecuencias de pecar son múltiples, pero siempre en perjuicio nuestro, al adormecer y cegar nuestra inteligencia, y así acostumbrarnos al “error”. Sabremos el porqué de la maldad, y cómo ésta nos restringe y aleja de la presencia de Dios. Comprenderemos, cultivaremos y buscaremos, no a un Dios intervencionista y hasta vengador; sino, a una fuerza de bien, que nos cubre y transforma.
Hacia un humanismo comportamental.
Nota:
(Tomado en paráfrasis, de “Síntesis experimental del comportamiento” Rubén Ardila Ed. Planeta Pág. 188.).
En el camino que ha recorrido la especie humana, desde que comenzó a tener conciencia de sí misma; hemos andado por muchos callejones sin salida. Acerca del hombre y del mundo se han dado numerosas seudo-explicaciones. Se han buscado respuestas, a preguntas mal formuladas y en innumerables casos; se han inventado hipótesis, para justificar nuestra ignorancia al respecto. Un método, que ha brindado resultados positivos; es el de la ciencia, entendiéndose por tal, una actitud directa a los hechos, con el mínimo posible de actitudes preconcebidas. El enfoque inductivo de la ciencia, sin embargo, ha resultado ser incompleto; y hoy sabemos, que para encontrar hechos que nos digan, que hechos debemos tratar de encontrar, dónde buscarlos, y cómo clasificar los hechos hallados. Luego, la necesidad de una teoría es algo que reconocen la mayor parte de los científicos y de los filósofos de la ciencia contemporánea.
El humanismo, no es una teoría científica, sino, un marco de referencia filosófico. Puede ayudarnos a dar sentido, a los hechos científicos y a su aplicación. *Intenta, que la ciencia ayude al hombre, tanto a entender el mundo; como, a cambiarlo. La modificación del comportamiento, es una de las áreas de aplicación, de la sicología actual; en la cual ha sido más compleja la toma de decisiones éticas; en esta área, el control se hace explícito, se eliminan las seudo explicaciones y se reconocen las profundas limitaciones de nuestros conocimientos. Se hace referencia a las contingencias que controlan nuestro comportamiento y la gran dificultad, para tomar decisiones, que se basen en las presiones del ambiente físico y social. Incluyendo el *sistema filo-político, dentro del cual estemos.
Nota:
*Un marco de referencia humanista, basado en el comportamiento, puede implicar una verdadera revolución conceptual.
Luego, el esquema de conversación. Será el hombre y su conducta, no los prejuicios, actitudes y valores de la sociedad. Lo bueno para el hombre, debe ser, a la larga; lo bueno para la sociedad y finalmente para la especie humana, como un todo. El ideal del humanismo comportamental; es el máximo desarrollo del hombre, como tal: Ayudar, a que cada persona, realice sus potencialidades; modificar el ambiente para que sea, reforzante y posibilitante, la actualización, de las capacidades de todas las personas. Los cambios que se requiere, son ideológicos y políticos; no lo son tanto científicos; dado que se poseen muchos conocimientos para mejorar la vida del hombre; pero, estos, no se han puesto en práctica. La sociedad, necesita ayudar al hombre a mejorar, y está en una afirmación más filosófica, que científica. La dicotomía, individuo-sociedad es falsa; dado que los hombres, somos seres sociales por excelencia; nacemos dentro de un grupo; asimilamos las normas de la cultura, y finalmente, las transformamos; o, las aceptamos. El «yo»; es ante toda introversión, de las experiencias del individuo; por el aprendizaje temprano y la estructuración de sus pautas de comportamiento. Al «yo»; lo conocemos por el comportamiento y no va más allá de este. Así el humanismo comportamental, reconoce que la humanidad, es solo una. Mientras que las otras especies, dieron origen a numerosas subespecies; el hombre se conservó como una unidad biológica. Las supuestas inferioridades raciales, no existen; y las diferencias entre los grupos humanos, son culturales, más que biológicas; la hermandad humana, es una meta del humanismo. El hombre resume su comportamiento, en la evolución del mundo biológico, la evolución de su cultura y sus propias interacciones con el ambiente.
Nota:
*Hemos dedicado demasiado tiempo a tratar de entender el mundo; ya es hora, de comenzar a cambiarlo. (Marx)
El mundo de los hechos y el mundo de los valores; no son intrínsecamente diferentes, aunque tampoco son identificables. El mundo de los hechos, puede ilustrarnos a cerca del mundo de los valores; y cuanto mayor nivel de información tengamos, más fácil será tomar las decisiones éticas; pero los dos mundos, no pueden confundirse; lo importante, es indicar que ambos mundos, se fundamentan en el aprendizaje: Cuando nací, no sabía que existía; la “Ley” de la gravitación; ni que fuese bueno amar a mis semejantes. Conceptos aprendidos en la escuela de la vida. El mundo de los valores, además de referirse a lo bueno y lo malo, tiene que ver también con el sentido de la existencia y con el lugar del hombre en el universo físico y social.
La ciencia. No proporciona verdades absolutas; su objetivo, no es encontrar dichas verdades. Las relaciones funcionales, entre los fenómenos que son el producto final de la ciencia; en cuanto, están lejos del concepto de verdad; tal como se considera en la filosofía. El conocimiento, es uno; pero la conciencia, no se interesa en la verdad, ni en lo absoluto. Los últimos - por qué - ; no están en su campo de acción. Pero al conocer el – cómo - ; podremos, tener información más válida sobre el mundo; y el hombre, no será nunca una información final, ni definitiva, sino relativa en el tiempo y en el espacio. La moral; es un asunto humano; no tiene que ver con las “Leyes” dadas, por entes superiores. Tiene que ver con las conductas, que pueden ser positivas o apercibas. La moral del individuo, necesita armonizar con la moral del grupo; y por fin, con el bienestar de la humanidad, como un todo.
Como especie, el hombre, está comenzando su recorrido por el planeta. Tenemos todavía, un largo camino por delante; a menos, que acabemos con el sistema ecológico; en el cual se fundamenta nuestra existencia biológica, o que, las fricciones entre las ideologías, sean demasiado fuertes; y nos lleven, a la destrucción total. Por otra parte, la sicología, es una de las ciencias más jóvenes que existe; de ahí, los conflictos entre las diferentes escuelas; y entre los diversos paradigmas; es de esperar que la sicología logre unificarse, definir sus presupuestos y su metodología; de esa manera podrá contribuir a la futura evolución del hombre, como tal.
Introducción
Nota:
Vivir para los demás, - no es sólo la Ley del deber; es también la Ley de la felicidad.- (Augusto Comte 1708-1850., filósofo francés.)
Vivimos - en el mundo que nos toca vivir; no en el que deseamos vivir. -
Nota del autor:
La sociedad moderna, - olvida que el mundo, no es propiedad de una y única generación. – (Oscar Kokoschka – 1886-1980 – Pintor austríaco.)
Solo, el que - piensa, experimenta su vida; en los que no piensan, ésta pasa de largo. – (Marie von Ebner-Eschenbach –1830-1916- Escritora austríaca.)
Jesús... te necesito...
Naufrago sin ti en la vida yo soy,
Luego... sin rumbo y solitario yo voy.
Pero desde tu llegada, el rumbo yo logré,
por tus ojos... mi faro, el rumbo recobré.
Tus ojos me dijeron... yo soy la fe,
pues, desde hace mucho tiempo yo te esperé.
Hasta el día en el que te hallé,
ya... y desde entonces, siento que... yo soy.
La ilusión recobré... y por el sendero yo voy,
es esperanza... la que mi alma en ti ve.
Luego... ya la tristeza y la soledad olvidé,
y ahora... por ti mi vida, contigo yo voy.
Pues, tú llegaste justo cuando cansado... te esperé,
por la sola esperanza de tu amor... hoy.
Con tu cariño... y tu presencia que tanto esperé,
me has devuelto a la vida... y así yo voy. A. G.
No debemos partir rotulando a la religión, y menos a la religión-estado; ya que históricamente, a esto, se debe la consecución de un pensamiento desbordado hacia el bienestar de la comunidad; al respetar, el pensamiento y la forma de obrar dentro de un marco decididamente... muy amplio; tan grande, como lo es, nuestro espíritu. Al pensar así, podremos libremente, hacer “futurismo”; basado en formas desconocidas; pero velando, por que las viejas creencias, no se olviden; sino, que, encuadren, dentro de lo nuevo planteado. Son principios sanos y desde luego, que son revolucionarios; pero que, mediante motores de ánimo e ilusión, prenden a la imaginación; que desarrolla nuevas ideas: frescas, renovadoras. Para ello, qué mejor, por ejemplo: Que “La Biblia”; o qué mejor que las obras literarias superiores; las cuales, contemplan diferentes fuerzas y explicatorios de nuestras terquedades y conceptos, que podríamos, a veces, llamar irremplazables.
Podríamos entonces, combinarlos y formar una amalgama que pegue y conserve nuestro espíritu (renovado) sobre bases, entonces sí, serias y justas. Por ejemplo: El caso del gran científico A. Einstein (1879-1955); autor de la “Teoría General de la Relatividad”; quien además dedicó la mayor parte de su vida a desarrollar su célebre: “Teoría del Todo”; hoy mal llamada: “Sinfonía Inconclusa de Einstein”; que en el fondo, combina las fuerzas de gravedad y magnetismo, tanto positivas como negativas; así como las fuerzas de atracción y repulsión; y trata además, la materia y la antimateria, como un todo indivisible; que en “alguna forma” (aunque parezca paradójico) une a los átomos, mediante la aceleración de partículas; creando un nuevo concepto de la mecánica; o sea, lo que él entendía como: El comportamiento predecible; en su básica y estudiosa idea de la “mecánica cuántica”; hasta hoy, curiosamente, de comportamiento impredecible.
Nota:
Realmente: “Dios, no es ilógico, ni juega a los dados”. (A. Einstein)
Desbrozando con paciencia el «origo». O, el origen esotérico de los conceptos en facción con lo tradicional, generalmente, ecléctico; mediante la abducción onírica, llevada a buen término, por la memoria genética (única razón lógica del trascendentalismo.) Hemos conceptuado nuestro libro: “Maya... la pata y el huevo”; con el deseo, no de saber que fue primero; sino, tratar de establecer, el cómo, de esta paradoja. Sabiendo, que lo interdimensional, favorece definitivamente, nuestra (*bíblica) próxima transformación; sobre una nueva concepción filosófica o, nueva forma de ver las cosas, con base en escritos e ideas al parecer estulticias, espurias (adúlteras); sobre lo establecido en el más allá, que nos explique satisfactoriamente; no el concepto de la creación (× Dios y/o, el origen del mundo y del planeta); sino, la sinergia de su origen, del todo simbiótico.
Pues, sabemos que el “polvo cósmico”, es el origen cosmológico de todo; y que la evolución biótica, es igualmente, el todo dentro un proceso vital; que no es otra cosa, que los mismos elementos aplicados en diferentes circunstancias de temperatura, presión, lugar y tiempo. La prueba, de esto, es que (químicamente) podemos llegar a lo mismo, por los múltiples caminos de la alquimia. Pero, además, dentro el concepto material; esto, no funciona para explicar algunos casos, teniendo que recurrir (en cuanto: a espíritu y alma, escencia y substancia divinas) al proceso omnipotente; o, apelar, a la mitología; a la historia; y por último, a la ciencia; en forma una tanto picaresca (por no tener fijo; el cómo; el porqué; el para qué; el desde cuando; y el en donde, estamos; de lo cual, solo sabemos, que es – aquí... para llegar transformados, a allí... o, quedarnos, en la nada... -); siendo esto, un reflejo (inestable) de la aparente, silente estulticia (locura) humana; causa de su muy desagradecido comportamiento ético y poco ortodoxo; pero... que indudable y agradecidamente; es también el producto de la “memoria genética”; que sí nos funciona (y es de libre recuerdo... todas las noches); por ser, como un fiel espejismo de nuestros, «yo» (genéticos) cronométricamente contemporizados, por medio de la interacción onírica. Pero, que hay veces, no lo reconocemos; o no, lo recordamos, por ego ancestral; y entonces, lo negamos todo... o, lo contradecimos todo; que viene siendo lo mismo. Un ejemplo de ello, es nada menos que “La Biblia”; sus impresionantes mensajes esotéricos y simbólicos, solo nos llegan de lejos, pero que cuando, al interpretarlos, los entendemos: sabemos que son solo la verdad revelada. (*Apo. 21.)
Mediante un nuevo sentido de los hechos, y de una nueva concepción de los mismos; estaremos muy atentos, no a tergiversarlos; sino, a interpretarlos; interesados en cuidar lo que nos parece verdadero; e integrarlos luego, a las demás conjeturas sobre el asunto. Sin catarsis violentas, pero fijadas en lo que puede ser trascendental en nosotros, mediante una metamorfosis con equilibrio. - Así como Dios, es con nosotros. - Igualmente, debemos cuidarnos de que idiomáticamente, nuestro pensamiento, no se deje apresar por el lenguaje utilizado en la expresión del mismo; esto, sin llegar a competir con el Creador. Pues aquí... y ahora... no será ésta, una nueva rebelión luzbeliana. Asimismo, contemplar siempre la idea, de unir el discurso monoteísta en general; dentro nuestras propias conjeturas, sin dejar pasar lo absolutamente primordial, que es el amor a Dios. Aprovechando la capacidad (genética) del subconsciente, que en el estado onírico, puede salir del cuerpo o, trascender; mediante la energía positiva, acompañante inseparable del “Espíritu Santo”; como ayuda principal; dentro del proceso cíclico de lo que, finalmente, parecer ser la evolución e involución espiritual, quien, solo de esa forma nos escoltará.
Finalmente. Mediante una psiquis y una psicósfera multidimensional y conjunta, nuestros ideales, avanzarán en el netamente original “espacio-tiempo”; dentro de las principales etapas metafísicas o, mundos del pensamiento: Emanación; creación; formación y activación. Y todo... mientras llega la parusía... tan esperada por el mundo cristiano. Luego, se cruzarán y revelarán las verdaderas fuerzas que mueven el Universo; en lo que se ha dado por llamar la “nueva era de la mente”; precursora de la 2ª., venida de Cristo. Que según todas las elucubraciones e interpretaciones bíblicas, será para el año seis mil de los hebreos; o sea, en el año 2240 de nuestro calendario. Dando cumplimiento, a la interpretación de las palabras de Jesús: Cuando dijo a sus apóstoles, que su regreso sería: «Después de un tiempo, más un tiempo, más la mitad de un tiempo.» Considerando, desde luego, a cada tiempo, en mil años; de nuestro calendario. ¿Muy claro, verdad?
Naturaleza de la realidad.
Nota:
Iremos... buscando oníricamente, nuestros diferentes «yo» (genéticos) como principales entes, responsables de los sectores de este libro; en su muy útil viaje por el espacio-tiempo; tanto en lo micro, como en lo macro. Descubriremos pues, sus principales experiencias y “vivencias”; hasta la segura y muy próxima transformación del ser; durante la próxima parusía.
El universo es uno... en el todo infinito, aparentemente inmóvil, en una quietud ofrecida por el “espacio-tiempo”; cuando, solo una, es la posibilidad absoluta; uno es el acto; una la forma del alma; una la de la materia como materia; y uno el cuerpo como cuerpo. Es un ente, una sola cosa, uno el ser; uno lo máximo y lo óptimo; lo que no admite comprensión y aún, es eterno e interminable y consecuente, al parecer inmóvil y silente; uno... es el tiempo, que para nosotros es eterno, por la amplitud de su espacio; cuya infinita personalidad le da cuerpo al hombre; ya que no existe nada (para nosotros) que no haya sido descubierto y clasificado, por el ser humano (esté donde esté) y esa, constituye su efímera y escasa verdad.
Así, como la materia, está compuesta por protones y electrones; de igual modo, lo está la sociedad; compuesta por individuos conformando su “mundo”; tanto, como unidad o, como realidad. Lo podemos conocer, como armonía con lo eterno y como verdad en su belleza. Así, el mundo... es humano y es visión científica; es también el ser que la determina. Por lo que, conceptualmente, no se puede separar mundo y hombre; así la ciencia intente hacerlo y la religión, conciba esas verdades, como necesidades del hombre y luego, aplique sus valores a esa verdad sabida y conocida; merced a la armonía que queremos y aspiramos a tener con el “Creador”. En un ideal y en una armonía perfecta, tanto en nuestra mente; como en nuestra inexplicable necesidad de lo sobrenatural. Ya que sí existe una verdad matemática (al parecer independiente del hombre); pero descubierta por él. Y ésta, es una... con el ser-universal; está en la mente del ente-universal; y se llama «maya» (en hindú: Ente de Ilusión.) Está además, en el ser-universal y por lo tanto en el ser-individual. Y es a esa ilusión, a la que nosotros iremos siempre que tengamos necesidad de ello; como seres supra-personales. Es una creencia, que, inclusive, a los seres primitivos, que la admiten les conforma su verdad.
En la aprehensión de la verdad. Existe un eterno conflicto, entre mente universal humana y la misma mente circunscrita al individuo. El perpetuo proceso de reconciliación, lo llevan a cabo: La ciencia, la filosofía y la ética: en cualquier caso, si hubiera alguna verdad totalmente desvinculada de la humanidad... como tal, para nosotros sería inexistente. Las cosas existen y suceden; es más, tienen forma y color: debido exclusivamente a nuestra imaginación; nos entra por los ojos y por los sentidos en general; suceden en el espacio-tiempo; constituyen una verdad relacionada sensorialmente o, racionalmente, con el hombre y su religión, como ser supra-personal. Por lo tanto, no podemos negar, que es intrínseco a nosotros, como seres mentales. –
Para concluir, creo... que yendo a la saga, del pensamiento moderno; podremos, en el ir y venir científico, rastrear una serie de observaciones e historias; que nos inspiran, con la brillantez del sol y de los cielos; sobre el origen del espíritu humano captando la existencia. La cual sin duda, nos es otorgada por Dios; o, como un producto de la naturaleza, que en el fondo, es lo mismo. Ya que, cuando hablamos de materia; no solo nos referimos a la inanimada, que incluye paralelamente, la descripción de la vida y de los seres vivos; pues hoy es concebible el comportamiento de la materia viviente, descrito, por Leyes completas y cuantitativas, que bordean igualmente, el campo de los átomos; hasta el punto, en donde los límites, se confunden y se complementan. Lo que realmente difiere, es su origen; sobretodo, el del espíritu, que sabemos que es también divino. Pues, no puede ser circunstancial, ni fortuito, como tampoco lo es su evolución y menos aún, su (bíblica) futura transformación: Sobre esta base, nos iremos desenvolviendo, hasta llegar (filosóficamente) mediante fuerzas magnéticas y de luz; al estado del que salimos. –
Ahora, en la “era de la mente”, suponemos al hombre, poseedor de una fuerza mental, suficiente, como para llegar a Dios; ya que entonces, lo consideraríamos como una fuerza o, como una energía prístina; a la que debemos llegar por medio de su hijo Jesucristo. Además entenderemos, el poder y el porqué, del “libre albedrío”; otorgado directamente por Dios, en el momento de nuestra creación, como seres humanos. Entonces claramente veremos como esa “Luz de Luz”; se encuentra ínter-dimensionada en el Universo; y por tanto también en nosotros.
Apreciaremos en toda su plenitud, el poder de la oración y el ayuno; Igualmente, veremos como en el estado onírico, nuestra mente se halla primordialmente dispuesta para lograr la ínter-comunicación directa con Dios. Finalmente, sabremos, el cómo y el porqué de los escritos de la Biblia; que se realizaron en un lenguaje esotérico, que solo ahora somos capaces de interpretar correctamente, y al hacerlo comprobamos su verdad. Luego comprenderemos el porqué de la ofensa a Dios, mediante el pecado; y el porqué de su “castigo”; ya que las consecuencias de pecar son múltiples, pero siempre en perjuicio nuestro, al adormecer y cegar nuestra inteligencia, y así acostumbrarnos al “error”. Sabremos el porqué de la maldad, y cómo ésta nos restringe y aleja de la presencia de Dios. Comprenderemos, cultivaremos y buscaremos, no a un Dios intervencionista y hasta vengador; sino, a una fuerza de bien, que nos cubre y transforma.
Hacia un humanismo comportamental.
Nota:
(Tomado en paráfrasis, de “Síntesis experimental del comportamiento” Rubén Ardila Ed. Planeta Pág. 188.).
En el camino que ha recorrido la especie humana, desde que comenzó a tener conciencia de sí misma; hemos andado por muchos callejones sin salida. Acerca del hombre y del mundo se han dado numerosas seudo-explicaciones. Se han buscado respuestas, a preguntas mal formuladas y en innumerables casos; se han inventado hipótesis, para justificar nuestra ignorancia al respecto. Un método, que ha brindado resultados positivos; es el de la ciencia, entendiéndose por tal, una actitud directa a los hechos, con el mínimo posible de actitudes preconcebidas. El enfoque inductivo de la ciencia, sin embargo, ha resultado ser incompleto; y hoy sabemos, que para encontrar hechos que nos digan, que hechos debemos tratar de encontrar, dónde buscarlos, y cómo clasificar los hechos hallados. Luego, la necesidad de una teoría es algo que reconocen la mayor parte de los científicos y de los filósofos de la ciencia contemporánea.
El humanismo, no es una teoría científica, sino, un marco de referencia filosófico. Puede ayudarnos a dar sentido, a los hechos científicos y a su aplicación. *Intenta, que la ciencia ayude al hombre, tanto a entender el mundo; como, a cambiarlo. La modificación del comportamiento, es una de las áreas de aplicación, de la sicología actual; en la cual ha sido más compleja la toma de decisiones éticas; en esta área, el control se hace explícito, se eliminan las seudo explicaciones y se reconocen las profundas limitaciones de nuestros conocimientos. Se hace referencia a las contingencias que controlan nuestro comportamiento y la gran dificultad, para tomar decisiones, que se basen en las presiones del ambiente físico y social. Incluyendo el *sistema filo-político, dentro del cual estemos.
Nota:
*Un marco de referencia humanista, basado en el comportamiento, puede implicar una verdadera revolución conceptual.
Luego, el esquema de conversación. Será el hombre y su conducta, no los prejuicios, actitudes y valores de la sociedad. Lo bueno para el hombre, debe ser, a la larga; lo bueno para la sociedad y finalmente para la especie humana, como un todo. El ideal del humanismo comportamental; es el máximo desarrollo del hombre, como tal: Ayudar, a que cada persona, realice sus potencialidades; modificar el ambiente para que sea, reforzante y posibilitante, la actualización, de las capacidades de todas las personas. Los cambios que se requiere, son ideológicos y políticos; no lo son tanto científicos; dado que se poseen muchos conocimientos para mejorar la vida del hombre; pero, estos, no se han puesto en práctica. La sociedad, necesita ayudar al hombre a mejorar, y está en una afirmación más filosófica, que científica. La dicotomía, individuo-sociedad es falsa; dado que los hombres, somos seres sociales por excelencia; nacemos dentro de un grupo; asimilamos las normas de la cultura, y finalmente, las transformamos; o, las aceptamos. El «yo»; es ante toda introversión, de las experiencias del individuo; por el aprendizaje temprano y la estructuración de sus pautas de comportamiento. Al «yo»; lo conocemos por el comportamiento y no va más allá de este. Así el humanismo comportamental, reconoce que la humanidad, es solo una. Mientras que las otras especies, dieron origen a numerosas subespecies; el hombre se conservó como una unidad biológica. Las supuestas inferioridades raciales, no existen; y las diferencias entre los grupos humanos, son culturales, más que biológicas; la hermandad humana, es una meta del humanismo. El hombre resume su comportamiento, en la evolución del mundo biológico, la evolución de su cultura y sus propias interacciones con el ambiente.
Nota:
*Hemos dedicado demasiado tiempo a tratar de entender el mundo; ya es hora, de comenzar a cambiarlo. (Marx)
El mundo de los hechos y el mundo de los valores; no son intrínsecamente diferentes, aunque tampoco son identificables. El mundo de los hechos, puede ilustrarnos a cerca del mundo de los valores; y cuanto mayor nivel de información tengamos, más fácil será tomar las decisiones éticas; pero los dos mundos, no pueden confundirse; lo importante, es indicar que ambos mundos, se fundamentan en el aprendizaje: Cuando nací, no sabía que existía; la “Ley” de la gravitación; ni que fuese bueno amar a mis semejantes. Conceptos aprendidos en la escuela de la vida. El mundo de los valores, además de referirse a lo bueno y lo malo, tiene que ver también con el sentido de la existencia y con el lugar del hombre en el universo físico y social.
La ciencia. No proporciona verdades absolutas; su objetivo, no es encontrar dichas verdades. Las relaciones funcionales, entre los fenómenos que son el producto final de la ciencia; en cuanto, están lejos del concepto de verdad; tal como se considera en la filosofía. El conocimiento, es uno; pero la conciencia, no se interesa en la verdad, ni en lo absoluto. Los últimos - por qué - ; no están en su campo de acción. Pero al conocer el – cómo - ; podremos, tener información más válida sobre el mundo; y el hombre, no será nunca una información final, ni definitiva, sino relativa en el tiempo y en el espacio. La moral; es un asunto humano; no tiene que ver con las “Leyes” dadas, por entes superiores. Tiene que ver con las conductas, que pueden ser positivas o apercibas. La moral del individuo, necesita armonizar con la moral del grupo; y por fin, con el bienestar de la humanidad, como un todo.
Como especie, el hombre, está comenzando su recorrido por el planeta. Tenemos todavía, un largo camino por delante; a menos, que acabemos con el sistema ecológico; en el cual se fundamenta nuestra existencia biológica, o que, las fricciones entre las ideologías, sean demasiado fuertes; y nos lleven, a la destrucción total. Por otra parte, la sicología, es una de las ciencias más jóvenes que existe; de ahí, los conflictos entre las diferentes escuelas; y entre los diversos paradigmas; es de esperar que la sicología logre unificarse, definir sus presupuestos y su metodología; de esa manera podrá contribuir a la futura evolución del hombre, como tal.
Introducción
Nota:
Vivir para los demás, - no es sólo la Ley del deber; es también la Ley de la felicidad.- (Augusto Comte 1708-1850., filósofo francés.)
Vivimos - en el mundo que nos toca vivir; no en el que deseamos vivir. -
Nota del autor:
Parados, pragmáticamente, podemos elegir, otear a la “Luz”; o, sea a Dios; no, como algo, que se encuentra en el más allá; o como alguien, muy ocupado; que nos deja al “libre albedrío”. Sino, como una energía, que se encuentra dentro de nosotros; especialmente en el estado onírico; entonces es cuando lo vemos, lo sentimos y hasta hablamos con él. – A. G.
Nota:
Si digo, - Sea Ud. Teósofo o, mahometano, ésta será una opción muerta; porque para Ud., ninguna de las hipótesis, está viva. Pero, si digo, sea Ud., Agnóstico o, Cristiano; ocurre otro modo, dado su tipo de educación; cada una de las hipótesis tiene algún atractivo, por pequeño que sea, para sus creencias. – (Tomado en paráfrasis, de “Ensayos filosóficos”, de B Russell. Ed. Altaya. 1993. Pág. 122.)
Causas, del choque de las civilizaciones.
(¿Apocalíptico?)
Nota:
(Tomado en paráfrasis, de “Las guerras del Futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Ed. Pñaza & Janes 1994. Pág. 37-39.)
Con sorprendente retraso, hemos empezado a caer en la cuenta (y ahora en una forma seria); de que la civilización industrial está, penosamente, concluyendo... que éste descubrimiento, es evidente, cuando en el - show – del futuro, nos referimos a la crisis general del industrialismo; que aporta consigo la amenaza de más (y no de una) contiendas de nuevo cuño. - Muchos utilizan actualmente el término “posmoderno”, para describir lo que viene tras la modernidad.
Pero, cuando, a comienzos de la década de los años (entre los 80 del siglo pasado); ya se hablaba de esto, y se aludía a las diferencias entre los operativos de la primera ola (agraria); y la segunda ola (industrial); hoy ilusionados, contemplamos la tercera ola (de la automatización informática o, de la cibernética inteligente. Más concretamente: “Como la era de la mente”.) Además, como, no es posible que en nuestra sociedad, se produzca cambios masivos sin conflictos. – Creemos, entonces, que en la planteada metáfora de la historia, como - olas - de cambio. Ésta, es más dinámica, cíclica y reveladora; que hablar de una transición al “pos-modernismo”; o, al de las – olas - dinámicas de hoy. Que cuando estas chocan entre sí, desencadenan poderosas corrientes transversales; cuando el - oleaje – histórico, se estrella contra el muro del “espacio-tiempo”. Generalmente, enfrenta a civilizaciones enteras y nos da pié, para pensar en lo que está pasando ahora, que circunstancialmente, nos parece carente de sentido. - De hecho, una vez que se entiende: las teorías conflictivas de las olas; se hace evidente, el mayor desplazamiento del poder, que empieza a operarse en “La Tierra”, y que profundamente: ya no es entre el “Este” y el “Oeste”; o, entre el “Norte” y el “Sur”; ni siquiera, entre grupos religiosos o, étnicos diferentes. El cambio, es “econo-estratégico”. – “Éste, es más insondable y se encuentra en - la división mundial - de las tres distintas grandes civilizaciones, imperantes hoy”. -
Como sabemos. La civilización de la primera – ola - ; se halla ligada a la tierra (cultivable); sea cual sea, las formas locales que pudo haber en su respectivo lenguaje: “Religión” y “Ley”, supeditadas, a la producción agrícola. - Incluso, hay multitudes que viven en sociedades pre-modernas y agrarias, arañando suelos implacables, al igual que lo hicieron sus antepasados. Si se discute, los orígenes de la civilización de la segunda – ola - ; algunos historiadores, se remontan a sus raíces renacentistas o, incluso antes. - Pero, la vida no cambió fundamentalmente, para la gran mayoría de las personas; solo, hasta hace (±) trescientos años aproximadamente; y fue cuando surgió la ciencia newtoniana; en la que se comenzó a emplear maquinaria de vapor; y empezaron a proliferar las fábricas en Europa; propiciando además, el veloz desplazamiento campesino a las ciudades.
Formando grandes cabezotes de ellas (las ciudades), comprendiendo gentes con nuevas ideas; por ejemplo: La doctrina de los derechos individuales; la razón rousseauniana del “contrato social”; la secularización y la separación de la Iglesia del Estado; y finalmente, la idea de la nueva forma de gobernar por elección popular; dejando el derecho divino para otros tiempos; o, el derecho a gobernar, en manos del elector primario; haciendo realidad, aquello de que: La voz de Dios: es la voz del pueblo, expresada en las urnas (cuando se escruta en una forma diáfana.) - Es por esto, que sus delegados, hoy son auténticamente ungidos; y por lo tanto, en ello radica su responsabilidad; y ésta, es (nada menos que) ante Dios, por ser a Él, principalmente, a quien se la deben: - “El fiel cumplimiento laborioso y honrado de su deber; obtenido y emanado por el libre sufragio popular; que le ha depositado así, todas sus esperanzas”. - Luego, si la clase política no cumple; la “paga”: El pueblo, de una u otra forma, tarde o, temprano, se la “cobra” y a la cárcel... va a dar, el tal... investido.
El patrón de los conflictos.
Nota:
Yo no me encuentro a mí mismo, donde me busco. Me encuentro por sorpresa, cuando menos lo espero. - (Michel E. De Montaigne. 1533-1592. Escritor francés.)
Hay grandes energías, magnéticas, que atraviesan el planeta, por toda la mitad, y constantemente; o sea, por el paralelo 0.0/0.0 Curiosamente, muy cerca de estos sitios, en los cuales hay tierra (paralelos: 20.0/20.0); se encuentran demarcados (desde hace más de 10 mil años); por fenomenales construcciones de piedra; poseedoras de grandes cantidades de cuarzo; el material, por el cual circula el magnetismo.
Muchos de los grandes cambios, realizados hasta la fecha; fueron impulsados por nuevos sistemas de creación de riqueza; producción en serie; consumo masivo; educación y medios de comunicación universales. - Propiciados por nuevos partidos políticos que (necesariamente) resquebrajaron viejas costumbres familiares (adueñadas hereditariamente del poder); surgiendo, entonces, la nueva pequeña familia nuclearia. (Tomado en paráfrasis, de “Las guerras del Futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Ed. Pñaza & Janes 1994. Pág. 37-39.)
Así, la vida - pudo aparecer para algunos... caótica. – Pero, estas transformaciones, sin embargo, en el fondo, estaban estrechamente ligadas; constituyendo, simplemente, unas etapas de desarrollo pleno hacia la modernidad social e industrial; que a la sazón, imponía, grandes movimientos de masas obreras; organizadas en sindicatos, que a la postre, llegaron al poder, conformando por ende, una nueva civilización, que tropezaba con nuevas resistencias y conflictos. En los países industrializados, surgieron duras pugnas sangrientas; por diferentes causas, a menudo auspiciadas por la “Iglesia”, y por las nuevas clases predominantes. Estallaron pues, las “huelgas”; como un suceso de expresión popular; que casi siempre, resultaban en revueltas e insurrecciones civiles; tanto, de frontera, como interiores. Generalmente, explotas al máximo por nacionalismos militares; que aprovechaban (y hoy aprovechan) cualquier situación, para adueñarse del poder (y de todo.) Esquema, que se repitió (y se repite) en los países en vía de desarrollo, e industrialización; así como de comercialización. - Además, en pueblos sin educación: Es por ello, que erróneamente, (por falta de verdaderos líderes) se dice, que “cada País, tiene el régimen de gobierno que se merece”. - (Tomado en paráfrasis, de “Las guerras del Futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Ed. Pñaza & Janes 1994. Pág. 37-39.)
Capítulo I
Notas:
Toda la Tierra, - está al alcance del sabio, ya que la “Patria” de un alma excelente es el universo. - (Demócrito de Abdera 460-370 a. De C. Filósofo griego.)
No podemos - ver el universo, sin colmarnos de la poderosa fuerza del Creador, no hacerlo así, es desconocernos a nosotros mismos, como seres inteligentes. Al verlo de esta forma, sabemos que algún día estaremos en su reino; transformados como “seres de luz”; y entonces, conoceremos de cerca, toda esa maravilla que hoy nos muestra el observatorio astronómico de Hubble; ubicado en órbita espacial. -
La Revolución Cuántica.
Nota:
Pablo Casaseca Jambrina. Citamos a este escritor; por que se cumplen de una manera extraordinaria, todos sus designios; a cerca de la historia de la humanidad; sobre todo, de su desarrollo económico. Él, cree principalmente, que la historia, tiene un proceso cíclico; que se efectúa irreversiblemente a través del tiempo.
El fenómeno de la “vida biológica” es un muy complejo y fascinante, tanto en lo que tiene que ver con el aspecto de las matemáticas; como en la ciencia en general. Igual lo es, en el de la trascendencia a la conciencia (cuántica) colectiva e histórica. Somos parte del universo; este se mira a sí mismo, cuando observamos su complejidad en lo macro y en lo micro. La nano-tecnología, nos abre a la ciencia física cuántica y de allí a la “teoría cuántica”; por ejemplo: Al descubrir, la existencia de la “onda >< partícula”; como un sin fin, de mundos paralelos; al observar electrones... pasar por un doble “agujero”; o, por una doble “rendija”; luego, deducimos que estamos subordinados a esta nueva dimensión en “mundos paralelos”; pues, justamente, cuando un electrón... pasa por un “doble agujero” o, por “dos rendijas”; ahí... y así... estamos ya, en la cuarta dimensión. Igualmente, al hacerlos girar, acelerándolos a altas velocidades, dentro de un torno cilíndrico (rosca gigante); descubrimos entonces: Desde 11; y (por ahora) hasta 24 nuevas dimensiones o, situaciones diferentes de la materia.
Las partes de la materia, forman un todo, tanto en lo micro como en lo macro; así sabemos, que (en escala material) más abajo del átomo, existen las llamadas vibraciones o, “bastones vibrantes” (como en la música.) Igualmente, sabemos que esto, se encuentra en todas partes (luego todo básicamente es música.) Está también, desde luego, dentro de nuestro cerebro (pensante) y de, y por ello, somos consientes; luego, la conciencia se encuentra en el cerebro (y éste, en la cabeza) centro de las ideas. Pero, resulta que hemos sustituido al cerebro; tanto, que hoy (en el Siglo XXI) la tecnología, hasta nos ha hecho dependientes de ella; concretamente, de la “cibernética inteligente”; hasta el grado, de poder, ésta, reemplazarnos; luego, suponemos, que ella, será la encargada de realizar (el trabajo peligroso – a veces sucio - que nosotros, no podemos o, no queremos.) Entre ellos: los vuelos a otros planetas; por ahora y luego, a todo el sistema solar.
Más tarde, a nuestra galaxia misma; para finalmente, viajar, por todo el universo, a súper-exa-velocidades fotónicas, de millones de Klmtrs./Seg. En otras palabras, hemos sintetizado a la inteligencia, separando y extrayendo, solo su parte (neuro-nerviosa) y así, hacerla funcionar independientemente de nuestro cuerpo o, en uno cibernético; el cual sí es capaz de soportar situaciones, que el cuerpo humano, no puede; haciendo, de la “cibernética inteligente” (como transformados en) nuestros otros «yo»; capaces de ir a todas partes, tanto a lo micro como a lo macro; entonces: nos hemos (bíblicamente transformado); o, hemos transmutado a la inteligencia misma. ¡Gloria a Dios!
¿Cambiarán las formas de trabajo?
Nota:
Hoy se habla, - de organizar (en la parte funcional, del trabajo, basados en la “Cibernética Inteligente”) otro tipo de trabajo de apoyo (casero) industrial, para realizar en el hogar y así poder contrarrestar la falta de empleo convencional originada por la sistematización.-
Para ello, se deduce, entonces, la necesidad de organizar a la familia, en la exhortación a otros campos: Tanto en el industrial, como a una pequeña escala o, a la explotación de otros terrenos; lo cual obligaría entonces al “Estado Ciudadano”, a integrarse con el campo; como salida a la necesidad de dar trabajo. Es así, como grandes existencias de tierras, hoy en manos de terratenientes, tendrán que ser repartidas a la ciudadanía, que organizada en “Cooperativas”, podrá así explotarlas. Tierras, hoy cercanas a los grandes centros urbanos o, poblados y por lo tanto, de relativa facilidad para el cuidado, de los depredadores; situación que planteará además, la necesidad de cambiar el esquema de “oferta de trabajo”. Se podrá pensar entonces, en un tipo de explotación “agropecuaria”, en una forma excepcionalmente profesional; de capacitación ciudadana en el “arte” agropecuario; hoy abandonado por la tecnología. Lo que requiere además, de la ayuda de expertos estatales, no de escritorio, sino de campo; haciendo de esta labor: algo atractivo y menos duro. El empleo tradicional agrario, dio un giro e hizo que el hombre buscara salidas a la crisis mundial de la economía y ahora, nuevos campesinos, se muestran en el horizonte.
El drama del desempleo, es mucho más grave de lo que permite imaginar las estadísticas sobre desocupación. - Expertos, pronostican que en Europa el porcentaje de los asalariados industriales pasará del 35% actual al 15% de la población activa. Aunque a primera vista, el sector de servicios parece el indicado, para compensar los empleos perdidos; el proceso de la automatización y la racionalización en seguros, banca, comercio y artesanías, aún está empezando y las posibilidades que ofrece la “Red Internet”, harán superfluos a muchos puestos de trabajo ejercidos en la ciudad. Así, la probabilidad de que se recupere el tradicional “pleno empleo” urbano, de forma sostenible, es aún tan lejana, que se hace necesario, estudiar la posibilidad de otros caminos. -
No basta mejorar la competitividad de las empresas; acelerar, el avance de la ciencia y la modernización del Estado; urge, reflexionar sobre la configuración de una sociedad futura, que entonces, no se base en el clásico “trabajo remunerado”. Ya que la limitación del concepto del trabajo, a la actividad retributiva, es algo que solo existe desde hace 200 años, con la “industrialización”. Esta hizo que se despreciaran las labores domésticas y se excluyeran los índices de crecimiento y bienestar. - Sin embargo, en Alemania, por ejemplo: Se estima que en los hogares, se trabaja cerca de 10.000 millones de horas más, que en el sector privado de la economía. El volumen del trabajo con carácter básico, equivale a un millón de puestos de trabajo con horario completo. A principios del siglo pasado, el ser humano empleaba un 35% de su vida, en el trabajo remunerado. Hoy, ese porcentaje, es solo del 12% o, del 13%. Luego ¿Qué otras oportunidades de ingreso o, actividad, se podría desarrollar, para complementar el tradicional trabajo remunerado? La población pasiva percibe la falta de actividad, como un vacío, porque no consigue mantener su nivel de vida, con lo que recibe. -
En el mundo laboral. - Se montará, bolsas de intercambio de servicios, entre los hogares, para gastar menos y se prestará servicios, a cambio de “unidades de cuenta”; con el propósito, de complementar una economía monetaria con otra; basada en “unidades” de tiempo de intercambio; llamadas también “moneda” (US.) de tiempo. En vista de la creciente necesidad de una formación continuada, la “Comisión Nacional Suiza de la UNESCO”; exige hoy que se reconozca a la “capacitación”, como “actividad laboral”. De otro lado, se propone la entrega de: “Vales de Educación o, Capacitación”. En resumen, son 5; los pilares en que se podría basar la nueva “Sociedad de trabajo”:
1. Actividad retribuida.
2. Labores domésticas.
3. Servicios de intercambio.
4. trabajos "adhonorem".
5. Actividades de formación.
Con ellos, se construiría una “cartera de trabajo” o, actividad opuesta a la tradicional “cartera de ingresos”; lo cual se independizaría del empleo remunerado; así, la ciudadanía, asumirá más responsabilidades “no retribuidas”; y el Estado, necesitará ayudar menos, a los “desempleados”; y los recursos liberados, se podrían aplicar, al fomento de obras para el bien común, en vez de malgastarse, en la administración de otros subsidios improductivos. Luego, nos planteamos esta nueva incógnita: ¿Que se puede hacer para que cada uno pueda contribuir a esta nueva y activa sociedad civil? En primer lugar, habría que dejar de considerar el hogar como: “Economía doméstica”; que no se limite a consumir y disfrutar del “tiempo libre”; sino, como un lugar social de producción de labores domésticas y de ayudas mutuas. - (Tomado de “El Tiempo” Jul. 16/2000 Pág. 4-2.)
De la ciudad-industrial, al campo-agropecuario.
Reflexiones: Por medio del gran avance tecnológico... creo... que puede llegar a ser posible tal integración o, por lo menos su acercamiento y además; la unificación de sus economías, creará una cierta autonomía en la ciudad hoy tan necesitada y pobre; debido a la gran concentración de riqueza y desde luego de tierras productivas, en manos de unos pocos; lo cual ha creado una inmensa falta de trabajo... que el Estado, ha sido incapaz de resolver. Denotando, la necesidad de una verdadera “reforma agraria”; pero, realizada por el pueblo, cuando éste logre estar bien interpretado, en los puestos de comando y de representación; ya que la legislación al respecto, no se ha logrado imponer en sus diferentes reformas. Una nueva “ciudad-estado”; capaz de garantizar la seguridad de sus ciudadanos, en forma suficiente, como para lograr, siquiera, alimentarlos saludablemente. Una “ciudad-estado” amurallada, tal y como las ciudades de la - Edad Media. - Pronosticada, por el escritor y filósofo español: Pablo Casaseca Jambrina; en su libro: “Después del Socialismo”; publicado hace... ya 40 años. Dice (pronosticando) textualmente: - “En todos los cielos, en los alrededores de la fecha correspondiente al año 2000; se iniciará, el movimiento de separación de las “provincias” que se consideren preteridas (omitidas) en el concierto imperial (mundial.) – Estas “provincias”, sin ser necesario que sean un territorio que forme parte del Estado; sino, que sean definidas, por su posición relativa en el conjunto económico-social, que la civilización ha creado y sostenido por el comercio. Existe en todos los casos un foco central de mayor intensidad urbana, al cual, de un modo ostensible se traslada a la capitalidad del imperio (totalidad estatal); cuando, tras un siglo liberal... el pueblo (auténtico) tome sin trabas las riendas del poder”. -
Luego... todos somos culpables: Los que lo entendimos y no hicimos nada y los que sabiéndolo no lo entendieron; y aún los que sabiéndolo y pudiendo hacer algo, no lo hicieron. Pero, hoy cuando cuándo vemos que el País, (y el mundo) está en llamas o, al borde una catástrofe social, no queda otro remedio que aplicar la reforma salvadora o sea, recrear de nuevo la “Ciudad Estado”; Así, todo el País... se debe atrincherar en las principales “Ciudades Estado” y defender desde allí la vida ciudadana. Generalmente, desde estos sitios podremos lanzar ofensivas efectivas de exterminio al “cáncer” que impone por ejemplo: La narco-guerrilla o, los “nacionalismos-militarista”. Para luego, poco a poco, ir despejando los sitios en los cuales se haya aposentado, ésta nueva “lepra”; para, al mismo tiempo, hacer posible las reformas que permita la integración de las economías, del campo agrario y de la ciudad industrial. O sea, la reforma del “integralismo”, que mediante el “cooperativismo”, forje una economía equilibrada, autosuficiente, justa y con oportunidades para todos.
Entonces, la migración, se cumple en todas partes, formas, causas y países; la gente, ante todo, lo que busca es seguridad para todos. - Ya el difunto presidente J. F. Kennedy, lo había dicho cuando impulsaba su “Alianza para el progreso”: «Al cultivador (se refería al suramericano) se le debe pagar muy bien, por los productos de sus cultivos; si es necesario, a “precios de guerra” (dando un fuerte golpe a su atril) o, por lo menos, razonables, que reconozcan, tanto su esfuerzo, como su capacidad de ahorro; al que tiene pleno derecho como ser humano”. –
Sin esperar más. Lo que los grandes terratenientes dispongan, ya que estos nunca llegarán a nada. Las ciudades, están de alguna forma, sitiadas, tal como lo estuvieron antaño. De lo contrario el gran esfuerzo burgués habrá triunfado nuevamente y de pronto, para siempre. Luego, habrá un armisticio (no solamente bélico sino en cuanto a las ideas); entre el campo y la ciudad. Cuando, no solamente el campo vaya a la ciudad sino, que ahora... la ciudad vaya al campo. – La “Broadacre City”, del Arquitecto, Frank Lloyd Wright. - Si para entonces, las cosas estén bien, principalmente debido al buen criterio de nuestros nuevos legisladores (o, auténticos representantes del pueblo.) El País habrá salido de la encrucijada, en la cual nunca debió haber entrado, pero de la que sacó experiencias, conclusiones, y por lo tanto obtuvo sabiduría.
Políticas como la de “pan-coger”; que deja las mejores tierras para el auténtico agricultor; quien por medio del “cooperativismo”, se fortalezca y permita así, una explotación satisfactoria, en el sector agrario; dejando el sector industrial para la ciudad auténtica. O, la unión de ambos; con más y mejor infraestructura; que ofrezca, más y mejores productos competitivos en el ámbito mundial. Con una más y mejor planeación: Acopio, distribución, mercadeo y venta, tanto interna como externa. – Ya se decía que la “justicia social” llega, tarde o temprano, pero llega. La historia del mañana, advierte que esta ha de ser muy distinta; ya que nuestro amado “liberalismo” resultó (a la larga) muy amargo, pero que después de su madurez y transformación; desencadene, el cambio tan esperado por las clases menos favorecidas; manteniendo el “espacio vital” entre las gentes, si es que debemos sobrevivir. Que entonces, varios siglos de explotación ideológica, sirvan siquiera, para el intercambio socio-económico, hoy en términos perentorios y de fronteras abiertas. De lo contrario, se esperan grandes y nuevos cambios, que faciliten, la tan ansiada transformación. (Por: Helmut Saiger.)
Súper-modelos económicos.
La aldea planetaria. - En la nueva era, están emergiendo nuevos conceptos, que le permite a la humanidad alumbrar hacia el ideal de una comunidad planetaria o, global. En la cual, la primacía de las potencias disputará, dentro de los grandes centros de investigación; en las fabricas; las instituciones docentes y en los mercados internacionales. Al tiempo que se perfeccionarán los canales de información, consolidando a esta, como el insumo básico de la planeación y la ejecución de proyectos; desarrollados en forma individual o, integrada. Precisamente: - *La integración de los servicios financieros, apoyada en los progresos de la “informática y de las telecomunicaciones”; hará posible por ejemplo: que la transformación de “bonos y acciones”; así como los desembolsos bancarios, le den la vuelta al mundo, viajando en fracción de segundos; entre las terminales de los múltiples computadores; a través de los cables interoceánicos de fibra óptica y de los satélites artificiales por la “Red Internet”. - De esta forma, el torrente monetario, del sistema capitalista, circula con asombrosa agilidad; irrigando un verdadero progreso, en el nivel mundial. Esta combinación dinámica de las actividades financieras y comerciales, se está extendiendo a la industria; es, en una de sus etapas, la causa de haber logrado increíbles velocidades de propagación, entre los países ejecutantes, de las técnicas descubiertas, para aumentar la productividad, y en los procesos manufactureros.
*Nota:
A propósito, - las máquinas “Fax”; son un invento que ha facilitado el comercio internacional, al incrementar exponencialmente la capacidad de los comerciantes y empresarios, para llegar a los más distantes mercados; en forma ágil y económica. Gracias a este aparato maravilloso, hoy día, una carta se puede transportar, entre los sitios más apartados del planeta, en tan solo 7 segundos. De la misma manera, en la actualidad, cada día más empresas pueden programar sus actividades en el nivel mundial; y además, establecer mayores y más estrechos nexos entre ellas; en virtud de la agilidad de los “sistemas” de comunicaciones; Con la “Red Internet” por ejemplo: Se puede involucrar firmas de dos o más continentes, que trasladen procesos manufactureros a un tercer continente; y establecer, así, economías de “escala”, que solo el alto mercadeo internacional y el procesamiento de materias primas; como también, la colocación de productos terminados y el acceso a la “tecnología de punta”. Así, los avances logrados en los niveles del conocimiento humano, se irrigan en las más diversas ramas de la actividad económica. Es el caso del transporte aéreo... cuya eficaz contribución a la formación de una verdadera “comunidad mundial”, está a punto de dar otro prodigioso salto; estimulado por el crecimiento observado en el tráfico de personas (aunado a la industria hotelera, al ahorro y al crédito) a través del océano Pacífico; que según las proyecciones, llegaría a 315.000 pasajeros diarios; como en efecto resultó, con contadas excepciones, en el pasado año 2000. -
Varios consorcios aeronáuticos, iniciaron una gran carrera para construir lo que fue el “Concorde”; y hoy el “Aerobús” que atraviesa el océano en 5 horas. Pero, el proyecto más ambicioso, de cuyo programa, intenta construir un avión varias veces, más rápido y más potente; para el año 2030; que permitiría, atravesar el océano en casi una hora; lo cual logrará dominar el mercado mundial a mediados de este Siglo XXI. La emergencia de un mundo cada vez más integrado, caracterizado por la aplicación intensiva de conocimientos y técnicas, a un creciente número de actividades; ha desencadenado fuerzas telúricas en los campos económico y político; con sus correspondientes efectos en el consumismo; hechos posibles además, por los avances tecnológicos; permitiendo no solo la generación de una creciente variedad de productos nuevos; sino, también, un sin número de fenómenos; como el aumento en la productividad; el mejoramiento de los sistemas de transporte y comunicación; la agilización de los movimientos de capital y el repunte del sector de los servicios, a costa de la pérdida de peso relativo, por parte de la actividad industrial y agrícola.
En la actualidad, los movimientos de capital, se han convertido en la fuerza motriz de la economía mundial; hasta tal punto, que la economía monetaria, se apropió de una gran porción del lugar que ocupó por mucho tiempo, la economía real, basada en la producción y comercialización de bienes y servicios. Si bien el actual volumen de intercambio mundial de bienes, es el mayor de la historia; lo cierto es que la actividad especuladora en el mercado de capital, es verdaderamente descomunal; hasta el punto de multiplicar por más de 20 el total de los que se intercambian en bienes y servicios. A propósito de los servicios, sector clave en el mundo actual; este genera alrededor del 60% del producto y de las oportunidades de empleo, en las naciones industrializadas; recordemos que entre 1970-1990; del siglo pasado, el comercio de servicios, creció a un promedio anual del 19%; superando los 1.5 trillones de dólares. La participación de la actividad, importaciones-exportaciones, en el comercio mundial; equivalió apenas, al 5% de las transacciones de cambio en 1986 y el 16.5% en 1979. Por otra parte, la medida en que las actividades de alta tecnología, han ido desplazando de los primeros lugares a las actividades industriales tradicionales; se ha venido dando creciente importancia al conocimiento, como fuente de riqueza; incluso más que la disponibilidad de recursos naturales; así lo han entendido las naciones con visión futurista. Una prueba de ello, como en efecto sucedió, sería que en los próximos 10 años, los países integrantes de los 8; pasaron de invertir 2.0% al 3.0% y el 3.5% de sus respectivos productos nacionales; en ciencia y tecnología. Ya en los últimos tiempos, doblaron el número de ingenieros y científicos ocupado en el servicio del universo económico. De ésta manera, éstos países, han logrado duplicar los conocimientos disponibles cada 15 años.
El énfasis que hoy se le da al factor “conocimiento”. Y la mayor eficacia en la utilización de materiales, que de ello se deriva; significa que la producción industrial, abandona cada vez más, la fabricación de aquellos productos, en cuyo proceso, se requiera grandes cantidades de materia prima. Hoy la habilidad y el conocimiento, son los insumos más importantes en la producción de bienes y servicios. La internacionalización de la economía y el auge del consumismo, han aumentado la intensidad de la competencia entre los países y entre las organizaciones comerciales; presionando a las empresas, en la búsqueda de nuevas técnicas que les permita, producir artículos de mayor calidad y especialización. Industrias, como por ejemplo: La relojería, sigue produciendo enormes volúmenes de productos básicos; cuya utilidad fundamental es suministrar la hora; pero cada firma, busca para su modelo, alguna diferenciación, en términos de diseño, color y estilo. Los mayores márgenes de utilidad se obtiene con relojes altamente especializados, destinados a grupos de consumidores con necesidades particulares. Y así, se espera que en el futuro, el usuario estará equipado con microcomputadores de enorme variedad de funciones y éstos se acomoden a sus múltiples intereses. Ahora bien, la necesidad de integrar el mayor grado de tecnología posible a sus respectivos productos; ha llevado a varias industrias, inclusive, a compartir sus adelantos científicos. Tal es el caso de la industria automotriz y la de la aviación, que han combinado su ciencia, para lograr en el presente siglo, el automóvil (eléctrico) que se conduce solo. (Tomado de “Japón / Alemania” de Alvaro Salgado.)
Estrategias económicas para la América Latina.
El éxito espectacular del Japón y de la región Asiática (los dragones); que adoptaron modelos económicos totalmente diferentes a los utilizados en los EU; obliga a los gobiernos de los países en vía de desarrollo, a realizar estudios rigurosos de los modelos asiáticos; para extraer de ellos los aspectos que sean adaptables al medio respectivo. Como se verá en los EU. , y el Japón, se puede identificar alternativas que de ser aplicadas en las proporciones correctas, podrían complementar muy bien las particularidades propias de las economías rezagadas, para crear el modelo adecuado. En ello, los estrategas deberán ser muy cuidadosos; en la era actual, ningún País, puede darse el lujo de dar ventajas innecesarias a sus competidores. Por ejemplo: Esforzándose en seguir al pié de la letra los diferentes pasos recogidos y andados por otros. La economía mundial transcurre en un campo abierto y cada uno de los participantes en el mercado, está obligado a contar con sus propias armas, para negociar. Como diría un filósofo japonés: “El campo internacional, es una guerra, en la que cada País, trata de extraer la riqueza de los demás”.
Hay que reconocer que la vigencia predominante, de una nueva economía global de productos y servicios de alto contenido tecnológico; ofrece una mayor ventaja competitiva en el ámbito humano que en términos de recursos naturales. Ahora bien, es evidente que la mayor parte de la población mundial, se concentra en los Países en vía de desarrollo y que estos sólo participan en un nivel mínimo, en el comercio mundial de tecnología y servicios. No obstante, las economías que se muestren dispuestas a organizarse para aprovechar los sectores de avanzada, encontrarán en esos renglones, la posibilidad de aprovechar múltiples oportunidades. Valga reiterar aquí, que los Países latinoamericanos, no podrán limitarse a seguir los modelos diseñados ya desgastados, por y para otros. Tendrán que idearlos; trazarse directrices de políticas nacionales que desconozcan el entorno mundial; pues, carece de sentido, el hecho de pensar en una economía autárquica, que involucre la ciencia, la tecnología y la innovación en todo nivel.
La respuesta latinoamericana, a los desafíos planteados por los grandes cambios políticos, económicos y aún científicos, ocurridos en el mundo; debe partir de una visión multidisciplinaria que consulte experiencias históricas; las maravillas de la tecnología y el pragmatismo del espíritu empresarial moderno, así como el arte de la persuasión en las relaciones internacionales; las técnicas macroeconómicas y las ciencias sociales. Es una ironía que a medida que las sociedades se han ido volviendo más complejas; y el hombre contemporáneo, es obligado, a prepararse para vivir dentro de sistemas económicos y sociales en permanente transformación; adquiere creciente relevancia, un concepto compartido por la mayoría de los antiguos filósofos griegos; según el cual, el conocimiento universal, es infinitamente superior al conocimiento particular. La curiosidad intelectual que surge del amor por el saber, en su dimensión universal, exhibida por los atenienses en el Siglo V a.C.; por los conciudadanos de Leonardo de Vinci (1452-1519) en el Siglo XV; y practicada hoy por los herederos de Confucio en Asia; deberá ser abrazada con entusiasmo en Latinoamérica. Solo así, podremos enfrentar los desafíos ofrecidos al aspirar a integrarnos a las grandes corrientes económicas y de reducir la brecha tecnológica con respecto a Países como Corea (del Sur) y Taiwán; que solo hasta hace poco compartían con nosotros los problemas del subdesarrollo. Así, si aún pretendemos analizar la “revolución tecnológica”; los grandes cambios políticos y además, los modelos económicos que se han practicado en Latinoamérica, con tan pobre resultado; y los comparamos con los esquemas puestos en práctica y con todo el éxito posible por Japón y los demás países asiáticos. De este proceso, surge una propuesta, fruto de una óptica multidisciplinaria, ecléctica y totalmente desprovista de prejuicios ideológicos. A decir verdad, la gran mayoría de los pueblos latinoamericanos, refleja en la actualidad, lo que alguien denominara “vacío de futuro”; lo cual para él: es el mito gitano, que adivina gratis o, por unas pocas monedas. Para los académicos, empresarios, líderes sociales y religiosos en general; el conocimiento de la sociedad sobre el futuro; se agota casi instantáneamente, se formule, una pregunta de manera relevante, sobre: Los países; sus instituciones y sus procesos.
Para comprender, la marcha hacia delante de los países latinos; el camino preferible, es el de adoptar definitivamente a la ciencia y a la tecnología, como su principal promotor. La vanguardia quedaría muy bien en manos de verdaderos líderes empresariales; expertos en diagnosticar toda la estructura de las empresas públicas y privadas y de proponer alternativas que además de ser viables, sean aún más seguras y realizables; sobretodo, a muy bajos costos relativos. Si se pretende entrar de lleno a participar como verdaderos protagonistas de la “revolución” de los países de Latinoamérica; se deberá conseguir en por lo menos el plazo de una generación (20 años) para pasar de ser prioritariamente productores de materias primas y de bienes y servicios primarios; a fabricar máquinas y que a su vez sirvan para hacer más máquinas o, al menos, repuestos para ellas. Ello no precisamente, requiere haber transitado largamente por la llamada etapa de “sustitución de importaciones”.
Ya, la alta disponibilidad de materias primas. Y la abundancia de mano de obra barata; los mercados cautivos y muchos otros de los factores en los que aún, erróneamente, tienen cifradas sus esperanzas, los países subdesarrollados, para mejorar su correspondiente “nivel de vida”; están mandados a recoger, como la búsqueda del camino por seguir. Hoy sabemos, que para las nuevas tecnologías, tales factores, resultan marginales; pues, los intercambios de información, prevalecen sobre los bienes y servicios. También sabemos, que no son, precisamente, esos los renglones, por los que se define las “tasas de cambio” en la economía mundial; por el contrario, más bien son estas tasas, las que establecen los costos de la mano de obra de un país respecto a otro. Actualmente, las empresas que aspiren a jugar con ciertas posibilidades, dentro del complejo “ajedrez”, de la competencia internacional; deben además, saber hacerlo en forma simultánea jugando en dos tableros: El del productor-abastecedor y el correspondiente al del agente financiero. Así los dos, serán capaces de controlar los riesgos inherentes a las “tasas de cambio”; señales del mercadeo, el financiamiento y la producción para la exportación y las inversiones en el extranjero. Adicionalmente deben pensar, en la necesidad de disponer de una mano de obra cada vez más altamente calificada (y nunca dejarla migrar.)
A propósito, en los países elevadamente industrializados, la intensificación de la producción manufacturera, se traduce, en una disminución del empleo (reservado al obrero) cuyo crecimiento en la pasada década del 1973-1984 de final del pasado Siglo XX; fue del 40%; mientras que el empleo global fue del 30%; luego, (como ya lo vemos hoy) en esta primera década del Siglo XXI; la fuerza laboral obrera industrial decrece, lógicamente, en por lo menos un 10%. - Entonces, si no se es capaz de incrementar la producción manufacturera, reduciendo al mismo tiempo la mano de obra en sus “procesos”, no se podrá catalogar, como un país altamente desarrollado. Así las cosas, todo esfuerzo por conservar esa estructura laboral a cualquier “costo”; irremediablemente conducirá al desempleo masivo; actuando aún en contra de políticos y de líderes sindicales para agravar aún más el asunto. -
Pero, no obstante. No hay que olvidar que en la “geometría” o, econometría del poder económico; se tiene además, la dimensión del campo netamente económico-social. Y que si bien, la figura que representa la distribución actual, por ejemplo del poder “militar” (en los países en que ello es posible) presenta un círculo unipolar que refleja mejor la redistribución del poder económico; tornándose en un triángulo (tripolar) en cuyos vértices se sitúa hoy las potencias mundiales; Definidas como los verdaderos centros de gravedad, en cuanto a las demás naciones del mundo; atraídas por las enormes ventajas de que gozarán las sociedades que se logren enganchar con alguna de estas tres “locomotoras” económicas de alto poder. De esta visión, sobre la dirección en que se mueve la humanidad en su tránsito hacia todo el presente Siglo XXI; surge la “integración económica”, como la fuerza poderosa que ayuda a moldear, nada menos, que el futuro mundial. De ahí, que varios de los principales economistas y de los ejecutivos bancarios de reserva, que atendieron al llamado del Banco Mundial de los EU., celebrada en la última década del Siglo pasado; debieron concentrar principalmente su interés, precisamente en la emergencia acaecida a los tres grandes bloques económicos del orbe. Además de las diferentes opciones expresadas por varios de los dirigentes que asistieron, sintetizaron las principales áreas de verdadero interés en el que se debaten hoy los cinco continentes, a cerca del nuevo surgimiento del “ordenamiento económico tripolar”.
Algunas de las conclusiones, fueron:
* Que los bloques económicos representan la tendencia del futuro.
** Que el sistema de libre comercio sin discriminación para todos los países del mundo capitalista; basado en el acuerdo general de aranceles aduaneros y de comercio (GATT); está, por ahora, entrando en una etapa de grandes y graves dificultades.
*** Que los países que se queden por fuera de los bloques económicos, particularmente las naciones más pobres y sin capacidad negociadora, se enfrentaran entonces, a un futuro muy difícil.
**** Que con la desaparición de la amenaza comunista, del panorama mundial; ha desaparecido igualmente, el aglutinante que mantenía unidas a las tres grandes potencias, alrededor de un mismo propósito, o sea, el de defender a toda cota el “sistema capitalista”; lo cual, hace que las posibilidades de serios conflictos comerciales y de proteccionismo, sean hoy, aún mayores.
Los fenómenos relacionados con la “Revolución Tecnológica”, aceleraron el proceso de la integración europea; éste a su vez, se constituyó en la mejor estrategia para un continente, que encontrar una respuesta frente al poder económico de las multinacionales norteamericanas; y la creciente agresividad de las políticas comerciales japonesas. Si a la iniciativa, como proceso de trascendental importancia, se le agregase la gran re-estructuración económica y política, envolvente de los países sobrevivientes del “comunismo”; debería concluirse, que el centro de atención del mundo y el lugar, en el cual están dadas las condiciones para que surjan los más espectaculares cambios; es el mal llamado “viejo continente”. A diferencia, de lo que ocurre en los otros dos grandes centros de gravedad económica; los acontecimientos europeos, no se pueden analizar únicamente desde la perspectiva de la revolución tecnológica, y de los impulsos revolucionarios de la antigua economía comunista.
Europa, un continente tan rico, en historia, escenario, de los más grandes conflictos de la humanidad, y cuna, de las principales ideas políticas que todavía (a pesar de todo) hoy rigen al mundo. De invaluable aporte (para bien o para mal) al desarrollo científico y cultural de la raza humana. Y que, sin embargo, está al borde de lograr su verdadero destino, mediante la “Integración” (UE.); (hoy desarrollada y perfeccionada pos los USA.) Que, desde la caída del Imperio Romano, la unificación de toda Europa, ha sido el sueño de todos sus gobernantes; no obstante, está logrando un sentimiento paneuropeo; nacido del deseo de lograr un mayor tamaño económico que permita competir exitosamente con los EU., y el Japón. Así las cosas, la actual integración económica de Europa, se puede considerar, como el triunfo más espectacular de la tercera revolución sobre la historia; al conseguir que ésta parte del mundo, diese prioridad a la conveniencia económica; sobre nacionalismos baratos y pasados de moda; como un poderoso bloque económico (democrático); con enormes oportunidades, inclusive, de afectar el curso de la historia.
La rebelión de la campiña.
Nota:
Dentro de su - “historia” de cumplimiento cíclico; Pablo Casaseca Jambrina en su libro “Después del socialismo” Ed. Benzal 1968. Págs. 397-414. - Tomado aquí en paráfrasis. - Nos predice (en forma científica) rasgos de la historia, con una exactitud pasmosa; que se cumpliría medio siglo después de ser escritos: - El proceso que designamos con el nombre de: “Rebelión de la Campiña”. – Que, como también en la revolución francesa; la campiña, auspició el humanismo y defendió a su Patria, con su vida. - Es sin embrago, hoy, el proceso más disyuntivo, de los que entran a constituir la delicada “marquetería” de la historia de la civilización. -
Rompe, la “armonía de su historia”; con la sucesión creadora y se nos muestra hostil, aún a la lógica de nuestros deseos; pero, el ensamblaje de esta nueva pieza, se encuentra, perfectamente determinado por la talla recibida de las anteriores; la continuidad de una ruta, no se interrumpe por un cambio brusco de dirección; el episodio que cae bajo la rúbrica: * “Adrianópolis”, es posible y aún muy rápidamente probable, pero no es esencial; la rebelión de la campiña, es una pieza insustituible dentro e la arquitectura de conjunto; su inserción directa, está dada en la sobrecarga urbana, que encaja, a su vez, en el desbordamiento de la actividad burguesa, realizada a través del “Estado Liberal Democrático”, proclamado por la predicación de Akhenaton; mediante, el edicto de Caracalla y por los “Derechos del Ciudadano” (hoy, los derechos del hombre.)
Nota:
* Época de la gran decadencia del Imperio Romano.
El mapa “imperial” (estatal) que nos hemos trazado (en forma de cumplimiento cíclico) adquiere, así el relieve y la derivación de las costas; y nos presenta además, su faceta lógica: la iniciativa de la historia, cambia de manos con el futuro y ya muy próximo proceso. A la acción, integrante y unificadora de la burguesía; que desde los dispersos grupos de buhoneros y las tímidas factorías en costas extrañas, ha conducido hasta la mayestática mole del “Estado Social”. Sucede ahora otro poder, cuyas intenciones y cuya acción son dispersivos; es (representativamente) la hora Micerino; la hora de Ramsés III; la misma de la división definitiva de Imperio Romano; es (en la historia cíclica) la que corresponde al Siglo XXI. Los que nunca se unieron a la caravana, sedentarios en sus predios, veían con agrado el paso de aquella, que les permitía abastecerse de baratijas a cambio, de que la caravana arramblara (arrastrara) con todos los sobrantes y trazos inútiles que servían de alimento a sus cuerpos y a sus herramientas. Pero, la caravana, termina por asentar sus reales, se multiplica en progresión geométrica; y ya sólo nos envía sus mandatarios, con el encargo de exigir raciones suplementarias, a trueque, de joyeles cada vez más bellos, pero, cada vez más encarecidos; y un día, llega en que sobrantes y trastos inútiles empiezan a escasear y a hacerse necesarios para el buen gobierno de la casa, ahora, agrandada y embellecida por el tráfago de tantos siglos; y por lo mismo, más necesitada de ajuar. La sobrecarga urbana, ha subvertido la relación del interés recíproco y gravitado, sobre el ápice de la curva; deja vía libre para quien quiera tomar el volante y provocar el viraje.
La curva (estadística) inicia su marcha descendente. Pero, su ecuación no padece discontinuidad. La marea, alcanza (como un tsunami) su plenitud; emprende el retroceso y entonces, hemos descrito gráficamente, el descubrimiento progresivo de la playa; desde los tiempos (comparativamente) de Teodosio, hasta la dinastía macedónica. Sólo la burguesía, entonces, es unificadora; sólo la ciudad coordina y enlaza; por eso, cuando la primera, sintiéndose incapaz de abarcar, con sus brazos, los confines delatados de la urbe policéfala, pone “el cetro”, en manos de un Estado que sustituye la andante actividad burguesa, por la actitud estática de un cuerpo de guardia; entonces, están puestas las condiciones, para la acción disgregante. Luego, la burguesía ya no va, porque empieza a faltarle con qué ir; el Estado, envía mandatarios; pero, estos vuelven cada vez más decepcionados y mohínos; abrigando la sospecha de que ni en “matemática comercial”, es posible convencer a nadie, de que la diferencia permanece invariable, cuando se hace crecer progresivamente el sustraendo. Y, ante la reiterativa contumacia, de los que se empeñan en no dejarse convencer, ha de contemplarse pasivamente su taponamiento de oídos, su volverse de espaldas, y su abandono del concierto, que durante centurias escucharon con tanto “agrado”. La iniciativa del combate, es ahora, de los mismos “sitiadores”; entonces, ya hemos – supuestamente - traspuesto los linderos, más allá del año 2000. En todos los ciclos, en los alrededores (que corresponden) a ésta fecha, se inicia el movimiento separatista de las “provincias”, que se consideran preteridas en el concierto imperial (mundial.) Pero, estas “provincias”, no son necesarias que lo sean en el sentido estricto de territorio que forma parte de un Estado; sino, que, vienen definidas por su posición relativa en el conjunto “econo-social”; que la civilización, creada y sostenida por el comercio, establece siempre del mismo modo.
Existe, en todos los casos, un foco central, de mayor intensidad de urbanización, a la cual de un modo ostensible, se traslada siempre la capitalidad efectiva del “Imperio”; cuando con el siglo liberal, la burguesía toma sin trabas las riendas del poder; esta zona central, aparece acompañada por otra que nos hemos acostumbrado a llamar: “Periférica”; donde la densidad urbana, es menor y cuyo papel fundamental, en el concierto de ambas, es el de servir de abastecedora, de los elementos que para llevar a cabo su labor industrial y comercial necesita, la primera. La segunda, de estas zonas, forma parte del “Imperio”, no por un nexo político que la integra formalmente en él; sino, por la relación económica que la une con la primera. En unos casos, como el actual, en cada una de las zonas coexisten múltiples unidades políticas, mientras que en otros, como ocurrió (comparativamente) en el “Imperio Romano”; ambas zonas quedaron integradas en la misma unidad estatal.
La dual estructura, da lugar a discordancias a lo largo de todo el ciclo; pero, es sólo al llegar el momento actual, cuando se rompe de un modo definitivo, el acorde, que con mejor o, peor voluntad; se ha sostenido durante más de once siglos. Cuando llegó el siglo liberal y las ciudades en plena euforia, crecieron desmesuradamente y sobre todo, cuando, con el siglo social, la creación del mercado interior absorbió la mayor parte de los productos de la actividad urbana; la relación económica del campo con la ciudad resultó para el primero, muy “onerosa”, y más de lo permisible. Fue en este momento, en el cual las “provincias” periféricas, integradas o no, en un todo político, con las otras; empezaron a pensar, en romper las amarras que las ataban, a la devoradora zona urbana. Fue en ese, el momento, correspondiente a finales del pasado Siglo XX; en el que los conservadores occidentales, escucharon, en torvo silencio, el discurso, conque se trató de convertirlos, a la noble empresa, de sostener el Estado Social. Y cuando, llegó ese momento: Fue cuando se produjo el gran viraje de la historia; cuando la ciudad, su protagonista, por más de un milenio, cedió su puesto al campo, y se conformó con un segundo papel. Fue entonces, cuando empezó el verdadero repliegue de la “Cuidad-estado”; como el modelo que surge y da lugar a otras imitaciones, para desencadenar nuevamente el proceso, dentro de la historia cíclica que nos ocupa.
Las “provincias”, que se consideraron preteridas. - Llevan ahora el nombre de “países subdesarrollados”; pero, a condición, para que puedan considerarse como auténticas “provincias”; de que, la relación con el “Imperio”, en la época de ascensiones burguesas; haya sido lo suficientemente intensa, como para alcanzar el grado de civilización; necesario, para poder ser consideradas, como parte integrante del “mundo Imperial”. Pero aquellos países, que no llegaron a un estrechamiento de lazos, tan intenso, quedaron y siguen estando situados en un mundo extraño y a ellos; ya les hemos asignado su papel en las próximas, escenas del drama de la “historia cíclica” comparable.
Preponderante, en el acervo de “provincias” occidentales, es el mundo ibero-americano; que contiene en sí, de una manera acusada, las características que en la antigüedad, diferenciaban, al mundo occidental del oriental; y que hoy lo diferencian a él, del mundo norteamericano y de la Europa súper-urbanizada (el Bizancio en la antigüedad.) Tales caracteres diferenciales, le imponen un destino análogo al que hubo de seguir el Imperio Romano de Occidente; y ya comparativamente, los embajadores teodosianos, empezaron a encontrar silencios incomprensibles, como respuesta a sus discursos bizantinizantes, en aquellas tierras. Es un hecho (semejantemente) visible para el observador más superficial, el de que, los precios, son más elevados en aquellas zonas del mundo, donde la densidad de urbanización es mayor; compensados por salarios más altos y que todo intento de urbanización intensa – industrialización - ; se traduce en la época moderna, en una rápida elevación de precios y consiguientemente de salarios; es ello, la manifestación del desequilibrio fundamental que sitúa a la zona periférica, en una situación de desventaja, respecto a la zona central, y que, al acentuarse, da lugar a la ruptura. Esta manifestación, tiene un segundo aspecto, en el seno de cada unidad macroeconómica; cualquiera que sea la zona en la que se halle situada, los llamados precios políticos, mantienen su estado económico artificial, cuando la unidad estatal es suficientemente amplia y origina la misma tensión entre: Campo y ciudad; y por consiguiente, conduce a la ruptura interna.
Nota:
Si digo, - Sea Ud. Teósofo o, mahometano, ésta será una opción muerta; porque para Ud., ninguna de las hipótesis, está viva. Pero, si digo, sea Ud., Agnóstico o, Cristiano; ocurre otro modo, dado su tipo de educación; cada una de las hipótesis tiene algún atractivo, por pequeño que sea, para sus creencias. – (Tomado en paráfrasis, de “Ensayos filosóficos”, de B Russell. Ed. Altaya. 1993. Pág. 122.)
Causas, del choque de las civilizaciones.
(¿Apocalíptico?)
Nota:
(Tomado en paráfrasis, de “Las guerras del Futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Ed. Pñaza & Janes 1994. Pág. 37-39.)
Con sorprendente retraso, hemos empezado a caer en la cuenta (y ahora en una forma seria); de que la civilización industrial está, penosamente, concluyendo... que éste descubrimiento, es evidente, cuando en el - show – del futuro, nos referimos a la crisis general del industrialismo; que aporta consigo la amenaza de más (y no de una) contiendas de nuevo cuño. - Muchos utilizan actualmente el término “posmoderno”, para describir lo que viene tras la modernidad.
Pero, cuando, a comienzos de la década de los años (entre los 80 del siglo pasado); ya se hablaba de esto, y se aludía a las diferencias entre los operativos de la primera ola (agraria); y la segunda ola (industrial); hoy ilusionados, contemplamos la tercera ola (de la automatización informática o, de la cibernética inteligente. Más concretamente: “Como la era de la mente”.) Además, como, no es posible que en nuestra sociedad, se produzca cambios masivos sin conflictos. – Creemos, entonces, que en la planteada metáfora de la historia, como - olas - de cambio. Ésta, es más dinámica, cíclica y reveladora; que hablar de una transición al “pos-modernismo”; o, al de las – olas - dinámicas de hoy. Que cuando estas chocan entre sí, desencadenan poderosas corrientes transversales; cuando el - oleaje – histórico, se estrella contra el muro del “espacio-tiempo”. Generalmente, enfrenta a civilizaciones enteras y nos da pié, para pensar en lo que está pasando ahora, que circunstancialmente, nos parece carente de sentido. - De hecho, una vez que se entiende: las teorías conflictivas de las olas; se hace evidente, el mayor desplazamiento del poder, que empieza a operarse en “La Tierra”, y que profundamente: ya no es entre el “Este” y el “Oeste”; o, entre el “Norte” y el “Sur”; ni siquiera, entre grupos religiosos o, étnicos diferentes. El cambio, es “econo-estratégico”. – “Éste, es más insondable y se encuentra en - la división mundial - de las tres distintas grandes civilizaciones, imperantes hoy”. -
Como sabemos. La civilización de la primera – ola - ; se halla ligada a la tierra (cultivable); sea cual sea, las formas locales que pudo haber en su respectivo lenguaje: “Religión” y “Ley”, supeditadas, a la producción agrícola. - Incluso, hay multitudes que viven en sociedades pre-modernas y agrarias, arañando suelos implacables, al igual que lo hicieron sus antepasados. Si se discute, los orígenes de la civilización de la segunda – ola - ; algunos historiadores, se remontan a sus raíces renacentistas o, incluso antes. - Pero, la vida no cambió fundamentalmente, para la gran mayoría de las personas; solo, hasta hace (±) trescientos años aproximadamente; y fue cuando surgió la ciencia newtoniana; en la que se comenzó a emplear maquinaria de vapor; y empezaron a proliferar las fábricas en Europa; propiciando además, el veloz desplazamiento campesino a las ciudades.
Formando grandes cabezotes de ellas (las ciudades), comprendiendo gentes con nuevas ideas; por ejemplo: La doctrina de los derechos individuales; la razón rousseauniana del “contrato social”; la secularización y la separación de la Iglesia del Estado; y finalmente, la idea de la nueva forma de gobernar por elección popular; dejando el derecho divino para otros tiempos; o, el derecho a gobernar, en manos del elector primario; haciendo realidad, aquello de que: La voz de Dios: es la voz del pueblo, expresada en las urnas (cuando se escruta en una forma diáfana.) - Es por esto, que sus delegados, hoy son auténticamente ungidos; y por lo tanto, en ello radica su responsabilidad; y ésta, es (nada menos que) ante Dios, por ser a Él, principalmente, a quien se la deben: - “El fiel cumplimiento laborioso y honrado de su deber; obtenido y emanado por el libre sufragio popular; que le ha depositado así, todas sus esperanzas”. - Luego, si la clase política no cumple; la “paga”: El pueblo, de una u otra forma, tarde o, temprano, se la “cobra” y a la cárcel... va a dar, el tal... investido.
El patrón de los conflictos.
Nota:
Yo no me encuentro a mí mismo, donde me busco. Me encuentro por sorpresa, cuando menos lo espero. - (Michel E. De Montaigne. 1533-1592. Escritor francés.)
Hay grandes energías, magnéticas, que atraviesan el planeta, por toda la mitad, y constantemente; o sea, por el paralelo 0.0/0.0 Curiosamente, muy cerca de estos sitios, en los cuales hay tierra (paralelos: 20.0/20.0); se encuentran demarcados (desde hace más de 10 mil años); por fenomenales construcciones de piedra; poseedoras de grandes cantidades de cuarzo; el material, por el cual circula el magnetismo.
Muchos de los grandes cambios, realizados hasta la fecha; fueron impulsados por nuevos sistemas de creación de riqueza; producción en serie; consumo masivo; educación y medios de comunicación universales. - Propiciados por nuevos partidos políticos que (necesariamente) resquebrajaron viejas costumbres familiares (adueñadas hereditariamente del poder); surgiendo, entonces, la nueva pequeña familia nuclearia. (Tomado en paráfrasis, de “Las guerras del Futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Ed. Pñaza & Janes 1994. Pág. 37-39.)
Así, la vida - pudo aparecer para algunos... caótica. – Pero, estas transformaciones, sin embargo, en el fondo, estaban estrechamente ligadas; constituyendo, simplemente, unas etapas de desarrollo pleno hacia la modernidad social e industrial; que a la sazón, imponía, grandes movimientos de masas obreras; organizadas en sindicatos, que a la postre, llegaron al poder, conformando por ende, una nueva civilización, que tropezaba con nuevas resistencias y conflictos. En los países industrializados, surgieron duras pugnas sangrientas; por diferentes causas, a menudo auspiciadas por la “Iglesia”, y por las nuevas clases predominantes. Estallaron pues, las “huelgas”; como un suceso de expresión popular; que casi siempre, resultaban en revueltas e insurrecciones civiles; tanto, de frontera, como interiores. Generalmente, explotas al máximo por nacionalismos militares; que aprovechaban (y hoy aprovechan) cualquier situación, para adueñarse del poder (y de todo.) Esquema, que se repitió (y se repite) en los países en vía de desarrollo, e industrialización; así como de comercialización. - Además, en pueblos sin educación: Es por ello, que erróneamente, (por falta de verdaderos líderes) se dice, que “cada País, tiene el régimen de gobierno que se merece”. - (Tomado en paráfrasis, de “Las guerras del Futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Ed. Pñaza & Janes 1994. Pág. 37-39.)
Capítulo I
Notas:
Toda la Tierra, - está al alcance del sabio, ya que la “Patria” de un alma excelente es el universo. - (Demócrito de Abdera 460-370 a. De C. Filósofo griego.)
No podemos - ver el universo, sin colmarnos de la poderosa fuerza del Creador, no hacerlo así, es desconocernos a nosotros mismos, como seres inteligentes. Al verlo de esta forma, sabemos que algún día estaremos en su reino; transformados como “seres de luz”; y entonces, conoceremos de cerca, toda esa maravilla que hoy nos muestra el observatorio astronómico de Hubble; ubicado en órbita espacial. -
La Revolución Cuántica.
Nota:
Pablo Casaseca Jambrina. Citamos a este escritor; por que se cumplen de una manera extraordinaria, todos sus designios; a cerca de la historia de la humanidad; sobre todo, de su desarrollo económico. Él, cree principalmente, que la historia, tiene un proceso cíclico; que se efectúa irreversiblemente a través del tiempo.
El fenómeno de la “vida biológica” es un muy complejo y fascinante, tanto en lo que tiene que ver con el aspecto de las matemáticas; como en la ciencia en general. Igual lo es, en el de la trascendencia a la conciencia (cuántica) colectiva e histórica. Somos parte del universo; este se mira a sí mismo, cuando observamos su complejidad en lo macro y en lo micro. La nano-tecnología, nos abre a la ciencia física cuántica y de allí a la “teoría cuántica”; por ejemplo: Al descubrir, la existencia de la “onda >< partícula”; como un sin fin, de mundos paralelos; al observar electrones... pasar por un doble “agujero”; o, por una doble “rendija”; luego, deducimos que estamos subordinados a esta nueva dimensión en “mundos paralelos”; pues, justamente, cuando un electrón... pasa por un “doble agujero” o, por “dos rendijas”; ahí... y así... estamos ya, en la cuarta dimensión. Igualmente, al hacerlos girar, acelerándolos a altas velocidades, dentro de un torno cilíndrico (rosca gigante); descubrimos entonces: Desde 11; y (por ahora) hasta 24 nuevas dimensiones o, situaciones diferentes de la materia.
Las partes de la materia, forman un todo, tanto en lo micro como en lo macro; así sabemos, que (en escala material) más abajo del átomo, existen las llamadas vibraciones o, “bastones vibrantes” (como en la música.) Igualmente, sabemos que esto, se encuentra en todas partes (luego todo básicamente es música.) Está también, desde luego, dentro de nuestro cerebro (pensante) y de, y por ello, somos consientes; luego, la conciencia se encuentra en el cerebro (y éste, en la cabeza) centro de las ideas. Pero, resulta que hemos sustituido al cerebro; tanto, que hoy (en el Siglo XXI) la tecnología, hasta nos ha hecho dependientes de ella; concretamente, de la “cibernética inteligente”; hasta el grado, de poder, ésta, reemplazarnos; luego, suponemos, que ella, será la encargada de realizar (el trabajo peligroso – a veces sucio - que nosotros, no podemos o, no queremos.) Entre ellos: los vuelos a otros planetas; por ahora y luego, a todo el sistema solar.
Más tarde, a nuestra galaxia misma; para finalmente, viajar, por todo el universo, a súper-exa-velocidades fotónicas, de millones de Klmtrs./Seg. En otras palabras, hemos sintetizado a la inteligencia, separando y extrayendo, solo su parte (neuro-nerviosa) y así, hacerla funcionar independientemente de nuestro cuerpo o, en uno cibernético; el cual sí es capaz de soportar situaciones, que el cuerpo humano, no puede; haciendo, de la “cibernética inteligente” (como transformados en) nuestros otros «yo»; capaces de ir a todas partes, tanto a lo micro como a lo macro; entonces: nos hemos (bíblicamente transformado); o, hemos transmutado a la inteligencia misma. ¡Gloria a Dios!
¿Cambiarán las formas de trabajo?
Nota:
Hoy se habla, - de organizar (en la parte funcional, del trabajo, basados en la “Cibernética Inteligente”) otro tipo de trabajo de apoyo (casero) industrial, para realizar en el hogar y así poder contrarrestar la falta de empleo convencional originada por la sistematización.-
Para ello, se deduce, entonces, la necesidad de organizar a la familia, en la exhortación a otros campos: Tanto en el industrial, como a una pequeña escala o, a la explotación de otros terrenos; lo cual obligaría entonces al “Estado Ciudadano”, a integrarse con el campo; como salida a la necesidad de dar trabajo. Es así, como grandes existencias de tierras, hoy en manos de terratenientes, tendrán que ser repartidas a la ciudadanía, que organizada en “Cooperativas”, podrá así explotarlas. Tierras, hoy cercanas a los grandes centros urbanos o, poblados y por lo tanto, de relativa facilidad para el cuidado, de los depredadores; situación que planteará además, la necesidad de cambiar el esquema de “oferta de trabajo”. Se podrá pensar entonces, en un tipo de explotación “agropecuaria”, en una forma excepcionalmente profesional; de capacitación ciudadana en el “arte” agropecuario; hoy abandonado por la tecnología. Lo que requiere además, de la ayuda de expertos estatales, no de escritorio, sino de campo; haciendo de esta labor: algo atractivo y menos duro. El empleo tradicional agrario, dio un giro e hizo que el hombre buscara salidas a la crisis mundial de la economía y ahora, nuevos campesinos, se muestran en el horizonte.
El drama del desempleo, es mucho más grave de lo que permite imaginar las estadísticas sobre desocupación. - Expertos, pronostican que en Europa el porcentaje de los asalariados industriales pasará del 35% actual al 15% de la población activa. Aunque a primera vista, el sector de servicios parece el indicado, para compensar los empleos perdidos; el proceso de la automatización y la racionalización en seguros, banca, comercio y artesanías, aún está empezando y las posibilidades que ofrece la “Red Internet”, harán superfluos a muchos puestos de trabajo ejercidos en la ciudad. Así, la probabilidad de que se recupere el tradicional “pleno empleo” urbano, de forma sostenible, es aún tan lejana, que se hace necesario, estudiar la posibilidad de otros caminos. -
No basta mejorar la competitividad de las empresas; acelerar, el avance de la ciencia y la modernización del Estado; urge, reflexionar sobre la configuración de una sociedad futura, que entonces, no se base en el clásico “trabajo remunerado”. Ya que la limitación del concepto del trabajo, a la actividad retributiva, es algo que solo existe desde hace 200 años, con la “industrialización”. Esta hizo que se despreciaran las labores domésticas y se excluyeran los índices de crecimiento y bienestar. - Sin embargo, en Alemania, por ejemplo: Se estima que en los hogares, se trabaja cerca de 10.000 millones de horas más, que en el sector privado de la economía. El volumen del trabajo con carácter básico, equivale a un millón de puestos de trabajo con horario completo. A principios del siglo pasado, el ser humano empleaba un 35% de su vida, en el trabajo remunerado. Hoy, ese porcentaje, es solo del 12% o, del 13%. Luego ¿Qué otras oportunidades de ingreso o, actividad, se podría desarrollar, para complementar el tradicional trabajo remunerado? La población pasiva percibe la falta de actividad, como un vacío, porque no consigue mantener su nivel de vida, con lo que recibe. -
En el mundo laboral. - Se montará, bolsas de intercambio de servicios, entre los hogares, para gastar menos y se prestará servicios, a cambio de “unidades de cuenta”; con el propósito, de complementar una economía monetaria con otra; basada en “unidades” de tiempo de intercambio; llamadas también “moneda” (US.) de tiempo. En vista de la creciente necesidad de una formación continuada, la “Comisión Nacional Suiza de la UNESCO”; exige hoy que se reconozca a la “capacitación”, como “actividad laboral”. De otro lado, se propone la entrega de: “Vales de Educación o, Capacitación”. En resumen, son 5; los pilares en que se podría basar la nueva “Sociedad de trabajo”:
1. Actividad retribuida.
2. Labores domésticas.
3. Servicios de intercambio.
4. trabajos "adhonorem".
5. Actividades de formación.
Con ellos, se construiría una “cartera de trabajo” o, actividad opuesta a la tradicional “cartera de ingresos”; lo cual se independizaría del empleo remunerado; así, la ciudadanía, asumirá más responsabilidades “no retribuidas”; y el Estado, necesitará ayudar menos, a los “desempleados”; y los recursos liberados, se podrían aplicar, al fomento de obras para el bien común, en vez de malgastarse, en la administración de otros subsidios improductivos. Luego, nos planteamos esta nueva incógnita: ¿Que se puede hacer para que cada uno pueda contribuir a esta nueva y activa sociedad civil? En primer lugar, habría que dejar de considerar el hogar como: “Economía doméstica”; que no se limite a consumir y disfrutar del “tiempo libre”; sino, como un lugar social de producción de labores domésticas y de ayudas mutuas. - (Tomado de “El Tiempo” Jul. 16/2000 Pág. 4-2.)
De la ciudad-industrial, al campo-agropecuario.
Reflexiones: Por medio del gran avance tecnológico... creo... que puede llegar a ser posible tal integración o, por lo menos su acercamiento y además; la unificación de sus economías, creará una cierta autonomía en la ciudad hoy tan necesitada y pobre; debido a la gran concentración de riqueza y desde luego de tierras productivas, en manos de unos pocos; lo cual ha creado una inmensa falta de trabajo... que el Estado, ha sido incapaz de resolver. Denotando, la necesidad de una verdadera “reforma agraria”; pero, realizada por el pueblo, cuando éste logre estar bien interpretado, en los puestos de comando y de representación; ya que la legislación al respecto, no se ha logrado imponer en sus diferentes reformas. Una nueva “ciudad-estado”; capaz de garantizar la seguridad de sus ciudadanos, en forma suficiente, como para lograr, siquiera, alimentarlos saludablemente. Una “ciudad-estado” amurallada, tal y como las ciudades de la - Edad Media. - Pronosticada, por el escritor y filósofo español: Pablo Casaseca Jambrina; en su libro: “Después del Socialismo”; publicado hace... ya 40 años. Dice (pronosticando) textualmente: - “En todos los cielos, en los alrededores de la fecha correspondiente al año 2000; se iniciará, el movimiento de separación de las “provincias” que se consideren preteridas (omitidas) en el concierto imperial (mundial.) – Estas “provincias”, sin ser necesario que sean un territorio que forme parte del Estado; sino, que sean definidas, por su posición relativa en el conjunto económico-social, que la civilización ha creado y sostenido por el comercio. Existe en todos los casos un foco central de mayor intensidad urbana, al cual, de un modo ostensible se traslada a la capitalidad del imperio (totalidad estatal); cuando, tras un siglo liberal... el pueblo (auténtico) tome sin trabas las riendas del poder”. -
Luego... todos somos culpables: Los que lo entendimos y no hicimos nada y los que sabiéndolo no lo entendieron; y aún los que sabiéndolo y pudiendo hacer algo, no lo hicieron. Pero, hoy cuando cuándo vemos que el País, (y el mundo) está en llamas o, al borde una catástrofe social, no queda otro remedio que aplicar la reforma salvadora o sea, recrear de nuevo la “Ciudad Estado”; Así, todo el País... se debe atrincherar en las principales “Ciudades Estado” y defender desde allí la vida ciudadana. Generalmente, desde estos sitios podremos lanzar ofensivas efectivas de exterminio al “cáncer” que impone por ejemplo: La narco-guerrilla o, los “nacionalismos-militarista”. Para luego, poco a poco, ir despejando los sitios en los cuales se haya aposentado, ésta nueva “lepra”; para, al mismo tiempo, hacer posible las reformas que permita la integración de las economías, del campo agrario y de la ciudad industrial. O sea, la reforma del “integralismo”, que mediante el “cooperativismo”, forje una economía equilibrada, autosuficiente, justa y con oportunidades para todos.
Entonces, la migración, se cumple en todas partes, formas, causas y países; la gente, ante todo, lo que busca es seguridad para todos. - Ya el difunto presidente J. F. Kennedy, lo había dicho cuando impulsaba su “Alianza para el progreso”: «Al cultivador (se refería al suramericano) se le debe pagar muy bien, por los productos de sus cultivos; si es necesario, a “precios de guerra” (dando un fuerte golpe a su atril) o, por lo menos, razonables, que reconozcan, tanto su esfuerzo, como su capacidad de ahorro; al que tiene pleno derecho como ser humano”. –
Sin esperar más. Lo que los grandes terratenientes dispongan, ya que estos nunca llegarán a nada. Las ciudades, están de alguna forma, sitiadas, tal como lo estuvieron antaño. De lo contrario el gran esfuerzo burgués habrá triunfado nuevamente y de pronto, para siempre. Luego, habrá un armisticio (no solamente bélico sino en cuanto a las ideas); entre el campo y la ciudad. Cuando, no solamente el campo vaya a la ciudad sino, que ahora... la ciudad vaya al campo. – La “Broadacre City”, del Arquitecto, Frank Lloyd Wright. - Si para entonces, las cosas estén bien, principalmente debido al buen criterio de nuestros nuevos legisladores (o, auténticos representantes del pueblo.) El País habrá salido de la encrucijada, en la cual nunca debió haber entrado, pero de la que sacó experiencias, conclusiones, y por lo tanto obtuvo sabiduría.
Políticas como la de “pan-coger”; que deja las mejores tierras para el auténtico agricultor; quien por medio del “cooperativismo”, se fortalezca y permita así, una explotación satisfactoria, en el sector agrario; dejando el sector industrial para la ciudad auténtica. O, la unión de ambos; con más y mejor infraestructura; que ofrezca, más y mejores productos competitivos en el ámbito mundial. Con una más y mejor planeación: Acopio, distribución, mercadeo y venta, tanto interna como externa. – Ya se decía que la “justicia social” llega, tarde o temprano, pero llega. La historia del mañana, advierte que esta ha de ser muy distinta; ya que nuestro amado “liberalismo” resultó (a la larga) muy amargo, pero que después de su madurez y transformación; desencadene, el cambio tan esperado por las clases menos favorecidas; manteniendo el “espacio vital” entre las gentes, si es que debemos sobrevivir. Que entonces, varios siglos de explotación ideológica, sirvan siquiera, para el intercambio socio-económico, hoy en términos perentorios y de fronteras abiertas. De lo contrario, se esperan grandes y nuevos cambios, que faciliten, la tan ansiada transformación. (Por: Helmut Saiger.)
Súper-modelos económicos.
La aldea planetaria. - En la nueva era, están emergiendo nuevos conceptos, que le permite a la humanidad alumbrar hacia el ideal de una comunidad planetaria o, global. En la cual, la primacía de las potencias disputará, dentro de los grandes centros de investigación; en las fabricas; las instituciones docentes y en los mercados internacionales. Al tiempo que se perfeccionarán los canales de información, consolidando a esta, como el insumo básico de la planeación y la ejecución de proyectos; desarrollados en forma individual o, integrada. Precisamente: - *La integración de los servicios financieros, apoyada en los progresos de la “informática y de las telecomunicaciones”; hará posible por ejemplo: que la transformación de “bonos y acciones”; así como los desembolsos bancarios, le den la vuelta al mundo, viajando en fracción de segundos; entre las terminales de los múltiples computadores; a través de los cables interoceánicos de fibra óptica y de los satélites artificiales por la “Red Internet”. - De esta forma, el torrente monetario, del sistema capitalista, circula con asombrosa agilidad; irrigando un verdadero progreso, en el nivel mundial. Esta combinación dinámica de las actividades financieras y comerciales, se está extendiendo a la industria; es, en una de sus etapas, la causa de haber logrado increíbles velocidades de propagación, entre los países ejecutantes, de las técnicas descubiertas, para aumentar la productividad, y en los procesos manufactureros.
*Nota:
A propósito, - las máquinas “Fax”; son un invento que ha facilitado el comercio internacional, al incrementar exponencialmente la capacidad de los comerciantes y empresarios, para llegar a los más distantes mercados; en forma ágil y económica. Gracias a este aparato maravilloso, hoy día, una carta se puede transportar, entre los sitios más apartados del planeta, en tan solo 7 segundos. De la misma manera, en la actualidad, cada día más empresas pueden programar sus actividades en el nivel mundial; y además, establecer mayores y más estrechos nexos entre ellas; en virtud de la agilidad de los “sistemas” de comunicaciones; Con la “Red Internet” por ejemplo: Se puede involucrar firmas de dos o más continentes, que trasladen procesos manufactureros a un tercer continente; y establecer, así, economías de “escala”, que solo el alto mercadeo internacional y el procesamiento de materias primas; como también, la colocación de productos terminados y el acceso a la “tecnología de punta”. Así, los avances logrados en los niveles del conocimiento humano, se irrigan en las más diversas ramas de la actividad económica. Es el caso del transporte aéreo... cuya eficaz contribución a la formación de una verdadera “comunidad mundial”, está a punto de dar otro prodigioso salto; estimulado por el crecimiento observado en el tráfico de personas (aunado a la industria hotelera, al ahorro y al crédito) a través del océano Pacífico; que según las proyecciones, llegaría a 315.000 pasajeros diarios; como en efecto resultó, con contadas excepciones, en el pasado año 2000. -
Varios consorcios aeronáuticos, iniciaron una gran carrera para construir lo que fue el “Concorde”; y hoy el “Aerobús” que atraviesa el océano en 5 horas. Pero, el proyecto más ambicioso, de cuyo programa, intenta construir un avión varias veces, más rápido y más potente; para el año 2030; que permitiría, atravesar el océano en casi una hora; lo cual logrará dominar el mercado mundial a mediados de este Siglo XXI. La emergencia de un mundo cada vez más integrado, caracterizado por la aplicación intensiva de conocimientos y técnicas, a un creciente número de actividades; ha desencadenado fuerzas telúricas en los campos económico y político; con sus correspondientes efectos en el consumismo; hechos posibles además, por los avances tecnológicos; permitiendo no solo la generación de una creciente variedad de productos nuevos; sino, también, un sin número de fenómenos; como el aumento en la productividad; el mejoramiento de los sistemas de transporte y comunicación; la agilización de los movimientos de capital y el repunte del sector de los servicios, a costa de la pérdida de peso relativo, por parte de la actividad industrial y agrícola.
En la actualidad, los movimientos de capital, se han convertido en la fuerza motriz de la economía mundial; hasta tal punto, que la economía monetaria, se apropió de una gran porción del lugar que ocupó por mucho tiempo, la economía real, basada en la producción y comercialización de bienes y servicios. Si bien el actual volumen de intercambio mundial de bienes, es el mayor de la historia; lo cierto es que la actividad especuladora en el mercado de capital, es verdaderamente descomunal; hasta el punto de multiplicar por más de 20 el total de los que se intercambian en bienes y servicios. A propósito de los servicios, sector clave en el mundo actual; este genera alrededor del 60% del producto y de las oportunidades de empleo, en las naciones industrializadas; recordemos que entre 1970-1990; del siglo pasado, el comercio de servicios, creció a un promedio anual del 19%; superando los 1.5 trillones de dólares. La participación de la actividad, importaciones-exportaciones, en el comercio mundial; equivalió apenas, al 5% de las transacciones de cambio en 1986 y el 16.5% en 1979. Por otra parte, la medida en que las actividades de alta tecnología, han ido desplazando de los primeros lugares a las actividades industriales tradicionales; se ha venido dando creciente importancia al conocimiento, como fuente de riqueza; incluso más que la disponibilidad de recursos naturales; así lo han entendido las naciones con visión futurista. Una prueba de ello, como en efecto sucedió, sería que en los próximos 10 años, los países integrantes de los 8; pasaron de invertir 2.0% al 3.0% y el 3.5% de sus respectivos productos nacionales; en ciencia y tecnología. Ya en los últimos tiempos, doblaron el número de ingenieros y científicos ocupado en el servicio del universo económico. De ésta manera, éstos países, han logrado duplicar los conocimientos disponibles cada 15 años.
El énfasis que hoy se le da al factor “conocimiento”. Y la mayor eficacia en la utilización de materiales, que de ello se deriva; significa que la producción industrial, abandona cada vez más, la fabricación de aquellos productos, en cuyo proceso, se requiera grandes cantidades de materia prima. Hoy la habilidad y el conocimiento, son los insumos más importantes en la producción de bienes y servicios. La internacionalización de la economía y el auge del consumismo, han aumentado la intensidad de la competencia entre los países y entre las organizaciones comerciales; presionando a las empresas, en la búsqueda de nuevas técnicas que les permita, producir artículos de mayor calidad y especialización. Industrias, como por ejemplo: La relojería, sigue produciendo enormes volúmenes de productos básicos; cuya utilidad fundamental es suministrar la hora; pero cada firma, busca para su modelo, alguna diferenciación, en términos de diseño, color y estilo. Los mayores márgenes de utilidad se obtiene con relojes altamente especializados, destinados a grupos de consumidores con necesidades particulares. Y así, se espera que en el futuro, el usuario estará equipado con microcomputadores de enorme variedad de funciones y éstos se acomoden a sus múltiples intereses. Ahora bien, la necesidad de integrar el mayor grado de tecnología posible a sus respectivos productos; ha llevado a varias industrias, inclusive, a compartir sus adelantos científicos. Tal es el caso de la industria automotriz y la de la aviación, que han combinado su ciencia, para lograr en el presente siglo, el automóvil (eléctrico) que se conduce solo. (Tomado de “Japón / Alemania” de Alvaro Salgado.)
Estrategias económicas para la América Latina.
El éxito espectacular del Japón y de la región Asiática (los dragones); que adoptaron modelos económicos totalmente diferentes a los utilizados en los EU; obliga a los gobiernos de los países en vía de desarrollo, a realizar estudios rigurosos de los modelos asiáticos; para extraer de ellos los aspectos que sean adaptables al medio respectivo. Como se verá en los EU. , y el Japón, se puede identificar alternativas que de ser aplicadas en las proporciones correctas, podrían complementar muy bien las particularidades propias de las economías rezagadas, para crear el modelo adecuado. En ello, los estrategas deberán ser muy cuidadosos; en la era actual, ningún País, puede darse el lujo de dar ventajas innecesarias a sus competidores. Por ejemplo: Esforzándose en seguir al pié de la letra los diferentes pasos recogidos y andados por otros. La economía mundial transcurre en un campo abierto y cada uno de los participantes en el mercado, está obligado a contar con sus propias armas, para negociar. Como diría un filósofo japonés: “El campo internacional, es una guerra, en la que cada País, trata de extraer la riqueza de los demás”.
Hay que reconocer que la vigencia predominante, de una nueva economía global de productos y servicios de alto contenido tecnológico; ofrece una mayor ventaja competitiva en el ámbito humano que en términos de recursos naturales. Ahora bien, es evidente que la mayor parte de la población mundial, se concentra en los Países en vía de desarrollo y que estos sólo participan en un nivel mínimo, en el comercio mundial de tecnología y servicios. No obstante, las economías que se muestren dispuestas a organizarse para aprovechar los sectores de avanzada, encontrarán en esos renglones, la posibilidad de aprovechar múltiples oportunidades. Valga reiterar aquí, que los Países latinoamericanos, no podrán limitarse a seguir los modelos diseñados ya desgastados, por y para otros. Tendrán que idearlos; trazarse directrices de políticas nacionales que desconozcan el entorno mundial; pues, carece de sentido, el hecho de pensar en una economía autárquica, que involucre la ciencia, la tecnología y la innovación en todo nivel.
La respuesta latinoamericana, a los desafíos planteados por los grandes cambios políticos, económicos y aún científicos, ocurridos en el mundo; debe partir de una visión multidisciplinaria que consulte experiencias históricas; las maravillas de la tecnología y el pragmatismo del espíritu empresarial moderno, así como el arte de la persuasión en las relaciones internacionales; las técnicas macroeconómicas y las ciencias sociales. Es una ironía que a medida que las sociedades se han ido volviendo más complejas; y el hombre contemporáneo, es obligado, a prepararse para vivir dentro de sistemas económicos y sociales en permanente transformación; adquiere creciente relevancia, un concepto compartido por la mayoría de los antiguos filósofos griegos; según el cual, el conocimiento universal, es infinitamente superior al conocimiento particular. La curiosidad intelectual que surge del amor por el saber, en su dimensión universal, exhibida por los atenienses en el Siglo V a.C.; por los conciudadanos de Leonardo de Vinci (1452-1519) en el Siglo XV; y practicada hoy por los herederos de Confucio en Asia; deberá ser abrazada con entusiasmo en Latinoamérica. Solo así, podremos enfrentar los desafíos ofrecidos al aspirar a integrarnos a las grandes corrientes económicas y de reducir la brecha tecnológica con respecto a Países como Corea (del Sur) y Taiwán; que solo hasta hace poco compartían con nosotros los problemas del subdesarrollo. Así, si aún pretendemos analizar la “revolución tecnológica”; los grandes cambios políticos y además, los modelos económicos que se han practicado en Latinoamérica, con tan pobre resultado; y los comparamos con los esquemas puestos en práctica y con todo el éxito posible por Japón y los demás países asiáticos. De este proceso, surge una propuesta, fruto de una óptica multidisciplinaria, ecléctica y totalmente desprovista de prejuicios ideológicos. A decir verdad, la gran mayoría de los pueblos latinoamericanos, refleja en la actualidad, lo que alguien denominara “vacío de futuro”; lo cual para él: es el mito gitano, que adivina gratis o, por unas pocas monedas. Para los académicos, empresarios, líderes sociales y religiosos en general; el conocimiento de la sociedad sobre el futuro; se agota casi instantáneamente, se formule, una pregunta de manera relevante, sobre: Los países; sus instituciones y sus procesos.
Para comprender, la marcha hacia delante de los países latinos; el camino preferible, es el de adoptar definitivamente a la ciencia y a la tecnología, como su principal promotor. La vanguardia quedaría muy bien en manos de verdaderos líderes empresariales; expertos en diagnosticar toda la estructura de las empresas públicas y privadas y de proponer alternativas que además de ser viables, sean aún más seguras y realizables; sobretodo, a muy bajos costos relativos. Si se pretende entrar de lleno a participar como verdaderos protagonistas de la “revolución” de los países de Latinoamérica; se deberá conseguir en por lo menos el plazo de una generación (20 años) para pasar de ser prioritariamente productores de materias primas y de bienes y servicios primarios; a fabricar máquinas y que a su vez sirvan para hacer más máquinas o, al menos, repuestos para ellas. Ello no precisamente, requiere haber transitado largamente por la llamada etapa de “sustitución de importaciones”.
Ya, la alta disponibilidad de materias primas. Y la abundancia de mano de obra barata; los mercados cautivos y muchos otros de los factores en los que aún, erróneamente, tienen cifradas sus esperanzas, los países subdesarrollados, para mejorar su correspondiente “nivel de vida”; están mandados a recoger, como la búsqueda del camino por seguir. Hoy sabemos, que para las nuevas tecnologías, tales factores, resultan marginales; pues, los intercambios de información, prevalecen sobre los bienes y servicios. También sabemos, que no son, precisamente, esos los renglones, por los que se define las “tasas de cambio” en la economía mundial; por el contrario, más bien son estas tasas, las que establecen los costos de la mano de obra de un país respecto a otro. Actualmente, las empresas que aspiren a jugar con ciertas posibilidades, dentro del complejo “ajedrez”, de la competencia internacional; deben además, saber hacerlo en forma simultánea jugando en dos tableros: El del productor-abastecedor y el correspondiente al del agente financiero. Así los dos, serán capaces de controlar los riesgos inherentes a las “tasas de cambio”; señales del mercadeo, el financiamiento y la producción para la exportación y las inversiones en el extranjero. Adicionalmente deben pensar, en la necesidad de disponer de una mano de obra cada vez más altamente calificada (y nunca dejarla migrar.)
A propósito, en los países elevadamente industrializados, la intensificación de la producción manufacturera, se traduce, en una disminución del empleo (reservado al obrero) cuyo crecimiento en la pasada década del 1973-1984 de final del pasado Siglo XX; fue del 40%; mientras que el empleo global fue del 30%; luego, (como ya lo vemos hoy) en esta primera década del Siglo XXI; la fuerza laboral obrera industrial decrece, lógicamente, en por lo menos un 10%. - Entonces, si no se es capaz de incrementar la producción manufacturera, reduciendo al mismo tiempo la mano de obra en sus “procesos”, no se podrá catalogar, como un país altamente desarrollado. Así las cosas, todo esfuerzo por conservar esa estructura laboral a cualquier “costo”; irremediablemente conducirá al desempleo masivo; actuando aún en contra de políticos y de líderes sindicales para agravar aún más el asunto. -
Pero, no obstante. No hay que olvidar que en la “geometría” o, econometría del poder económico; se tiene además, la dimensión del campo netamente económico-social. Y que si bien, la figura que representa la distribución actual, por ejemplo del poder “militar” (en los países en que ello es posible) presenta un círculo unipolar que refleja mejor la redistribución del poder económico; tornándose en un triángulo (tripolar) en cuyos vértices se sitúa hoy las potencias mundiales; Definidas como los verdaderos centros de gravedad, en cuanto a las demás naciones del mundo; atraídas por las enormes ventajas de que gozarán las sociedades que se logren enganchar con alguna de estas tres “locomotoras” económicas de alto poder. De esta visión, sobre la dirección en que se mueve la humanidad en su tránsito hacia todo el presente Siglo XXI; surge la “integración económica”, como la fuerza poderosa que ayuda a moldear, nada menos, que el futuro mundial. De ahí, que varios de los principales economistas y de los ejecutivos bancarios de reserva, que atendieron al llamado del Banco Mundial de los EU., celebrada en la última década del Siglo pasado; debieron concentrar principalmente su interés, precisamente en la emergencia acaecida a los tres grandes bloques económicos del orbe. Además de las diferentes opciones expresadas por varios de los dirigentes que asistieron, sintetizaron las principales áreas de verdadero interés en el que se debaten hoy los cinco continentes, a cerca del nuevo surgimiento del “ordenamiento económico tripolar”.
Algunas de las conclusiones, fueron:
* Que los bloques económicos representan la tendencia del futuro.
** Que el sistema de libre comercio sin discriminación para todos los países del mundo capitalista; basado en el acuerdo general de aranceles aduaneros y de comercio (GATT); está, por ahora, entrando en una etapa de grandes y graves dificultades.
*** Que los países que se queden por fuera de los bloques económicos, particularmente las naciones más pobres y sin capacidad negociadora, se enfrentaran entonces, a un futuro muy difícil.
**** Que con la desaparición de la amenaza comunista, del panorama mundial; ha desaparecido igualmente, el aglutinante que mantenía unidas a las tres grandes potencias, alrededor de un mismo propósito, o sea, el de defender a toda cota el “sistema capitalista”; lo cual, hace que las posibilidades de serios conflictos comerciales y de proteccionismo, sean hoy, aún mayores.
Los fenómenos relacionados con la “Revolución Tecnológica”, aceleraron el proceso de la integración europea; éste a su vez, se constituyó en la mejor estrategia para un continente, que encontrar una respuesta frente al poder económico de las multinacionales norteamericanas; y la creciente agresividad de las políticas comerciales japonesas. Si a la iniciativa, como proceso de trascendental importancia, se le agregase la gran re-estructuración económica y política, envolvente de los países sobrevivientes del “comunismo”; debería concluirse, que el centro de atención del mundo y el lugar, en el cual están dadas las condiciones para que surjan los más espectaculares cambios; es el mal llamado “viejo continente”. A diferencia, de lo que ocurre en los otros dos grandes centros de gravedad económica; los acontecimientos europeos, no se pueden analizar únicamente desde la perspectiva de la revolución tecnológica, y de los impulsos revolucionarios de la antigua economía comunista.
Europa, un continente tan rico, en historia, escenario, de los más grandes conflictos de la humanidad, y cuna, de las principales ideas políticas que todavía (a pesar de todo) hoy rigen al mundo. De invaluable aporte (para bien o para mal) al desarrollo científico y cultural de la raza humana. Y que, sin embargo, está al borde de lograr su verdadero destino, mediante la “Integración” (UE.); (hoy desarrollada y perfeccionada pos los USA.) Que, desde la caída del Imperio Romano, la unificación de toda Europa, ha sido el sueño de todos sus gobernantes; no obstante, está logrando un sentimiento paneuropeo; nacido del deseo de lograr un mayor tamaño económico que permita competir exitosamente con los EU., y el Japón. Así las cosas, la actual integración económica de Europa, se puede considerar, como el triunfo más espectacular de la tercera revolución sobre la historia; al conseguir que ésta parte del mundo, diese prioridad a la conveniencia económica; sobre nacionalismos baratos y pasados de moda; como un poderoso bloque económico (democrático); con enormes oportunidades, inclusive, de afectar el curso de la historia.
La rebelión de la campiña.
Nota:
Dentro de su - “historia” de cumplimiento cíclico; Pablo Casaseca Jambrina en su libro “Después del socialismo” Ed. Benzal 1968. Págs. 397-414. - Tomado aquí en paráfrasis. - Nos predice (en forma científica) rasgos de la historia, con una exactitud pasmosa; que se cumpliría medio siglo después de ser escritos: - El proceso que designamos con el nombre de: “Rebelión de la Campiña”. – Que, como también en la revolución francesa; la campiña, auspició el humanismo y defendió a su Patria, con su vida. - Es sin embrago, hoy, el proceso más disyuntivo, de los que entran a constituir la delicada “marquetería” de la historia de la civilización. -
Rompe, la “armonía de su historia”; con la sucesión creadora y se nos muestra hostil, aún a la lógica de nuestros deseos; pero, el ensamblaje de esta nueva pieza, se encuentra, perfectamente determinado por la talla recibida de las anteriores; la continuidad de una ruta, no se interrumpe por un cambio brusco de dirección; el episodio que cae bajo la rúbrica: * “Adrianópolis”, es posible y aún muy rápidamente probable, pero no es esencial; la rebelión de la campiña, es una pieza insustituible dentro e la arquitectura de conjunto; su inserción directa, está dada en la sobrecarga urbana, que encaja, a su vez, en el desbordamiento de la actividad burguesa, realizada a través del “Estado Liberal Democrático”, proclamado por la predicación de Akhenaton; mediante, el edicto de Caracalla y por los “Derechos del Ciudadano” (hoy, los derechos del hombre.)
Nota:
* Época de la gran decadencia del Imperio Romano.
El mapa “imperial” (estatal) que nos hemos trazado (en forma de cumplimiento cíclico) adquiere, así el relieve y la derivación de las costas; y nos presenta además, su faceta lógica: la iniciativa de la historia, cambia de manos con el futuro y ya muy próximo proceso. A la acción, integrante y unificadora de la burguesía; que desde los dispersos grupos de buhoneros y las tímidas factorías en costas extrañas, ha conducido hasta la mayestática mole del “Estado Social”. Sucede ahora otro poder, cuyas intenciones y cuya acción son dispersivos; es (representativamente) la hora Micerino; la hora de Ramsés III; la misma de la división definitiva de Imperio Romano; es (en la historia cíclica) la que corresponde al Siglo XXI. Los que nunca se unieron a la caravana, sedentarios en sus predios, veían con agrado el paso de aquella, que les permitía abastecerse de baratijas a cambio, de que la caravana arramblara (arrastrara) con todos los sobrantes y trazos inútiles que servían de alimento a sus cuerpos y a sus herramientas. Pero, la caravana, termina por asentar sus reales, se multiplica en progresión geométrica; y ya sólo nos envía sus mandatarios, con el encargo de exigir raciones suplementarias, a trueque, de joyeles cada vez más bellos, pero, cada vez más encarecidos; y un día, llega en que sobrantes y trastos inútiles empiezan a escasear y a hacerse necesarios para el buen gobierno de la casa, ahora, agrandada y embellecida por el tráfago de tantos siglos; y por lo mismo, más necesitada de ajuar. La sobrecarga urbana, ha subvertido la relación del interés recíproco y gravitado, sobre el ápice de la curva; deja vía libre para quien quiera tomar el volante y provocar el viraje.
La curva (estadística) inicia su marcha descendente. Pero, su ecuación no padece discontinuidad. La marea, alcanza (como un tsunami) su plenitud; emprende el retroceso y entonces, hemos descrito gráficamente, el descubrimiento progresivo de la playa; desde los tiempos (comparativamente) de Teodosio, hasta la dinastía macedónica. Sólo la burguesía, entonces, es unificadora; sólo la ciudad coordina y enlaza; por eso, cuando la primera, sintiéndose incapaz de abarcar, con sus brazos, los confines delatados de la urbe policéfala, pone “el cetro”, en manos de un Estado que sustituye la andante actividad burguesa, por la actitud estática de un cuerpo de guardia; entonces, están puestas las condiciones, para la acción disgregante. Luego, la burguesía ya no va, porque empieza a faltarle con qué ir; el Estado, envía mandatarios; pero, estos vuelven cada vez más decepcionados y mohínos; abrigando la sospecha de que ni en “matemática comercial”, es posible convencer a nadie, de que la diferencia permanece invariable, cuando se hace crecer progresivamente el sustraendo. Y, ante la reiterativa contumacia, de los que se empeñan en no dejarse convencer, ha de contemplarse pasivamente su taponamiento de oídos, su volverse de espaldas, y su abandono del concierto, que durante centurias escucharon con tanto “agrado”. La iniciativa del combate, es ahora, de los mismos “sitiadores”; entonces, ya hemos – supuestamente - traspuesto los linderos, más allá del año 2000. En todos los ciclos, en los alrededores (que corresponden) a ésta fecha, se inicia el movimiento separatista de las “provincias”, que se consideran preteridas en el concierto imperial (mundial.) Pero, estas “provincias”, no son necesarias que lo sean en el sentido estricto de territorio que forma parte de un Estado; sino, que, vienen definidas por su posición relativa en el conjunto “econo-social”; que la civilización, creada y sostenida por el comercio, establece siempre del mismo modo.
Existe, en todos los casos, un foco central, de mayor intensidad de urbanización, a la cual de un modo ostensible, se traslada siempre la capitalidad efectiva del “Imperio”; cuando con el siglo liberal, la burguesía toma sin trabas las riendas del poder; esta zona central, aparece acompañada por otra que nos hemos acostumbrado a llamar: “Periférica”; donde la densidad urbana, es menor y cuyo papel fundamental, en el concierto de ambas, es el de servir de abastecedora, de los elementos que para llevar a cabo su labor industrial y comercial necesita, la primera. La segunda, de estas zonas, forma parte del “Imperio”, no por un nexo político que la integra formalmente en él; sino, por la relación económica que la une con la primera. En unos casos, como el actual, en cada una de las zonas coexisten múltiples unidades políticas, mientras que en otros, como ocurrió (comparativamente) en el “Imperio Romano”; ambas zonas quedaron integradas en la misma unidad estatal.
La dual estructura, da lugar a discordancias a lo largo de todo el ciclo; pero, es sólo al llegar el momento actual, cuando se rompe de un modo definitivo, el acorde, que con mejor o, peor voluntad; se ha sostenido durante más de once siglos. Cuando llegó el siglo liberal y las ciudades en plena euforia, crecieron desmesuradamente y sobre todo, cuando, con el siglo social, la creación del mercado interior absorbió la mayor parte de los productos de la actividad urbana; la relación económica del campo con la ciudad resultó para el primero, muy “onerosa”, y más de lo permisible. Fue en este momento, en el cual las “provincias” periféricas, integradas o no, en un todo político, con las otras; empezaron a pensar, en romper las amarras que las ataban, a la devoradora zona urbana. Fue en ese, el momento, correspondiente a finales del pasado Siglo XX; en el que los conservadores occidentales, escucharon, en torvo silencio, el discurso, conque se trató de convertirlos, a la noble empresa, de sostener el Estado Social. Y cuando, llegó ese momento: Fue cuando se produjo el gran viraje de la historia; cuando la ciudad, su protagonista, por más de un milenio, cedió su puesto al campo, y se conformó con un segundo papel. Fue entonces, cuando empezó el verdadero repliegue de la “Cuidad-estado”; como el modelo que surge y da lugar a otras imitaciones, para desencadenar nuevamente el proceso, dentro de la historia cíclica que nos ocupa.
Las “provincias”, que se consideraron preteridas. - Llevan ahora el nombre de “países subdesarrollados”; pero, a condición, para que puedan considerarse como auténticas “provincias”; de que, la relación con el “Imperio”, en la época de ascensiones burguesas; haya sido lo suficientemente intensa, como para alcanzar el grado de civilización; necesario, para poder ser consideradas, como parte integrante del “mundo Imperial”. Pero aquellos países, que no llegaron a un estrechamiento de lazos, tan intenso, quedaron y siguen estando situados en un mundo extraño y a ellos; ya les hemos asignado su papel en las próximas, escenas del drama de la “historia cíclica” comparable.
Preponderante, en el acervo de “provincias” occidentales, es el mundo ibero-americano; que contiene en sí, de una manera acusada, las características que en la antigüedad, diferenciaban, al mundo occidental del oriental; y que hoy lo diferencian a él, del mundo norteamericano y de la Europa súper-urbanizada (el Bizancio en la antigüedad.) Tales caracteres diferenciales, le imponen un destino análogo al que hubo de seguir el Imperio Romano de Occidente; y ya comparativamente, los embajadores teodosianos, empezaron a encontrar silencios incomprensibles, como respuesta a sus discursos bizantinizantes, en aquellas tierras. Es un hecho (semejantemente) visible para el observador más superficial, el de que, los precios, son más elevados en aquellas zonas del mundo, donde la densidad de urbanización es mayor; compensados por salarios más altos y que todo intento de urbanización intensa – industrialización - ; se traduce en la época moderna, en una rápida elevación de precios y consiguientemente de salarios; es ello, la manifestación del desequilibrio fundamental que sitúa a la zona periférica, en una situación de desventaja, respecto a la zona central, y que, al acentuarse, da lugar a la ruptura. Esta manifestación, tiene un segundo aspecto, en el seno de cada unidad macroeconómica; cualquiera que sea la zona en la que se halle situada, los llamados precios políticos, mantienen su estado económico artificial, cuando la unidad estatal es suficientemente amplia y origina la misma tensión entre: Campo y ciudad; y por consiguiente, conduce a la ruptura interna.
Los llamados - precios políticos, no son sino, un aspecto en la relación comercial, dentro de la misma unidad estatal, que de un modo aparentemente libre, establece la burguesía central, con los países de la orla; sometiéndolos, mediante relaciones de intercambio forzadas, a la misma presión a que se somete a sus zonas campesinas en el interior. La diferencia de potencial ha de mantenerse, en este caso, mediante la oportuna reglamentación legal, en aquel; mediante la subordinación de los precios exteriores a las necesidades de la consuntiva (agotada) actividad industrial del centro motor. Y el resultado comparativamente, es siempre el mismo, cuando avanza la hora bizantina: De rebelión, primero, de las “provincias” exteriores; rebelión más tarde, de las “provincias” interiores. Ya sean estas provincias reales políticamente o, tengan únicamente un sentido económico. Las provincias exteriores están actualmente constituidas, preponderadamente, por el mundo iberoamericano; las provincias interiores, por las zonas de predominio agrario, dentro de cada uno de los grandes imperios industrializados o, industraializantes, que contemplamos; son ellas las que guardan el secreto del provenir, pues, de objeto de la historia, que han sido hasta ahora, pasan a convertirse en sujeto de la misma. -
La situación Iberoamericana. - Un tanto brumosa y quizá falseada en la información, parece, semejantemente, y en líneas generales, ser así: Un sector urbano, reformista y democrático, siente la emulación de Bizancio (que representa los sectores más industrializados) y quiere seguir la ruta rectilínea convencional, heredada de la “Edad Moderna”; su gran enemigo, son los latifundistas, de mentalidad agraria y señorial (con escaños en las corporaciones públicas, casi hereditarios en su totalidad) y tal situación, nos parece recordar la del antepasado Siglo XIX, europeo; Pero, luego, hay alguna contradicción entre las dos afirmaciones, y es la de que sobran brazos en el campo, afirmación netamente bizantina y urbana, que mira hacia la industrialización y la que los “indios”, se aprestan a ocupar sus tierras ahora baldías. La única explicación plausible, parece ser que el sistema de latifundios, proporciona solamente una vida pobre e insegura, a los escasos braceros del campo; y mimadas las ciudades, por la política, desde su independencia, que ha sido el foco de atracción y han ejercido una succión, que ha producido un vacío en torno a él; vacío, que como (comparativamente) en el “Imperio Romano”, a fines del Siglo IV; se aprestan a rellenar los “indios” que habían permanecido reacios a la civilización. El sector urbano, simpatiza muy seguramente, de un modo más o menos abierto, con los “indios” en los que se ve la mano de obra rural, con la que ha de suplir, a la absorbida por las ciudades.
Los terratenientes, - de todos los tiempos, se encuentran, naturalmente, al otro lado de la barricada, pues, prefieren dejar sin cultivar buena parte de sus tierras a declinar unos derechos cuya pérdida les restaría prestigio e influencia. En estas circunstancias, la mentalidad progresista que aún preside el mundo, apostará sin vacilar, por el triunfo de los urbanos y el arrumbamiento de los últimos vestigios feudales; pero, el que quiera inclinarse (comparativamente) sobre el libro de una historia sin ideas preconcebidas, llegará al convencimiento, de que las pesas no van a caer de forma tan unilateral. Se impondrán, pues, los “indios”, tal y como se impusieron los “bárbaros”, en el “Imperio”, al llegar nuestra época; y aún quizá, se vean reforzados por aportaciones en masa de otros continentes; pero, cuando los recién llegados, se hayan separado en peones, y en propietarios; éstos, unidos a los antiguos, darán la batalla a las ciudades y los lugartenientes de Bizancio, entonces, habrán terminado su dominio. - Esta, será la historia, semejante, a la de “Ibero América”; desde aquí en adelante, hasta mediados de éste Siglo XXI. - (Tomado, en paráfrasis, del libro de Pablo Casaseca J. “Después del Socialismo”. Madrid. Ed. Benzal. 1968.)
Capítulo II
Nota:
Si intentamos - relacionar las causas del peligro, con la manera en que la sociedad está organizada y organiza a sus miembros; nos vemos obligados a enfrentarnos inmediatamente, con el hecho de que la sociedad industrial avanzada, es cada vez más rica, grande y mejor conforme; perpetúa el peligro y la estructura de defensa, hace la vida más fácil para un mayor número de gente, y extiende el dominio del hombre sobre la naturaleza.- (Tomado de “El hombre unidimensional” de Herbert Marcuse. Ed. Planeta-Agostini. 1993.Pág, 19.)
Nuevas formas de control.
Nota:
(Según Herbert Marcuse – El Hombre Unidimensional – Ed. Planeta 1993. Tomado en paráfrasis.)
Los derechos y libertades - que fueron factores vitales en los orígenes y etapas tempranas de la sociedad industrial, se debilitan en una etapa más alta; pierden su realidad y contenido tradicionales; una vez institucionalizados, estos derechos y libertades que compartieron el destino de la sociedad de la que se habían convertido en parte integrante. En la medida en que la independencia de la necesidad, sustancia concreta de toda libertad, se convierte en una posibilidad real; las libertades, propias de un estado de productividad más baja, pierden su contenido previo. Una sociedad, que parece cada día más capaz de satisfacer las necesidades de los individuos, por medio de la forma en que está organizada; priva a la independencia del pensamiento, a la autonomía y al derecho de oposición política de su función crítica básica. Tal sociedad, puede exigir justamente, la aceptación de sus principios e instituciones; y reducir la oposición a la mera promoción y debate de políticas alternativas. Pues, es cierto que, por lo menos en lo concerniente a las necesidades de la vida, no parece haber ninguna razón, para que la producción y la distribución de “bienes y servicios”, deba proceder a través de la concurrencia competitiva de las libertades individuales. Desde el primer momento, la “libertad de empresa”, no fue buena. En tanto que la libertad para trabajar o, morir de hambre, significaba: fatiga, inseguridad y temor. Si el individuo, no se probara a sí mismo, en el mercado, como sujeto económico libre y competitivo; la desaparición de esta clase de libertad, sería uno de los mayores logros de la civilización. Entonces, el proceso tecnológico de mecanización y normalización, podría canalizar la energía individual, hacia un reino limpio de libertad, más allá de la necesidad. Hoy, no solo una forma específica de gobierno o, gobierno de partido, hace posible el totalitarismo, sino, también, un sistema específico de producción y distribución, que puede muy bien ser compatible, con un pluralismo de partidos periódicos. Pues, el poder político, se afirma, por medio de su poder sobre el proceso mecánico, y sobre la organización técnica del aparato. -
La civilización industrial contemporánea. Demuestra que ha llegado a una etapa en la que “la sociedad libre” que no se puede definir adecuadamente en los términos tradicionales de libertades económicas, políticas e intelectuales; no porque sean muy significativas, para ser confinadas dentro de formas tradicionales: se necesita, nuevos modelos de realización, que correspondan a las nuevas capacidades de la sociedad. Entonces, la libertad política, significaría la liberación de los individuos de una política sobre la que no ejercen ningún control efectivo. Por cuanto la intensidad, la satisfacción y hasta el carácter de las necesidades humanas, más allá del nivel biológico, han sido siempre, pre-condicionadas, se conciba o no, como una necesidad, la posibilidad del “hacer o dejar hacer”. Así, la mayor parte de las necesidades predominantes: de descansar, divertirse, comportarse y consumir, de acuerdo con los anuncios de amar y odiar, lo que otros aman y odian; pertenece a la categoría de “falsas necesidades”; pues, las únicas necesidades que pueden inequívocamente y reclamar satisfacción, son las “vitales”, como requisito, para la realización de todas las necesidades, tanto de las sublimadas, como de las no sublimadas.
El rasgo distintivo, - de la sociedad industrial avanzada, es la sofocación efectiva de aquellas necesidades que requieren ser liberadas - liberadas también de aquello que es tolerable, ventajoso y cómodo – mientras que se sostiene y absuelve, el poder destructivo y la función represiva de la sociedad opulenta. Así, los controles sociales exigen una abrumadora necesidad de producir y de consumir, el despilfarro; lo mismo que de un trabajo embrutecedor (mecánico, a pesar de la robótica); la necesidad de formas de descanso no aconsejables; y de mantener libertades engañosas (la propaganda.) El pre-condicionamiento, no empieza con la producción masiva de la Radio y la TV., y con la centralización de su control. La gente, entra en esta etapa, ya como receptáculo pre-condicionado; la diferencia decisiva, reside en la disminución del conflicto, entre lo dado y lo posible; entre las necesidades satisfechas y las necesidades por satisfacer. Es aquí, donde la llamada, nivelación de las distinciones de clase, revela su función ideológica, ya que necesidades y satisfacciones, que sirven para la preservación del “sistema establecido”, son compartidas, por toda la población subyacente. -
Las formas predominantes de control social. Son las tecnológicas en un nuevo sentido; pues, es claro que la estructura técnica y la eficacia del aparato productivo y destructivo; han sido instrumentos decisivos para sujetar la población del trabajo, establecida a lo largo de la época moderna. Además, tal integración ha estado pérdida de los medios de subsistencia; la administración acompañada de formas de compulsión más inmediatas: Justicia, policía y fuerzas armadas. Pero, en la época contemporánea, los controles tecnológicos, parecen ser la misma encarnación de la razón en beneficio de todos los grupos e intereses sociales, hasta tal punto que toda contradicción parece irracional y toda oposición imposible. Hoy, el espacio privado, ha sido invadido y cercenado por la realidad tecnológica; la producción y la distribución en masa, reclaman al individuo en su totalidad, y ya hace mucho que la sicología industrial ha dejado de reducirse solamente a la fábrica. El resultado es, no la adaptación; sino, la mimesis; una inmediata identificación del individuo con su sociedad, y esto a través de la sociedad como un todo. Hay una sola dimensión, que está por todas partes y en todas formas. Los logros del progreso, desafían tanto la denuncia como la justificación ideológica; ante su tribunal la “falsa conciencia” de su racionalidad, se convierte en la verdadera conciencia. Ya que son los mismos productos, los que adoctrinan, manipulan y promueven una “falsa conciencia” inmune a su falsedad. Y en la medida, que estos productos útiles, son asequibles a más individuos, dentro de más clases sociales; el adoctrinamiento que se lleva a cabo, deja de ser “publicidad”; pues se convierte en un modo de vida. Puede producir, hasta el cambio de comportamiento, pensamiento y conducta, haciéndolo unidimensional.
La predicción de Bridgman, se ha realizado: El nuevo modo de pensar es hoy en día, la tendencia predominante en la filosofía, la sicología, la sociología y otros campos. Muchos, de los conceptos más perturbadores, están siendo “eliminados”; al mostrar que no se les puede describir adecuadamente en términos operacionales. La ofensiva empírica radical, proporciona de esta manera, la justificación metodológica: Positivismo, que en su negación de los elementos trascendentes de la Razón, forma la réplica académica de la conducta socialmente requerida. El dominio, de tal realidad unidimensional, no significa que reine el materialismo; y que desaparezcan las ocupaciones espirituales, metafísicas y hasta bohemias. Lo único que derrota (aparentemente) tales manifestaciones, es (por su fuerza) el militarismo. Los que hacen la política y sus proveedores informativos de masas, promueven sistemáticamente el pensamiento unidimensional. Su universo del discurso, está poblado de hipótesis, que se auto-invalidan, y que, repetidas incesante y mono-polísticamente, se tornan en definiciones hipnóticas o dictados. Así, el «ego cogitans» de Descartes, debía dejar los “grandes cuerpos públicos”, intactos; así, Hobbes, sostenía que “el presente debe siempre ser preferido, mantenido y considerado mejor”. Y Kant, coincidía con Locke, en justificar la revolución, siempre y cuando, lograse organizar la totalidad, e impedir la subversión. (Millones de muertos, así, lo atestiguan.)
El progreso. - No es un término neutral; se mueve hacia fines específicos, y estos fines son definidos por las posibilidades de mejorar la condición humana. La sociedad industrial, avanzada, se está acercando al estado en que el progreso continuo, exigirá una subversión radical, de la organización y dirección predominante del progreso. Esta fase, será alcanzada cuando la producción material (incluyendo los servicios necesarios) se automatice hasta el punto en el que, todas las necesidades vitales, puedan ser satisfechas, mientras que el tiempo de trabajo necesario se reduzca a tiempo marginal. De este punto en adelante: el progreso técnico, trascenderá el reino de la necesidad, en el que servía de instrumento de dominación y explotación; lo cual limitaba por lo tanto su racionalidad; la tecnología estará sujeta al libre juego de las facultades, en la lucha por la pacificación de la naturaleza y de la sociedad.
La situación Iberoamericana. - Un tanto brumosa y quizá falseada en la información, parece, semejantemente, y en líneas generales, ser así: Un sector urbano, reformista y democrático, siente la emulación de Bizancio (que representa los sectores más industrializados) y quiere seguir la ruta rectilínea convencional, heredada de la “Edad Moderna”; su gran enemigo, son los latifundistas, de mentalidad agraria y señorial (con escaños en las corporaciones públicas, casi hereditarios en su totalidad) y tal situación, nos parece recordar la del antepasado Siglo XIX, europeo; Pero, luego, hay alguna contradicción entre las dos afirmaciones, y es la de que sobran brazos en el campo, afirmación netamente bizantina y urbana, que mira hacia la industrialización y la que los “indios”, se aprestan a ocupar sus tierras ahora baldías. La única explicación plausible, parece ser que el sistema de latifundios, proporciona solamente una vida pobre e insegura, a los escasos braceros del campo; y mimadas las ciudades, por la política, desde su independencia, que ha sido el foco de atracción y han ejercido una succión, que ha producido un vacío en torno a él; vacío, que como (comparativamente) en el “Imperio Romano”, a fines del Siglo IV; se aprestan a rellenar los “indios” que habían permanecido reacios a la civilización. El sector urbano, simpatiza muy seguramente, de un modo más o menos abierto, con los “indios” en los que se ve la mano de obra rural, con la que ha de suplir, a la absorbida por las ciudades.
Los terratenientes, - de todos los tiempos, se encuentran, naturalmente, al otro lado de la barricada, pues, prefieren dejar sin cultivar buena parte de sus tierras a declinar unos derechos cuya pérdida les restaría prestigio e influencia. En estas circunstancias, la mentalidad progresista que aún preside el mundo, apostará sin vacilar, por el triunfo de los urbanos y el arrumbamiento de los últimos vestigios feudales; pero, el que quiera inclinarse (comparativamente) sobre el libro de una historia sin ideas preconcebidas, llegará al convencimiento, de que las pesas no van a caer de forma tan unilateral. Se impondrán, pues, los “indios”, tal y como se impusieron los “bárbaros”, en el “Imperio”, al llegar nuestra época; y aún quizá, se vean reforzados por aportaciones en masa de otros continentes; pero, cuando los recién llegados, se hayan separado en peones, y en propietarios; éstos, unidos a los antiguos, darán la batalla a las ciudades y los lugartenientes de Bizancio, entonces, habrán terminado su dominio. - Esta, será la historia, semejante, a la de “Ibero América”; desde aquí en adelante, hasta mediados de éste Siglo XXI. - (Tomado, en paráfrasis, del libro de Pablo Casaseca J. “Después del Socialismo”. Madrid. Ed. Benzal. 1968.)
Capítulo II
Nota:
Si intentamos - relacionar las causas del peligro, con la manera en que la sociedad está organizada y organiza a sus miembros; nos vemos obligados a enfrentarnos inmediatamente, con el hecho de que la sociedad industrial avanzada, es cada vez más rica, grande y mejor conforme; perpetúa el peligro y la estructura de defensa, hace la vida más fácil para un mayor número de gente, y extiende el dominio del hombre sobre la naturaleza.- (Tomado de “El hombre unidimensional” de Herbert Marcuse. Ed. Planeta-Agostini. 1993.Pág, 19.)
Nuevas formas de control.
Nota:
(Según Herbert Marcuse – El Hombre Unidimensional – Ed. Planeta 1993. Tomado en paráfrasis.)
Los derechos y libertades - que fueron factores vitales en los orígenes y etapas tempranas de la sociedad industrial, se debilitan en una etapa más alta; pierden su realidad y contenido tradicionales; una vez institucionalizados, estos derechos y libertades que compartieron el destino de la sociedad de la que se habían convertido en parte integrante. En la medida en que la independencia de la necesidad, sustancia concreta de toda libertad, se convierte en una posibilidad real; las libertades, propias de un estado de productividad más baja, pierden su contenido previo. Una sociedad, que parece cada día más capaz de satisfacer las necesidades de los individuos, por medio de la forma en que está organizada; priva a la independencia del pensamiento, a la autonomía y al derecho de oposición política de su función crítica básica. Tal sociedad, puede exigir justamente, la aceptación de sus principios e instituciones; y reducir la oposición a la mera promoción y debate de políticas alternativas. Pues, es cierto que, por lo menos en lo concerniente a las necesidades de la vida, no parece haber ninguna razón, para que la producción y la distribución de “bienes y servicios”, deba proceder a través de la concurrencia competitiva de las libertades individuales. Desde el primer momento, la “libertad de empresa”, no fue buena. En tanto que la libertad para trabajar o, morir de hambre, significaba: fatiga, inseguridad y temor. Si el individuo, no se probara a sí mismo, en el mercado, como sujeto económico libre y competitivo; la desaparición de esta clase de libertad, sería uno de los mayores logros de la civilización. Entonces, el proceso tecnológico de mecanización y normalización, podría canalizar la energía individual, hacia un reino limpio de libertad, más allá de la necesidad. Hoy, no solo una forma específica de gobierno o, gobierno de partido, hace posible el totalitarismo, sino, también, un sistema específico de producción y distribución, que puede muy bien ser compatible, con un pluralismo de partidos periódicos. Pues, el poder político, se afirma, por medio de su poder sobre el proceso mecánico, y sobre la organización técnica del aparato. -
La civilización industrial contemporánea. Demuestra que ha llegado a una etapa en la que “la sociedad libre” que no se puede definir adecuadamente en los términos tradicionales de libertades económicas, políticas e intelectuales; no porque sean muy significativas, para ser confinadas dentro de formas tradicionales: se necesita, nuevos modelos de realización, que correspondan a las nuevas capacidades de la sociedad. Entonces, la libertad política, significaría la liberación de los individuos de una política sobre la que no ejercen ningún control efectivo. Por cuanto la intensidad, la satisfacción y hasta el carácter de las necesidades humanas, más allá del nivel biológico, han sido siempre, pre-condicionadas, se conciba o no, como una necesidad, la posibilidad del “hacer o dejar hacer”. Así, la mayor parte de las necesidades predominantes: de descansar, divertirse, comportarse y consumir, de acuerdo con los anuncios de amar y odiar, lo que otros aman y odian; pertenece a la categoría de “falsas necesidades”; pues, las únicas necesidades que pueden inequívocamente y reclamar satisfacción, son las “vitales”, como requisito, para la realización de todas las necesidades, tanto de las sublimadas, como de las no sublimadas.
El rasgo distintivo, - de la sociedad industrial avanzada, es la sofocación efectiva de aquellas necesidades que requieren ser liberadas - liberadas también de aquello que es tolerable, ventajoso y cómodo – mientras que se sostiene y absuelve, el poder destructivo y la función represiva de la sociedad opulenta. Así, los controles sociales exigen una abrumadora necesidad de producir y de consumir, el despilfarro; lo mismo que de un trabajo embrutecedor (mecánico, a pesar de la robótica); la necesidad de formas de descanso no aconsejables; y de mantener libertades engañosas (la propaganda.) El pre-condicionamiento, no empieza con la producción masiva de la Radio y la TV., y con la centralización de su control. La gente, entra en esta etapa, ya como receptáculo pre-condicionado; la diferencia decisiva, reside en la disminución del conflicto, entre lo dado y lo posible; entre las necesidades satisfechas y las necesidades por satisfacer. Es aquí, donde la llamada, nivelación de las distinciones de clase, revela su función ideológica, ya que necesidades y satisfacciones, que sirven para la preservación del “sistema establecido”, son compartidas, por toda la población subyacente. -
Las formas predominantes de control social. Son las tecnológicas en un nuevo sentido; pues, es claro que la estructura técnica y la eficacia del aparato productivo y destructivo; han sido instrumentos decisivos para sujetar la población del trabajo, establecida a lo largo de la época moderna. Además, tal integración ha estado pérdida de los medios de subsistencia; la administración acompañada de formas de compulsión más inmediatas: Justicia, policía y fuerzas armadas. Pero, en la época contemporánea, los controles tecnológicos, parecen ser la misma encarnación de la razón en beneficio de todos los grupos e intereses sociales, hasta tal punto que toda contradicción parece irracional y toda oposición imposible. Hoy, el espacio privado, ha sido invadido y cercenado por la realidad tecnológica; la producción y la distribución en masa, reclaman al individuo en su totalidad, y ya hace mucho que la sicología industrial ha dejado de reducirse solamente a la fábrica. El resultado es, no la adaptación; sino, la mimesis; una inmediata identificación del individuo con su sociedad, y esto a través de la sociedad como un todo. Hay una sola dimensión, que está por todas partes y en todas formas. Los logros del progreso, desafían tanto la denuncia como la justificación ideológica; ante su tribunal la “falsa conciencia” de su racionalidad, se convierte en la verdadera conciencia. Ya que son los mismos productos, los que adoctrinan, manipulan y promueven una “falsa conciencia” inmune a su falsedad. Y en la medida, que estos productos útiles, son asequibles a más individuos, dentro de más clases sociales; el adoctrinamiento que se lleva a cabo, deja de ser “publicidad”; pues se convierte en un modo de vida. Puede producir, hasta el cambio de comportamiento, pensamiento y conducta, haciéndolo unidimensional.
La predicción de Bridgman, se ha realizado: El nuevo modo de pensar es hoy en día, la tendencia predominante en la filosofía, la sicología, la sociología y otros campos. Muchos, de los conceptos más perturbadores, están siendo “eliminados”; al mostrar que no se les puede describir adecuadamente en términos operacionales. La ofensiva empírica radical, proporciona de esta manera, la justificación metodológica: Positivismo, que en su negación de los elementos trascendentes de la Razón, forma la réplica académica de la conducta socialmente requerida. El dominio, de tal realidad unidimensional, no significa que reine el materialismo; y que desaparezcan las ocupaciones espirituales, metafísicas y hasta bohemias. Lo único que derrota (aparentemente) tales manifestaciones, es (por su fuerza) el militarismo. Los que hacen la política y sus proveedores informativos de masas, promueven sistemáticamente el pensamiento unidimensional. Su universo del discurso, está poblado de hipótesis, que se auto-invalidan, y que, repetidas incesante y mono-polísticamente, se tornan en definiciones hipnóticas o dictados. Así, el «ego cogitans» de Descartes, debía dejar los “grandes cuerpos públicos”, intactos; así, Hobbes, sostenía que “el presente debe siempre ser preferido, mantenido y considerado mejor”. Y Kant, coincidía con Locke, en justificar la revolución, siempre y cuando, lograse organizar la totalidad, e impedir la subversión. (Millones de muertos, así, lo atestiguan.)
El progreso. - No es un término neutral; se mueve hacia fines específicos, y estos fines son definidos por las posibilidades de mejorar la condición humana. La sociedad industrial, avanzada, se está acercando al estado en que el progreso continuo, exigirá una subversión radical, de la organización y dirección predominante del progreso. Esta fase, será alcanzada cuando la producción material (incluyendo los servicios necesarios) se automatice hasta el punto en el que, todas las necesidades vitales, puedan ser satisfechas, mientras que el tiempo de trabajo necesario se reduzca a tiempo marginal. De este punto en adelante: el progreso técnico, trascenderá el reino de la necesidad, en el que servía de instrumento de dominación y explotación; lo cual limitaba por lo tanto su racionalidad; la tecnología estará sujeta al libre juego de las facultades, en la lucha por la pacificación de la naturaleza y de la sociedad.
Es muy claro, - que el trabajo debe preceder a la reducción del trabajo, y que la industrialización, debe preceder al desarrollo y satisfacción de las necesidades y satisfacciones humanas (de por lo menos las básicas.- NBI - .) Pero, así como toda libertad, depende de la conquista de la necesidad ajena, también la realización de la libertad, depende de las técnicas de esta conquista. La productividad, más alta del trabajo; puede utilizarse para la perpetuación del trabajo. La industrialización, más efectiva, puede servir para la restricción y la manipulación de las necesidades. Pero, al llegar a este punto, la dominación - disfrazada de opulencia y libertad - ; se extiende a todas las esferas de la existencia, tanto pública, como privada; ya que integra toda oposición auténtica, absorbe las alternativas y la racionalidad tecnológica; revela su carácter político, a medida que se convierte, en el gran vehículo de una dominación más acabada, creando un universo verdaderamente totalitario, en el que: Sociedad y naturaleza; espíritu y cuerpo, se mantienen en un estado de permanente movilización para la defensa de este universo así constituido. -
Conclusión.
Nota:
Sólo - gracias a aquellos sin esperanza, nos es dada la esperanza.- (Benjamín Walter)
La sociedad unidimensional avanzada, altera la relación entre lo racional y lo irracional; contrastando, con los aspectos fantásticos y enajenados de su racionalidad; así, el reino de lo irracional, se convierte en el ámbito de lo realmente racional de las ideas que pueden “promover el arte de la vida”. - Entonces, la dimensión estética, conserva todavía su libertad de expresión, que le permite al escritor y al artista; llamar a los hombres, y a las cosas; por su nombre; y nombrar, lo que de otra manera, es innombrable. - Y ya no es la imaginación, la que habla en él, sino la razón; en realidad, la que justifica todo y absuelve todo – excepto del pecado contra su espíritu - . Luego, la imaginación, está abdicando ante la realidad, que ante los hechos, la atrapa y sobrepasa; convierte la ilusión en realidad y la ficción en verdad. En los campos anteriores, antagónicos, se mezclan en el terreno técnico y en el político: Ciencia y magia, vida y muerte, alegría y miseria. Si estas realizaciones, no penetran la conciencia; si realmente se da por sentado, es porque estas realizaciones son: a) perfectamente racionales en términos del orden existente, b) signos de ingenuidad humana y del poder más allá de los límites tradicionales de la imaginación.
La obscena mezcla de la estética y la realidad, refuta a las filosóficas que se oponen a la imaginación (poética) y a la razón (científica o, empírica.) El carácter científico, racional de la imaginación, ha sido reconocido en las matemáticas, en la hipótesis y experimentos de la ciencia física. Es igualmente reconocido en el psicoanálisis, que está basado, en teoría: En la aceptación de la racionalidad específica de lo irracional; la imaginación comprendida, llega a ser en él, orientada en una fuerza terapéutica. Así, la imaginación, no ha permanecido inmune al proceso místico. Somos pues, poseídos por nuestras imágenes; sufrimos nuestras propias imágenes; sin embargo, “darle a la imaginación todos los medios de expresión” sería un imperdonable retroceso; una liberación así, sería un horror, no un milagro ya que “una vida sin temor, no puede ser nunca, producto de la imaginación”.
Políticamente, las instituciones. - Dentro de las que puede imaginarse concentrada la pacificación; desafían así, la tradicional clasificación: En administraciones autoritarias y democráticas, centralizadas y liberales. Hoy, la oposición a la planificación central, en nombre de una democracia liberal, que sea negada; en realidad sirve peligrosamente, sólo como pretexto ideológico para ocultos intereses represivos. Se apoderan de ella y luego pontifican, cual corderos, con piel de lobo. Sirve para confusiones, que luego ya en el poder, resultan sin remedio. Comienzan, desvirtuando todo lo positivamente histórico, contradiciendo, hasta la madre de las buenas costumbres; para luego eternizarse en el poder, mediante elecciones amañadas. En la presente etapa de desarrollo de las sociedades industriales avanzadas; tanto el sistema material como el cultural, niega esta exigencia. El poder y la eficacia de este sistema; la total asimilación del espíritu, con los hechos del pensamiento, con la conducta requerida, de las aspiraciones, con la realidad; se oponen a la aparición de un nuevo y muy escondido sujeto, peligroso, dictatorial, generalmente castrense y nacionalista.
Los hechos y las alternativas, son como fragmentos que no encajan, o como un mundo de mudos objetos; sin sujeto, sin la práctica que movería estos objetos, en una nueva dirección. La teoría dialéctica no es refutable, no puede ofrecer el remedio; no puede ser positiva. Sin duda, el concepto dialéctico, al comprender los hechos dados, los trasciende. Éste es el signo de su verdad. Define las posibilidades históricas, incluyendo las necesidades; pero su realización sólo puede estar en la práctica que responda a la teoría; y, en el presente, la práctica no da tal respuesta. En un estado avanzado, la dominación funciona como administración, y en las áreas súper-desarrolladas del consumo de masas; la vida administrada, llega a ser la buena vida de la totalidad, en defensa de la cual se unen los opuestos. Ésta es la forma pura de la dominación; que recíprocamente, su negación, parece hoy, ser la forma más pura de la negación. Todo contenido, parece reducido, a la única petición abstracta del fin de la dominación: única exigencia, verdaderamente revolucionaria y que daría validez a los logros de la civilización industrial. Ante su eficaz negación, por parte del sistema establecido, esta negación aparece bajo una forma políticamente impotente de la “negación absoluta”: una negación que parece más irrazonable, conforme el sistema establecido que desarrolle más su productividad y alivie las cargas de la vida.
Finalmente, las capacidades económicas y técnicas de las sociedades establecidas, son suficientemente grandes, como para permitir ajustes y concesiones a los parias y a las fuerzas armadas que estén suficientemente entrenadas y equipadas, para ocuparse de las situaciones (hoy muy comunes) de emergencia. Sin embargo, el espectro está ahí otra vez, dentro y fuera de las fronteras de las sociedades avanzadas. El fácil paralelismo histórico con los bárbaros, amenazando el “imperio” de la civilización moderna, crea un prejuicio sobre el tema; el segundo período de la barbarie, puede ser el imperio continuado de la misma civilización. Pero, existe la posibilidad de que, en un segundo período, los extremos históricos se encuentren otra vez: La conciencia más avanzada de la humanidad y la fuerza más explotada. - Esto, no es más que una posibilidad. - La teoría crítica de la sociedad, no posee conceptos que puedan tender un puente sobre el abismo, entre el presente y el futuro: Sin sostener ninguna promesa, ni tener ningún éxito; sigue siendo negativa. Así quiere permanecer leal, a aquellos que sin esperanza, han dado y dan su vida, por y al rechazo.
Reflexiones: En el aspecto meramente humano, no se puede ni se debe, atacar los procesos históricos por que sí. Ellos tienen y merecen respeto; pues, por ellos, han dado su vida muchos de los grandes hombres, padres del pensamiento. Por ejemplo: El hombre continental (de tierra firme) ha respetado siempre a través de sus culturas, al hombre del mar. Agua = vida. Ya que el mundo está y estará, hasta cuando se acabe el agua. Luego, es un error pensar que el mundo antiguo, creía que el mundo era plano. Sabía que era redondo, pero que estaba supeditado, a lo que ellos denominaban la “Pangea”; por no “conocer” los demás continentes. Luego, también ya sabían (por tradición) de nuestro planeta, como tal; de sus países y de sus grandes civilizaciones, (muchas inclusive, más desarrolladas que la europea) ubicadas tanto en diferentes longitudes como latitudes.
Fueron poderosos navegantes, e inventaron sistemas de construcción de naves de gran calado; puesto que así, podían transportar inmensos pesos (proporcionado por grandes piedras y otros minerales.) impulsadas por el viento y la fuerza humana (remeros.) Es más, se cree que la civilización, nos viene de la antigua Antártica o, para ellos “La Atlántida”; hoy “Polo Sur”; cuando el planeta tenía otra inclinación. Poseían naves como Carabelas; Galeones y grandes "Carracas"; que transportaron muchos tesoros e inmensas riquezas, que engrosaron las “arcas reales” y les dieron fuerza económica (para pagar sus guerras) especialmente, a la civilización europea. Fueron atacados por bravos piratas, corsarios, filibusteros y bucaneros; muchos de ellos con la anuencia de sus respectivos “Reyes”; propiciadores de los mejores y más diversos negocios del momento. Más tarde el vapor revolucionó la navegación, tanto en los ríos como en el mar.
En este muy corto análisis. Pero que nos da un marco para preparar diversas analogías, que hoy nos sorprende, por su belleza y espontaneidad. Por ejemplo: Expuestas con multitud de detalles en el “cine”; chocando o, complementando los conceptos antiguo y moderno; magia y ciencia, vida y muerte, que destruye y construye con un empirismo absorbente, producto de la mitología que las mueve, obra de nuestra gran imaginación, desde luego, que heredada genéticamente.
Capítulo III
Notas:
Ciego - quien no ve el Sol; necio quien no lo conoce; ingrato quien no le da las gracias; si tanta es la luz, tanto el bien, tanto el beneficio, conque resplandece, conque sobresale, conque favorece nuestros sentidos, padre de las sustancias, sustentador de la vida. – (Dr. Jordano Bruno Nolano.)
Me amantaron - a sus pechos dos encantadoras ninfas, la Borrachera, hija de Baco; y la Ignorancia, hija de Pan. Siempre veréis en mi comitiva, junto con el resto de mis seguidores y acompañantes. Si queréis saber de mí, sus nombres, os diré, pero, por Hércules, habrá de ser en griego. – (Erasmo de Rótterdam.)
El hombre mental y su lucha por la libertad.
Reflexión: El ejemplo más reciente de esto, es el “problema” del “oriente medio”: en el cual los EU., después de gastar millones de dólares y de perder miles de sus soldados, ha “despejado” el área de los enemigos de la “Libertad” y de la “Democracia”. Luego, llamando a elecciones y estabilizado en el área; con sendos gobiernos libres y democráticos. Comienza la cuestión, (que también en el fondo, es la lucha por el petróleo) cuando los rusos, después de haber ocupado Afganistán, lo “pierde”, a los 10 años de intensa lucha para poder dominarlo. (Desintegrando, como consecuencia, a la segunda potencia mundial del momento; que quiso repetir, lo del conflicto de Vietnam.) Hay sin embargo, aquí, una paradoja con los demás países “americanos”; en los cuales “la coca” y su poder persuasivo, ha logrado infiltrar sus respectivas guerrillas (que denomínense como se denominen; son eso, vulgares guerrillas. Que una vez derrotado su máximo líder Osama Bin-Laden; hoy es un país en vía de democratización.) Así, que en el “oriente medio”; es “el opio” el que corrompe y desestabiliza, a sus países integrantes. Luego, vino la guerra contra Irák; que derrotado y ajusticiado, su dictador de turno Hussein; hoy goza de un gobierno libre y democrático. En fin, mucho agua pasará por sus grandes ríos (si es que este líquido no se acaba); hasta saber en definitiva quién ganará; si las fuerzas del mal, o las del bien.
Desarrollo: - Llegar a descubrir que la historia es una constante lucha por la libertad, (y la democracia) que la individualidad del hombre, exige, que éste posea una propiedad, como medio para realizarse plenamente; y que todos los hombres, tengan igual derecho a desarrollar sus facultades humanas. Empero, lo que prevalece de hecho, es la desigualdad (económica) y la esclavitud (sensual); por lo tanto, la mayoría de los hombres carecen de toda libertad (pobreza) y se hallan privados del último resto (deseo) de su propiedad. Por lo tanto, la realidad (no razonable) tiene que ser alterada hasta que llegue a conformarse con la razón. En este caso, es necesario reorganizar el orden social existente, abolir el absolutismo (económico) y los restos de feudalismo (producción.) Establecer una libre y más amplia competencia (crédito.) Para lograr plena libertad social, ante, (para y por) la “Ley”. Así, el pensamiento, tiene que gobernar la realidad. Lo que el hombre piensa que es verdadero, justo y bueno, tiene que ser realizado por la organización real de su vida individual y social. Este pensamiento, sin embargo, varía con los individuos, y la diversidad de opiniones individuales que resulta de ello; es incapaz de ofrecer un principio para orientar la organización común de la vida; a menos que el hombre posea conceptos y principios, de un pensamiento que denote condiciones y normas universalmente válidas; su pensamiento no puede reclamar el gobierno de la realidad, situado dentro de la tradición y la filosofía. –
La filosofía francesa, - y su sucesora revolucionaria, entendió la razón, como una fuerza histórica objetiva, que una vez liberada de cadenas despóticas, haría de “La Tierra”, un lugar progresista y feliz. Sostenía, además que el poder de la razón, y no el de la fuerza de las armas, propagaría los altos principios revolucionarios. En virtud, de su propio poder, la razón triunfaría sobre la irracionalidad social, y derrotaría a la opresión de la humanidad. Así, la razón sola puede gobernar la realidad; si la realidad se vuelve racional; lo que se hace posible, cuando el sujeto penetra en el contenido mismo de la naturaleza y de la historia. La realidad objetiva, entonces; es también la realización del sujeto. Luego, encontramos la categoría más importante de la razón, a saber: “La Libertad”. La razón presupone la libertad (y la democracia); el poder actuar de acuerdo con el conocimiento de la verdad; el poder de dar forma a la realidad, conforme a sus potencialidades; entonces, la razón culmina en la libertad, y la libertad es la existencia misma del sujeto. Igualmente, la misma razón, existe sólo a través de su realización, en el proceso de su conversión a lo real. -
Por otra parte, la historia. - Está organizada en diferentes períodos; cada uno de los cuales, señala un nivel de desarrollo distinto y representa un estadio, definido en la realización de la razón; donde aparecen diferentes estadios, pero hay sólo una razón; así como sólo hay una verdad: La realidad de la libertad y la democracia. Así, mientras haya una separación entre lo real y lo potencial, es necesario actuar sobre lo real y modificarlo, hasta conformarlo con la razón. - En tanto, que la realidad, no esté configurada por la razón, sigue sin ser realidad, en el sentido enfático de la palabra. Lo “real” viene a significar: Que no es todo lo que existe de hecho (esto sería denominado más bien apariencia); sino, lo que existe, en una forma que concuerde con las normas de la razón. Lo “real”, es lo racional y es solo esto. Por ejemplo: “El Estado”, sólo se hace realidad, cuando corresponde a las potencialidades dadas del hombre; y le permite además, su pleno desarrollo. Cualquier forma preliminar de Estado, no es aún racional, y por lo tanto, no es aún real. El sistema de Hegel: Es la última gran expresión de este idealismo cultural, y el último gran intento, por hacer del pensamiento, el refugio de la razón y de la libertad. El original impulso crítico de su pensamiento fue, empero, lo bastante fuerte para llevarlo a abandonar la indiferencia tradicional del idealismo por la historia. - “Hizo de la filosofía, un factor histórico concreto, e introdujo la historia en la filosofía”. - Pero la historia, cuando es comprendida, rompe el marco idealista. El sistema de Hegel, está pues, necesariamente asociado con una filosofía política definida, y con un orden político y social también, definido. -
No obstante, - la filosofía de Hegel, que comienza con la negación de lo dado, y conserva siempre esta negatividad; concluye, con la declaración, de que la historia, ha alcanzado la realidad de la razón; sus conceptos básicos están todavía ligados a la estructura social del sistema dominante; y en tal sentido se puede decir también que: - “El idealismo alemán, preservaba la herencia humanística de la Revolución Francesa”. - La verdad, requiere entonces, para cumplirse una práctica historia real, abandonar lo ideal; la filosofía abandona su tarea crítica y pasa a otra cosa. La culminación final de la filosofía es, así, al mismo tiempo, su abdicación. Liberada, de sus preocupaciones por el ideal, la filosofía, se libera también de su oposición a la realidad. Esto significa que deja de ser filosofía, De esto no se desprende, sin embargo, que el pensamiento haya de condescender con el orden existente. El pensamiento crítico, no cesa, sino que, asume otra forma. Los esfuerzos de la razón, se vuelven hacia la teoría y práctica social. – Nota: (Ver “Razón y Revolución” Herbert Marcuse. Ed. Altaya. 1994. Pág. 17-34.)
Resumiendo: Una vez, que hayamos elegido ver a la Luz, o sea a Dios; pero, no, como algo que permanece muy lejano, quizá en los bordes del universo (sí, es que los tiene); sino, como alguien que está (si queremos) con nosotros, representado por el “Espíritu Santo”; como alguien que nos integra, que nos dirige y que nos une. Entonces comprendemos que Él, es energía pura, emanada en forma ínter-dimensional; que únicamente, llega a nosotros por medio de la intensa oración y el ayuno. Que una vez dentro de nosotros, lo podemos sentir, lo podemos ver. Entonces, lo que para otros es invisible, e imposible de alcanzar; que inclusive, debido a esto, hasta lo niegan. Luego, especialmente, en el estado “onírico”, recibimos sus mensajes orientadores, que nos ayudarán a vencer al enemigo (Satanás.) Entonces, al desconocer su “Ley” (la mosaica); entramos en un estado de pecado y tribulación; pero, invocando a Jesucristo, llegamos a Él: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.» (Sn. juán 14.6)
En la “era de la mente”, descubriremos muchas cosas; entre ellas, que ya la humanidad ha entrado en ésta; y que si, primordialmente, consideramos a Dios, como una fuerza o, energía prístina, a la que debemos, llegar, por medio de Jesucristo; para, luego también, entender, que aquello del “libre albedrío”; es una de las maravillosas características dadas por Dios, en el momento de la creación. Veremos, además cómo y porqué, las Sagradas Escrituras, que fueron hechas en un lenguaje esotérico y simbólico; y que es ahora, cuando estaremos en capacidad de entenderlas y de interpretarlas correctamente, al descifrarlas. Entonces, sabremos y comprobaremos la verdad revelada; pues, otearemos el porqué (del pecado); que al ofender a Dios, nos coloca en la imposibilidad de comprender y de ver; como el pecado nos aturde y nos duerme; nos acostumbra, desintegrando para siempre a nuestra alma. Entonces, y solo entonces (quizás no sea tarde) descubriremos, el porqué de la maldad y el cómo ésta nos restringe el camino a Dios.
Capítulo IV
Nota:
Mediante una psiquis y una psicósfera multidimensional y conjunta; nuestros ideales, avanzarán en el neto y original “espacio-tiempo”; dentro de las principales etapas metafísicas o, mundos del pensamiento: Emanación; creación; formación y activación. Y todo... mientras llega la parusía... tan esperada por el cristiano.
La psicósfera: Un planteamiento mal interpretado.
Al comienzo, - la respuesta de Hegel, fue la de un estudiante de teología. Su interpretación del cristianismo atribuía a éste una función básica en la historia del mundo: la de ofrecer un centro nuevo al hombre y una meta final a su vida, No obstante, Hegel se daba cuanta también de que la verdad revelada del Evangelio no se adecua a las relaciones políticas y sociales que se dan en el mundo; ya que el Evangelio se dirige esencialmente al individuo, como un ser desligado de nexos sociales y políticos, Su fin esencial, es salvar (la alma) al individuo y no a la sociedad o al Estado. Por lo tanto, no era la religión, lo que podía resolver el problema (pero ayuda, ya que libertad no es libertinaje); ni la teología lo que podía ofrecer principios para restaurar la libertad y la unidad. Como resultado de ello, el interés de Hegel se desvió lentamente de los asuntos y conceptos teológicos, a los filosóficos. – Nota: (Ver “Razón y Revolución” Herbert Marcuse. Ed. Altaya. 1994. Pág. 40.)
La vida, (biológica) se distingue de todos los demás estados del ser, por la relación única que mantiene con sus determinaciones y con el mundo como un todo. En virtud de sus particularidades y de su forma limitada y determinada: - Todo objeto inanimado, es diferente u opuesto al género; lo particular contradice a lo universal, de modo que el género, no se cumple en el objeto inanimado. - Lo viviente, empero, es diferente de lo no viviente, en este sentido; ya que la vida, designa un ser cuyos estados y partes diferentes, se hallan integrados en una unidad completa, la unidad del sujeto. - En la vida, lo particular, es el tiempo, una rama del árbol infinito de la vida. Cada parte, fuera del todo, es al mismo tiempo el todo, es la vida, Todo individuo viviente, es también una manifestación del todo de la vida. - En otras palabras, posee la esencia o potencialidades plenas de la vida. - Aún más, aunque todo ser viviente, está determinado y limitado, es capaz de invalidar sus limitaciones en virtud del poder que posee como sujeto viviente. La vida, es en primer lugar, una serie de determinadas condiciones objetivas; ya que el sujeto viviente, las encuentra fuera de él, limitando su libre autorrealización. - No obstante, el proceso de la vida consiste en atraer continuamente estas condiciones extremas hacia la resistente unidad del sujeto. El ser viviente, se mantiene a sí mismo como tal, dominando y anexando, la multitud de condiciones determinadas que encuentra; y creando una armonía entre sí mismo y todo lo que se opone a sí mismo. Por consiguiente, la unidad de la vida, no es una unidad inmediata y natural, sino el resultado de una superación activa y constante de todo lo que se enfrenta a ella. -
Hegel. Adoptó el punto de vista de que la filosofía, surge de las contradicciones omni-comprensivas en que se encuentra sumida la existencia humana. Este origen, ha configurado la historia de la filosofía, como historia de las contradicciones básicas; contradicciones, entre: - “Espíritu y materia; alma y cuerpo; creencia y entendimiento; libertad y necesidad”; “Inteligencia y naturaleza; y, en la forma más general de subjetividad y objetividad”. – Pues, como ya lo dijimos, la lucha contra el sentido común, es el comienzo del pensamiento especulativo, y la pérdida de la seguridad cotidiana, es el origen de la filosofía. - En Kant, declara Hegel: La razón está limitada a un dominio interno del espíritu, y no tiene ningún poder, sobre “las cosas en sí”. - En otras palabras, no es realmente la razón, sino el entendimiento, lo que domina la filosofía kantiana. El modelo dialéctico representa y por lo tanto es la “verdad” de un mundo permeado por la negatividad; un mundo, en el que todo es algo distinto de lo que “realmente” es; y en el que la oposición y la contradicción, constituyen las leyes del progreso. Hegel, afirma, además, que una forma social dominante, puede ser atacada con éxito, por el pensamiento; sólo si esta forma ha entrado en franca contradicción con su propia “verdad”, en otras palabras: - Si ya no puede satisfacer las demandas de sus propios contenidos. - Hegel, cree que el antiguo orden debe ser reemplazado por la “verdadera comunidad” o sea, una sociedad en la que todos los intereses particulares e individuales, están integrados en el todo; de modo que el organismo social real que resulta de ello, concuerde con el interés común (comunidad) y luego, una totalidad en la cual todos los conceptos aislados del conocimiento, estén fundidos e integrados de manera tal que reciben su significado a través de su relación con el todo (universalidad.) Así, como la concepción de la desintegración, en la esfera del conocimiento, exprese la desintegración de las relaciones humanas, existentes en la sociedad y la integración política y social. La universalidad de la razón, representada por el absoluto; es la contrapartida filosófica de la comunidad social; en la que todos los intereses particulares están unificados en el todo. Pero esta universalidad es sólo una ficción legal abstracta; en realidad, la propiedad privada continúa siendo “algo aislada” que no tiene relación con el todo. La única unidad que pueden alcanzar los propietarios, es la unidad artificial de un sistema legal universalmente aplicado. Empero, las leyes sólo estabilizan y codifican las condiciones anárquicas existentes de la propiedad privada y así transforman al Estado o, a la comunidad, en una institución que existe en pro de intereses particulares. – La posesión existe con anterioridad a la Ley; y no se origina en la Ley. Lo que ya había sido objeto de apropiación privada, es convertido en un derecho legal. El derecho constitucional, es por tanto, en sentido estricto, derecho privado; y los derechos políticos, son formas legalizadas de posesión, derechos de propiedad. -
Un Estado, - en el que los intereses privados antagónicos predominan de tal manera en todos los campos, no puede ser considerado una verdadera comunidad. Además, la lucha por convertir al poder estatal, en propiedad privada, disuelve al Estado y acarrea la destrucción de su poder. El Estado, aunque tomado por los intereses privados, debe asumir una verdadera comunidad; con el fin de acallar luchas y defender en forma equitativa, los derechos de propiedad de todos sus miembros. De este modo, la comunidad se convierte en un poder independiente, colocado por encima de los individuos. – Todo individuo, desea vivir en la seguridad de su propiedad, garantizada por el poder estatal. El poder estatal, se le presenta como algo extraño, que existe fuera de él. -
Ahora, las formas de asociación, difieren de acuerdo con los variados grados de integración que se alcanza en ellas. - El agente integrador es: Primero la familia; luego las instituciones sociales del trabajo; la propiedad; la “Ley”; y finalmente el Estado. El modo de división del trabajo, transforma el trabajo particular del individuo, realizado con el fin de satisfacer sus necesidades personales, en trabajo general; que opera para producir bienes para el mercado. Hegel, denomina a este último trabajo: “Abstracto y cuantitativo”, y lo hace responsable de la creciente desigualdad de los hombres y de la riqueza. El cuadro general de la sociedad, es un cuadro en el que “el sistema de necesidades” es un “sistema de mutua dependencia física”. El trabajo del individuo, es incapaz de garantizar la satisfacción de sus necesidades. “Una fuerza ajena al individuo y sobre la cual éste no tiene ningún poder”, determina la satisfacción de sus necesidades. El valor del producto del trabajo es “independiente del individuo y está sujeto a cambios constantes”. La forma de gobierno es también de tipo anárquico, Lo que gobierna no es más que la inconsciente y ciega totalidad de necesidades y los modos de satisfacerla. La sociedad, tiene que dominar “su ciego e inconsciente destino”. Empero, tal dominio, resulta incompleto en tanto prevalezca la anarquía general de los intereses. La excesiva riqueza acompaña a la excesiva pobreza, y el trabajo puramente cuantitativo, empuja al hombre “a un estado de extremada barbarie”. Especialmente aquella parte de la población que “está sujeta al trabajo mecánico de las fábricas”.
Capítulo V
Nota:
El empleo tradicional, - dio un giro e hizo que el hombre, buscara salidas a la crisis mundial de la economía. Nuevos caminos se muestran en el horizonte. – (Helmut Saiger. “El futuro del trabajo, no está en la labor profesional”.)
Cambian las formas del trabajo.
El drama del desempleo es mucho más grave de lo que permiten imaginar las estadísticas sobre “desocupación”. Los expertos, pronostican que por ejemplo: En Europa, el porcentaje de los asalariados industriales, pasará del 35% actual (año 2000) a un 15% de la población activa. Aunque a primera vista, el sector de servicios, parece el indicado para compensar los empleos perdidos; el proceso de automatización y racionalización en seguros, banca, comercio y artesanías; aún está empezando; y las posibilidades que ofrece la “Red Internet”, hacen superfluos muchos puestos de trabajo. La probabilidad de que se recupere el tradicional pleno empleo, de forma sostenible, es tan intima que hace necesario estudiar la posibilidad de otros caminos. No basta mejorar la competitividad de las empresas, acelerar el avance de las ciencias y la modernización del Estado. Urge reflexionar sobre la configuración de una sociedad futura que ya no se base en el clásico trabajo remunerado. La limitación del concepto del trabajo a la actividad retribuida es algo que sólo existe desde hace unos 200 años; con la industrialización. Esto hizo que se despreciaran las labores domésticas y se excluyeran de los índices de crecimiento y bienestar. Sin embargo, por ejemplo: En Alemania, se estima que en los hogares se trabajan cerca de 10 millones de horas más que en el sector privado de la economía. El volumen de trabajo con carácter honorífico, equivale a un millón de puestos de trabajo a horario completo. A principios del Siglo pasado, el ser humano, empleaba un 35% de su vida, en el trabajo remunerado. Hoy, este porcentaje, es solo del 12% al 13%.
Insisto... el camino está: En nuevas oportunidades.
Nota:
¿En la actividad docente, estará el porvenir de este planeta, como tal? La respuesta, es que cuenta con todo (recursos humanos y materiales) lo necesario – ideales, creatividad, ciencia, tecnología, bienestar, recreación, seguridad, vida y futuro - para dar el gran giro y lograr los más grandes objetivos humanos, por ejemplo: Por medio de la necesidad; la humanidad, hará de ella, no una emboscada, ya que vencida ésta (con educación) ya no habrá enemigo que la tranque; pues es, en ella misma, en donde está el gran peligro. Es por tanto, ella (la necesidad) el motor creador de la historia; y finalmente, está, en la consecución de medios y recursos para lograr su evolución (o, transformación) final. Luego, principalmente está en nuestras manos, el, lograrlo, al dar un vuelco a la cultura y a la concepción filosófica; al cambiar la necesidad por la subsistencia, como especie. Dejando, lo individual por lo general. Ver el planeta en conjunto, por encima de los intereses particulares y estrechar nuestra relación con la naturaleza; lo cual, nos dará la motivación suficiente para lograr el triunfo que no es otro que nuestra propia transformación. (Humberto Rojas Rodríguez. “Cómo construir el mundo del Siglo XXI”. Ed. Angora. 1996. Págs. 15-24.)
¿Qué otras oportunidades de ingresos o actividad se podrían desarrollar, para complementar el tradicional trabajo remunerado? La población pasiva, percibe la falta de actividad, como un vacío, porque no consigue mantener su nivel de vida con lo que recibe. En el mundo se montan bolsas de intercambio de servicios, entre los hogares, para gastar menos, y se prestan servicios a cambio de unidades de cuenta. El propósito, es complementar la economía monetaria, con otra, basada en unidades de tiempo de intercambio; en EU., denominadas, dólares de tiempo.
En vista, de la creciente necesidad de una formación continuada, la Comisión Nacional Suiza de la “UNESCO”, exige que se reconozca la capacitación, como actividad laboral. De otro lado el economista Milton Friedman, propone la entrega de vales de educación o capacitación. En resumen, son cinco los pilares en que se podría basar la nueva sociedad de trabajo; actividad retribuida, labores domésticas, servicios de intercambio, trabajos “ad honorem” y actividades de formación. Con ellos se constituiría una cartera de trabajos o actividades opuestas a la tradicional cartera de ingresos, que nos independizaría del empleo remunerado. Si los ciudadanos, asumieran cada vez más responsabilidades, no retribuidas; el Estado, necesitaría ayudar menos y los recursos liberados, se podrían aplicar al fomento de obras de bien común, en vez de malgastarse en la administración de subsidios improductivos. ¿Qué podemos hacer, para que cada uno pueda contribuir a esta nueva y activa sociedad civil? En primer lugar. Habría que dejar de considerar el hogar, como de “economías domésticas”; que no se limitan a consumir y a disfrutar del tiempo libre, sino como un lugar social de producción de labores domésticas y de ayudas mutuas.
La etapa siguiente, mediante una visión universal.
Durante el desarrollo, que representa un verdadero “sistema de justicia”; éste, crea un equilibrio entre los antagonismos existentes; pero lo hace sólo en términos de las relaciones de la propiedad. Luego, en este caso, se administra la Ley, independientemente de las relaciones particulares. Entonces, el principio de libertad, se basa en que gobernadores y gobernados (regionales) son iguales; al suprimir los conflictos e intereses particulares, expresados en la “moralidad general”. Éste el primer proyecto de la filosofía social de Hegel; pues, anuncia ya, la concepción que subyace en todo su sistema: El orden social dado, basado, en el sistema de trabajo abstracto y cuantitativo; y en la integración de las necesidades; por medio del intercambio de bienes y servicios; pero, incapaz de establecer y mantener una comunidad (general) racional. Éste orden, así, es esencialmente un orden anárquico e irracional, gobernado por ciegos mecanismos económicos; un orden todo progreso, no es más que una unificación temporal de los opuestos. La exigencia hegeliana, de un Estado fuerte e independiente; se deriva de la penetración de las contradicciones irreconciliables de la sociedad moderna. Hegel, fue el primero en alcanzar esta penetración. Su justificación del Estado fuerte, se funda, en la idea de que éste es un complemento necesario a la estructura antagónica de la sociedad individualista.
Nuevas formas laborales y de contratación.
Nota:
Curiosamente, - la “teoría general de la relatividad;, parte del valor del conocimiento profundo e innovador de las ideas geométricas de Bernhard Rieman y de P. S. De La Place; en sus conceptos profundos, de probabilidad y estadística. -
Conclusión.
Nota:
Sólo - gracias a aquellos sin esperanza, nos es dada la esperanza.- (Benjamín Walter)
La sociedad unidimensional avanzada, altera la relación entre lo racional y lo irracional; contrastando, con los aspectos fantásticos y enajenados de su racionalidad; así, el reino de lo irracional, se convierte en el ámbito de lo realmente racional de las ideas que pueden “promover el arte de la vida”. - Entonces, la dimensión estética, conserva todavía su libertad de expresión, que le permite al escritor y al artista; llamar a los hombres, y a las cosas; por su nombre; y nombrar, lo que de otra manera, es innombrable. - Y ya no es la imaginación, la que habla en él, sino la razón; en realidad, la que justifica todo y absuelve todo – excepto del pecado contra su espíritu - . Luego, la imaginación, está abdicando ante la realidad, que ante los hechos, la atrapa y sobrepasa; convierte la ilusión en realidad y la ficción en verdad. En los campos anteriores, antagónicos, se mezclan en el terreno técnico y en el político: Ciencia y magia, vida y muerte, alegría y miseria. Si estas realizaciones, no penetran la conciencia; si realmente se da por sentado, es porque estas realizaciones son: a) perfectamente racionales en términos del orden existente, b) signos de ingenuidad humana y del poder más allá de los límites tradicionales de la imaginación.
La obscena mezcla de la estética y la realidad, refuta a las filosóficas que se oponen a la imaginación (poética) y a la razón (científica o, empírica.) El carácter científico, racional de la imaginación, ha sido reconocido en las matemáticas, en la hipótesis y experimentos de la ciencia física. Es igualmente reconocido en el psicoanálisis, que está basado, en teoría: En la aceptación de la racionalidad específica de lo irracional; la imaginación comprendida, llega a ser en él, orientada en una fuerza terapéutica. Así, la imaginación, no ha permanecido inmune al proceso místico. Somos pues, poseídos por nuestras imágenes; sufrimos nuestras propias imágenes; sin embargo, “darle a la imaginación todos los medios de expresión” sería un imperdonable retroceso; una liberación así, sería un horror, no un milagro ya que “una vida sin temor, no puede ser nunca, producto de la imaginación”.
Políticamente, las instituciones. - Dentro de las que puede imaginarse concentrada la pacificación; desafían así, la tradicional clasificación: En administraciones autoritarias y democráticas, centralizadas y liberales. Hoy, la oposición a la planificación central, en nombre de una democracia liberal, que sea negada; en realidad sirve peligrosamente, sólo como pretexto ideológico para ocultos intereses represivos. Se apoderan de ella y luego pontifican, cual corderos, con piel de lobo. Sirve para confusiones, que luego ya en el poder, resultan sin remedio. Comienzan, desvirtuando todo lo positivamente histórico, contradiciendo, hasta la madre de las buenas costumbres; para luego eternizarse en el poder, mediante elecciones amañadas. En la presente etapa de desarrollo de las sociedades industriales avanzadas; tanto el sistema material como el cultural, niega esta exigencia. El poder y la eficacia de este sistema; la total asimilación del espíritu, con los hechos del pensamiento, con la conducta requerida, de las aspiraciones, con la realidad; se oponen a la aparición de un nuevo y muy escondido sujeto, peligroso, dictatorial, generalmente castrense y nacionalista.
Los hechos y las alternativas, son como fragmentos que no encajan, o como un mundo de mudos objetos; sin sujeto, sin la práctica que movería estos objetos, en una nueva dirección. La teoría dialéctica no es refutable, no puede ofrecer el remedio; no puede ser positiva. Sin duda, el concepto dialéctico, al comprender los hechos dados, los trasciende. Éste es el signo de su verdad. Define las posibilidades históricas, incluyendo las necesidades; pero su realización sólo puede estar en la práctica que responda a la teoría; y, en el presente, la práctica no da tal respuesta. En un estado avanzado, la dominación funciona como administración, y en las áreas súper-desarrolladas del consumo de masas; la vida administrada, llega a ser la buena vida de la totalidad, en defensa de la cual se unen los opuestos. Ésta es la forma pura de la dominación; que recíprocamente, su negación, parece hoy, ser la forma más pura de la negación. Todo contenido, parece reducido, a la única petición abstracta del fin de la dominación: única exigencia, verdaderamente revolucionaria y que daría validez a los logros de la civilización industrial. Ante su eficaz negación, por parte del sistema establecido, esta negación aparece bajo una forma políticamente impotente de la “negación absoluta”: una negación que parece más irrazonable, conforme el sistema establecido que desarrolle más su productividad y alivie las cargas de la vida.
Finalmente, las capacidades económicas y técnicas de las sociedades establecidas, son suficientemente grandes, como para permitir ajustes y concesiones a los parias y a las fuerzas armadas que estén suficientemente entrenadas y equipadas, para ocuparse de las situaciones (hoy muy comunes) de emergencia. Sin embargo, el espectro está ahí otra vez, dentro y fuera de las fronteras de las sociedades avanzadas. El fácil paralelismo histórico con los bárbaros, amenazando el “imperio” de la civilización moderna, crea un prejuicio sobre el tema; el segundo período de la barbarie, puede ser el imperio continuado de la misma civilización. Pero, existe la posibilidad de que, en un segundo período, los extremos históricos se encuentren otra vez: La conciencia más avanzada de la humanidad y la fuerza más explotada. - Esto, no es más que una posibilidad. - La teoría crítica de la sociedad, no posee conceptos que puedan tender un puente sobre el abismo, entre el presente y el futuro: Sin sostener ninguna promesa, ni tener ningún éxito; sigue siendo negativa. Así quiere permanecer leal, a aquellos que sin esperanza, han dado y dan su vida, por y al rechazo.
Reflexiones: En el aspecto meramente humano, no se puede ni se debe, atacar los procesos históricos por que sí. Ellos tienen y merecen respeto; pues, por ellos, han dado su vida muchos de los grandes hombres, padres del pensamiento. Por ejemplo: El hombre continental (de tierra firme) ha respetado siempre a través de sus culturas, al hombre del mar. Agua = vida. Ya que el mundo está y estará, hasta cuando se acabe el agua. Luego, es un error pensar que el mundo antiguo, creía que el mundo era plano. Sabía que era redondo, pero que estaba supeditado, a lo que ellos denominaban la “Pangea”; por no “conocer” los demás continentes. Luego, también ya sabían (por tradición) de nuestro planeta, como tal; de sus países y de sus grandes civilizaciones, (muchas inclusive, más desarrolladas que la europea) ubicadas tanto en diferentes longitudes como latitudes.
Fueron poderosos navegantes, e inventaron sistemas de construcción de naves de gran calado; puesto que así, podían transportar inmensos pesos (proporcionado por grandes piedras y otros minerales.) impulsadas por el viento y la fuerza humana (remeros.) Es más, se cree que la civilización, nos viene de la antigua Antártica o, para ellos “La Atlántida”; hoy “Polo Sur”; cuando el planeta tenía otra inclinación. Poseían naves como Carabelas; Galeones y grandes "Carracas"; que transportaron muchos tesoros e inmensas riquezas, que engrosaron las “arcas reales” y les dieron fuerza económica (para pagar sus guerras) especialmente, a la civilización europea. Fueron atacados por bravos piratas, corsarios, filibusteros y bucaneros; muchos de ellos con la anuencia de sus respectivos “Reyes”; propiciadores de los mejores y más diversos negocios del momento. Más tarde el vapor revolucionó la navegación, tanto en los ríos como en el mar.
En este muy corto análisis. Pero que nos da un marco para preparar diversas analogías, que hoy nos sorprende, por su belleza y espontaneidad. Por ejemplo: Expuestas con multitud de detalles en el “cine”; chocando o, complementando los conceptos antiguo y moderno; magia y ciencia, vida y muerte, que destruye y construye con un empirismo absorbente, producto de la mitología que las mueve, obra de nuestra gran imaginación, desde luego, que heredada genéticamente.
Capítulo III
Notas:
Ciego - quien no ve el Sol; necio quien no lo conoce; ingrato quien no le da las gracias; si tanta es la luz, tanto el bien, tanto el beneficio, conque resplandece, conque sobresale, conque favorece nuestros sentidos, padre de las sustancias, sustentador de la vida. – (Dr. Jordano Bruno Nolano.)
Me amantaron - a sus pechos dos encantadoras ninfas, la Borrachera, hija de Baco; y la Ignorancia, hija de Pan. Siempre veréis en mi comitiva, junto con el resto de mis seguidores y acompañantes. Si queréis saber de mí, sus nombres, os diré, pero, por Hércules, habrá de ser en griego. – (Erasmo de Rótterdam.)
El hombre mental y su lucha por la libertad.
Reflexión: El ejemplo más reciente de esto, es el “problema” del “oriente medio”: en el cual los EU., después de gastar millones de dólares y de perder miles de sus soldados, ha “despejado” el área de los enemigos de la “Libertad” y de la “Democracia”. Luego, llamando a elecciones y estabilizado en el área; con sendos gobiernos libres y democráticos. Comienza la cuestión, (que también en el fondo, es la lucha por el petróleo) cuando los rusos, después de haber ocupado Afganistán, lo “pierde”, a los 10 años de intensa lucha para poder dominarlo. (Desintegrando, como consecuencia, a la segunda potencia mundial del momento; que quiso repetir, lo del conflicto de Vietnam.) Hay sin embargo, aquí, una paradoja con los demás países “americanos”; en los cuales “la coca” y su poder persuasivo, ha logrado infiltrar sus respectivas guerrillas (que denomínense como se denominen; son eso, vulgares guerrillas. Que una vez derrotado su máximo líder Osama Bin-Laden; hoy es un país en vía de democratización.) Así, que en el “oriente medio”; es “el opio” el que corrompe y desestabiliza, a sus países integrantes. Luego, vino la guerra contra Irák; que derrotado y ajusticiado, su dictador de turno Hussein; hoy goza de un gobierno libre y democrático. En fin, mucho agua pasará por sus grandes ríos (si es que este líquido no se acaba); hasta saber en definitiva quién ganará; si las fuerzas del mal, o las del bien.
Desarrollo: - Llegar a descubrir que la historia es una constante lucha por la libertad, (y la democracia) que la individualidad del hombre, exige, que éste posea una propiedad, como medio para realizarse plenamente; y que todos los hombres, tengan igual derecho a desarrollar sus facultades humanas. Empero, lo que prevalece de hecho, es la desigualdad (económica) y la esclavitud (sensual); por lo tanto, la mayoría de los hombres carecen de toda libertad (pobreza) y se hallan privados del último resto (deseo) de su propiedad. Por lo tanto, la realidad (no razonable) tiene que ser alterada hasta que llegue a conformarse con la razón. En este caso, es necesario reorganizar el orden social existente, abolir el absolutismo (económico) y los restos de feudalismo (producción.) Establecer una libre y más amplia competencia (crédito.) Para lograr plena libertad social, ante, (para y por) la “Ley”. Así, el pensamiento, tiene que gobernar la realidad. Lo que el hombre piensa que es verdadero, justo y bueno, tiene que ser realizado por la organización real de su vida individual y social. Este pensamiento, sin embargo, varía con los individuos, y la diversidad de opiniones individuales que resulta de ello; es incapaz de ofrecer un principio para orientar la organización común de la vida; a menos que el hombre posea conceptos y principios, de un pensamiento que denote condiciones y normas universalmente válidas; su pensamiento no puede reclamar el gobierno de la realidad, situado dentro de la tradición y la filosofía. –
La filosofía francesa, - y su sucesora revolucionaria, entendió la razón, como una fuerza histórica objetiva, que una vez liberada de cadenas despóticas, haría de “La Tierra”, un lugar progresista y feliz. Sostenía, además que el poder de la razón, y no el de la fuerza de las armas, propagaría los altos principios revolucionarios. En virtud, de su propio poder, la razón triunfaría sobre la irracionalidad social, y derrotaría a la opresión de la humanidad. Así, la razón sola puede gobernar la realidad; si la realidad se vuelve racional; lo que se hace posible, cuando el sujeto penetra en el contenido mismo de la naturaleza y de la historia. La realidad objetiva, entonces; es también la realización del sujeto. Luego, encontramos la categoría más importante de la razón, a saber: “La Libertad”. La razón presupone la libertad (y la democracia); el poder actuar de acuerdo con el conocimiento de la verdad; el poder de dar forma a la realidad, conforme a sus potencialidades; entonces, la razón culmina en la libertad, y la libertad es la existencia misma del sujeto. Igualmente, la misma razón, existe sólo a través de su realización, en el proceso de su conversión a lo real. -
Por otra parte, la historia. - Está organizada en diferentes períodos; cada uno de los cuales, señala un nivel de desarrollo distinto y representa un estadio, definido en la realización de la razón; donde aparecen diferentes estadios, pero hay sólo una razón; así como sólo hay una verdad: La realidad de la libertad y la democracia. Así, mientras haya una separación entre lo real y lo potencial, es necesario actuar sobre lo real y modificarlo, hasta conformarlo con la razón. - En tanto, que la realidad, no esté configurada por la razón, sigue sin ser realidad, en el sentido enfático de la palabra. Lo “real” viene a significar: Que no es todo lo que existe de hecho (esto sería denominado más bien apariencia); sino, lo que existe, en una forma que concuerde con las normas de la razón. Lo “real”, es lo racional y es solo esto. Por ejemplo: “El Estado”, sólo se hace realidad, cuando corresponde a las potencialidades dadas del hombre; y le permite además, su pleno desarrollo. Cualquier forma preliminar de Estado, no es aún racional, y por lo tanto, no es aún real. El sistema de Hegel: Es la última gran expresión de este idealismo cultural, y el último gran intento, por hacer del pensamiento, el refugio de la razón y de la libertad. El original impulso crítico de su pensamiento fue, empero, lo bastante fuerte para llevarlo a abandonar la indiferencia tradicional del idealismo por la historia. - “Hizo de la filosofía, un factor histórico concreto, e introdujo la historia en la filosofía”. - Pero la historia, cuando es comprendida, rompe el marco idealista. El sistema de Hegel, está pues, necesariamente asociado con una filosofía política definida, y con un orden político y social también, definido. -
No obstante, - la filosofía de Hegel, que comienza con la negación de lo dado, y conserva siempre esta negatividad; concluye, con la declaración, de que la historia, ha alcanzado la realidad de la razón; sus conceptos básicos están todavía ligados a la estructura social del sistema dominante; y en tal sentido se puede decir también que: - “El idealismo alemán, preservaba la herencia humanística de la Revolución Francesa”. - La verdad, requiere entonces, para cumplirse una práctica historia real, abandonar lo ideal; la filosofía abandona su tarea crítica y pasa a otra cosa. La culminación final de la filosofía es, así, al mismo tiempo, su abdicación. Liberada, de sus preocupaciones por el ideal, la filosofía, se libera también de su oposición a la realidad. Esto significa que deja de ser filosofía, De esto no se desprende, sin embargo, que el pensamiento haya de condescender con el orden existente. El pensamiento crítico, no cesa, sino que, asume otra forma. Los esfuerzos de la razón, se vuelven hacia la teoría y práctica social. – Nota: (Ver “Razón y Revolución” Herbert Marcuse. Ed. Altaya. 1994. Pág. 17-34.)
Resumiendo: Una vez, que hayamos elegido ver a la Luz, o sea a Dios; pero, no, como algo que permanece muy lejano, quizá en los bordes del universo (sí, es que los tiene); sino, como alguien que está (si queremos) con nosotros, representado por el “Espíritu Santo”; como alguien que nos integra, que nos dirige y que nos une. Entonces comprendemos que Él, es energía pura, emanada en forma ínter-dimensional; que únicamente, llega a nosotros por medio de la intensa oración y el ayuno. Que una vez dentro de nosotros, lo podemos sentir, lo podemos ver. Entonces, lo que para otros es invisible, e imposible de alcanzar; que inclusive, debido a esto, hasta lo niegan. Luego, especialmente, en el estado “onírico”, recibimos sus mensajes orientadores, que nos ayudarán a vencer al enemigo (Satanás.) Entonces, al desconocer su “Ley” (la mosaica); entramos en un estado de pecado y tribulación; pero, invocando a Jesucristo, llegamos a Él: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.» (Sn. juán 14.6)
En la “era de la mente”, descubriremos muchas cosas; entre ellas, que ya la humanidad ha entrado en ésta; y que si, primordialmente, consideramos a Dios, como una fuerza o, energía prístina, a la que debemos, llegar, por medio de Jesucristo; para, luego también, entender, que aquello del “libre albedrío”; es una de las maravillosas características dadas por Dios, en el momento de la creación. Veremos, además cómo y porqué, las Sagradas Escrituras, que fueron hechas en un lenguaje esotérico y simbólico; y que es ahora, cuando estaremos en capacidad de entenderlas y de interpretarlas correctamente, al descifrarlas. Entonces, sabremos y comprobaremos la verdad revelada; pues, otearemos el porqué (del pecado); que al ofender a Dios, nos coloca en la imposibilidad de comprender y de ver; como el pecado nos aturde y nos duerme; nos acostumbra, desintegrando para siempre a nuestra alma. Entonces, y solo entonces (quizás no sea tarde) descubriremos, el porqué de la maldad y el cómo ésta nos restringe el camino a Dios.
Capítulo IV
Nota:
Mediante una psiquis y una psicósfera multidimensional y conjunta; nuestros ideales, avanzarán en el neto y original “espacio-tiempo”; dentro de las principales etapas metafísicas o, mundos del pensamiento: Emanación; creación; formación y activación. Y todo... mientras llega la parusía... tan esperada por el cristiano.
La psicósfera: Un planteamiento mal interpretado.
Al comienzo, - la respuesta de Hegel, fue la de un estudiante de teología. Su interpretación del cristianismo atribuía a éste una función básica en la historia del mundo: la de ofrecer un centro nuevo al hombre y una meta final a su vida, No obstante, Hegel se daba cuanta también de que la verdad revelada del Evangelio no se adecua a las relaciones políticas y sociales que se dan en el mundo; ya que el Evangelio se dirige esencialmente al individuo, como un ser desligado de nexos sociales y políticos, Su fin esencial, es salvar (la alma) al individuo y no a la sociedad o al Estado. Por lo tanto, no era la religión, lo que podía resolver el problema (pero ayuda, ya que libertad no es libertinaje); ni la teología lo que podía ofrecer principios para restaurar la libertad y la unidad. Como resultado de ello, el interés de Hegel se desvió lentamente de los asuntos y conceptos teológicos, a los filosóficos. – Nota: (Ver “Razón y Revolución” Herbert Marcuse. Ed. Altaya. 1994. Pág. 40.)
La vida, (biológica) se distingue de todos los demás estados del ser, por la relación única que mantiene con sus determinaciones y con el mundo como un todo. En virtud de sus particularidades y de su forma limitada y determinada: - Todo objeto inanimado, es diferente u opuesto al género; lo particular contradice a lo universal, de modo que el género, no se cumple en el objeto inanimado. - Lo viviente, empero, es diferente de lo no viviente, en este sentido; ya que la vida, designa un ser cuyos estados y partes diferentes, se hallan integrados en una unidad completa, la unidad del sujeto. - En la vida, lo particular, es el tiempo, una rama del árbol infinito de la vida. Cada parte, fuera del todo, es al mismo tiempo el todo, es la vida, Todo individuo viviente, es también una manifestación del todo de la vida. - En otras palabras, posee la esencia o potencialidades plenas de la vida. - Aún más, aunque todo ser viviente, está determinado y limitado, es capaz de invalidar sus limitaciones en virtud del poder que posee como sujeto viviente. La vida, es en primer lugar, una serie de determinadas condiciones objetivas; ya que el sujeto viviente, las encuentra fuera de él, limitando su libre autorrealización. - No obstante, el proceso de la vida consiste en atraer continuamente estas condiciones extremas hacia la resistente unidad del sujeto. El ser viviente, se mantiene a sí mismo como tal, dominando y anexando, la multitud de condiciones determinadas que encuentra; y creando una armonía entre sí mismo y todo lo que se opone a sí mismo. Por consiguiente, la unidad de la vida, no es una unidad inmediata y natural, sino el resultado de una superación activa y constante de todo lo que se enfrenta a ella. -
Hegel. Adoptó el punto de vista de que la filosofía, surge de las contradicciones omni-comprensivas en que se encuentra sumida la existencia humana. Este origen, ha configurado la historia de la filosofía, como historia de las contradicciones básicas; contradicciones, entre: - “Espíritu y materia; alma y cuerpo; creencia y entendimiento; libertad y necesidad”; “Inteligencia y naturaleza; y, en la forma más general de subjetividad y objetividad”. – Pues, como ya lo dijimos, la lucha contra el sentido común, es el comienzo del pensamiento especulativo, y la pérdida de la seguridad cotidiana, es el origen de la filosofía. - En Kant, declara Hegel: La razón está limitada a un dominio interno del espíritu, y no tiene ningún poder, sobre “las cosas en sí”. - En otras palabras, no es realmente la razón, sino el entendimiento, lo que domina la filosofía kantiana. El modelo dialéctico representa y por lo tanto es la “verdad” de un mundo permeado por la negatividad; un mundo, en el que todo es algo distinto de lo que “realmente” es; y en el que la oposición y la contradicción, constituyen las leyes del progreso. Hegel, afirma, además, que una forma social dominante, puede ser atacada con éxito, por el pensamiento; sólo si esta forma ha entrado en franca contradicción con su propia “verdad”, en otras palabras: - Si ya no puede satisfacer las demandas de sus propios contenidos. - Hegel, cree que el antiguo orden debe ser reemplazado por la “verdadera comunidad” o sea, una sociedad en la que todos los intereses particulares e individuales, están integrados en el todo; de modo que el organismo social real que resulta de ello, concuerde con el interés común (comunidad) y luego, una totalidad en la cual todos los conceptos aislados del conocimiento, estén fundidos e integrados de manera tal que reciben su significado a través de su relación con el todo (universalidad.) Así, como la concepción de la desintegración, en la esfera del conocimiento, exprese la desintegración de las relaciones humanas, existentes en la sociedad y la integración política y social. La universalidad de la razón, representada por el absoluto; es la contrapartida filosófica de la comunidad social; en la que todos los intereses particulares están unificados en el todo. Pero esta universalidad es sólo una ficción legal abstracta; en realidad, la propiedad privada continúa siendo “algo aislada” que no tiene relación con el todo. La única unidad que pueden alcanzar los propietarios, es la unidad artificial de un sistema legal universalmente aplicado. Empero, las leyes sólo estabilizan y codifican las condiciones anárquicas existentes de la propiedad privada y así transforman al Estado o, a la comunidad, en una institución que existe en pro de intereses particulares. – La posesión existe con anterioridad a la Ley; y no se origina en la Ley. Lo que ya había sido objeto de apropiación privada, es convertido en un derecho legal. El derecho constitucional, es por tanto, en sentido estricto, derecho privado; y los derechos políticos, son formas legalizadas de posesión, derechos de propiedad. -
Un Estado, - en el que los intereses privados antagónicos predominan de tal manera en todos los campos, no puede ser considerado una verdadera comunidad. Además, la lucha por convertir al poder estatal, en propiedad privada, disuelve al Estado y acarrea la destrucción de su poder. El Estado, aunque tomado por los intereses privados, debe asumir una verdadera comunidad; con el fin de acallar luchas y defender en forma equitativa, los derechos de propiedad de todos sus miembros. De este modo, la comunidad se convierte en un poder independiente, colocado por encima de los individuos. – Todo individuo, desea vivir en la seguridad de su propiedad, garantizada por el poder estatal. El poder estatal, se le presenta como algo extraño, que existe fuera de él. -
Ahora, las formas de asociación, difieren de acuerdo con los variados grados de integración que se alcanza en ellas. - El agente integrador es: Primero la familia; luego las instituciones sociales del trabajo; la propiedad; la “Ley”; y finalmente el Estado. El modo de división del trabajo, transforma el trabajo particular del individuo, realizado con el fin de satisfacer sus necesidades personales, en trabajo general; que opera para producir bienes para el mercado. Hegel, denomina a este último trabajo: “Abstracto y cuantitativo”, y lo hace responsable de la creciente desigualdad de los hombres y de la riqueza. El cuadro general de la sociedad, es un cuadro en el que “el sistema de necesidades” es un “sistema de mutua dependencia física”. El trabajo del individuo, es incapaz de garantizar la satisfacción de sus necesidades. “Una fuerza ajena al individuo y sobre la cual éste no tiene ningún poder”, determina la satisfacción de sus necesidades. El valor del producto del trabajo es “independiente del individuo y está sujeto a cambios constantes”. La forma de gobierno es también de tipo anárquico, Lo que gobierna no es más que la inconsciente y ciega totalidad de necesidades y los modos de satisfacerla. La sociedad, tiene que dominar “su ciego e inconsciente destino”. Empero, tal dominio, resulta incompleto en tanto prevalezca la anarquía general de los intereses. La excesiva riqueza acompaña a la excesiva pobreza, y el trabajo puramente cuantitativo, empuja al hombre “a un estado de extremada barbarie”. Especialmente aquella parte de la población que “está sujeta al trabajo mecánico de las fábricas”.
Capítulo V
Nota:
El empleo tradicional, - dio un giro e hizo que el hombre, buscara salidas a la crisis mundial de la economía. Nuevos caminos se muestran en el horizonte. – (Helmut Saiger. “El futuro del trabajo, no está en la labor profesional”.)
Cambian las formas del trabajo.
El drama del desempleo es mucho más grave de lo que permiten imaginar las estadísticas sobre “desocupación”. Los expertos, pronostican que por ejemplo: En Europa, el porcentaje de los asalariados industriales, pasará del 35% actual (año 2000) a un 15% de la población activa. Aunque a primera vista, el sector de servicios, parece el indicado para compensar los empleos perdidos; el proceso de automatización y racionalización en seguros, banca, comercio y artesanías; aún está empezando; y las posibilidades que ofrece la “Red Internet”, hacen superfluos muchos puestos de trabajo. La probabilidad de que se recupere el tradicional pleno empleo, de forma sostenible, es tan intima que hace necesario estudiar la posibilidad de otros caminos. No basta mejorar la competitividad de las empresas, acelerar el avance de las ciencias y la modernización del Estado. Urge reflexionar sobre la configuración de una sociedad futura que ya no se base en el clásico trabajo remunerado. La limitación del concepto del trabajo a la actividad retribuida es algo que sólo existe desde hace unos 200 años; con la industrialización. Esto hizo que se despreciaran las labores domésticas y se excluyeran de los índices de crecimiento y bienestar. Sin embargo, por ejemplo: En Alemania, se estima que en los hogares se trabajan cerca de 10 millones de horas más que en el sector privado de la economía. El volumen de trabajo con carácter honorífico, equivale a un millón de puestos de trabajo a horario completo. A principios del Siglo pasado, el ser humano, empleaba un 35% de su vida, en el trabajo remunerado. Hoy, este porcentaje, es solo del 12% al 13%.
Insisto... el camino está: En nuevas oportunidades.
Nota:
¿En la actividad docente, estará el porvenir de este planeta, como tal? La respuesta, es que cuenta con todo (recursos humanos y materiales) lo necesario – ideales, creatividad, ciencia, tecnología, bienestar, recreación, seguridad, vida y futuro - para dar el gran giro y lograr los más grandes objetivos humanos, por ejemplo: Por medio de la necesidad; la humanidad, hará de ella, no una emboscada, ya que vencida ésta (con educación) ya no habrá enemigo que la tranque; pues es, en ella misma, en donde está el gran peligro. Es por tanto, ella (la necesidad) el motor creador de la historia; y finalmente, está, en la consecución de medios y recursos para lograr su evolución (o, transformación) final. Luego, principalmente está en nuestras manos, el, lograrlo, al dar un vuelco a la cultura y a la concepción filosófica; al cambiar la necesidad por la subsistencia, como especie. Dejando, lo individual por lo general. Ver el planeta en conjunto, por encima de los intereses particulares y estrechar nuestra relación con la naturaleza; lo cual, nos dará la motivación suficiente para lograr el triunfo que no es otro que nuestra propia transformación. (Humberto Rojas Rodríguez. “Cómo construir el mundo del Siglo XXI”. Ed. Angora. 1996. Págs. 15-24.)
¿Qué otras oportunidades de ingresos o actividad se podrían desarrollar, para complementar el tradicional trabajo remunerado? La población pasiva, percibe la falta de actividad, como un vacío, porque no consigue mantener su nivel de vida con lo que recibe. En el mundo se montan bolsas de intercambio de servicios, entre los hogares, para gastar menos, y se prestan servicios a cambio de unidades de cuenta. El propósito, es complementar la economía monetaria, con otra, basada en unidades de tiempo de intercambio; en EU., denominadas, dólares de tiempo.
En vista, de la creciente necesidad de una formación continuada, la Comisión Nacional Suiza de la “UNESCO”, exige que se reconozca la capacitación, como actividad laboral. De otro lado el economista Milton Friedman, propone la entrega de vales de educación o capacitación. En resumen, son cinco los pilares en que se podría basar la nueva sociedad de trabajo; actividad retribuida, labores domésticas, servicios de intercambio, trabajos “ad honorem” y actividades de formación. Con ellos se constituiría una cartera de trabajos o actividades opuestas a la tradicional cartera de ingresos, que nos independizaría del empleo remunerado. Si los ciudadanos, asumieran cada vez más responsabilidades, no retribuidas; el Estado, necesitaría ayudar menos y los recursos liberados, se podrían aplicar al fomento de obras de bien común, en vez de malgastarse en la administración de subsidios improductivos. ¿Qué podemos hacer, para que cada uno pueda contribuir a esta nueva y activa sociedad civil? En primer lugar. Habría que dejar de considerar el hogar, como de “economías domésticas”; que no se limitan a consumir y a disfrutar del tiempo libre, sino como un lugar social de producción de labores domésticas y de ayudas mutuas.
La etapa siguiente, mediante una visión universal.
Durante el desarrollo, que representa un verdadero “sistema de justicia”; éste, crea un equilibrio entre los antagonismos existentes; pero lo hace sólo en términos de las relaciones de la propiedad. Luego, en este caso, se administra la Ley, independientemente de las relaciones particulares. Entonces, el principio de libertad, se basa en que gobernadores y gobernados (regionales) son iguales; al suprimir los conflictos e intereses particulares, expresados en la “moralidad general”. Éste el primer proyecto de la filosofía social de Hegel; pues, anuncia ya, la concepción que subyace en todo su sistema: El orden social dado, basado, en el sistema de trabajo abstracto y cuantitativo; y en la integración de las necesidades; por medio del intercambio de bienes y servicios; pero, incapaz de establecer y mantener una comunidad (general) racional. Éste orden, así, es esencialmente un orden anárquico e irracional, gobernado por ciegos mecanismos económicos; un orden todo progreso, no es más que una unificación temporal de los opuestos. La exigencia hegeliana, de un Estado fuerte e independiente; se deriva de la penetración de las contradicciones irreconciliables de la sociedad moderna. Hegel, fue el primero en alcanzar esta penetración. Su justificación del Estado fuerte, se funda, en la idea de que éste es un complemento necesario a la estructura antagónica de la sociedad individualista.
Nuevas formas laborales y de contratación.
Nota:
Curiosamente, - la “teoría general de la relatividad;, parte del valor del conocimiento profundo e innovador de las ideas geométricas de Bernhard Rieman y de P. S. De La Place; en sus conceptos profundos, de probabilidad y estadística. -
Los aceleradores - de partículas, de comportamiento impredecible, al ser controlados, hará realidad el sueño de A. Einstein (1879-1955) en su saga nocturna, de su teoría (sinfonía incompleta del “Todo”.) -
El hombre, - debe estar preparado para la estandarización de la “cibernética inteligente”; por sus características sui-géneris, muchas veces superiores a las humanas; por su rapidez, exactitud y cobertura. Hasta llegar, casi a substituirlo; por lo que se la debe programar, para ayudar y compartir; y no para competir, pues al darle autonomía total, ésta, se desligaría de su dominio. Aquí, si que el “libre albedrío” no funciona; como no trabaja, para el reino animal y mineral, debido a. su falta del «yo» espiritual; lo que nos diferencia eternamente. -
Fuerzas como el “electro dinámica”; cambiarán la vida en forma rotunda, pues al alternar la energía propulsora, las variabilidades en la dinámica laboral se harán notorias. Los “robots”, generalizados, harán el trabajo pesado o, peligroso y hasta “sucio”. En la navegación aérea se producirán los principales grandes cambios; ya que esta se hará, combinando fuerzas eléctricas de atracción y repulsión (gravedad y magnetismo); operadas mediante una fuerza naturalmente “robotizada”; como origen o, directora; origen de los grandes cambios laborales se basará pues, en la interacción de poderosas fuerzas que producirán energía dinámica controlada por computador así:
1. Combinación de fuerzas.
2. Utilización de la electricidad, como principal foco de energía.
3. Dinámica, capaz de producir giros en diferentes ángulos, velocidades y ritmos.
4. Sistemas altamente controlados por computadora.
5. Serán fuerzas, que producirán más fuerzas; de acuerdo a la necesidad.
Capítulo VI
“Cómo lograr, que no se seque
una sola gota de agua,
arrojándola al mar”.
Se pueden satisfacer mil ilusiones,
pero solo desarrollar una... la que más soñamos.
Notas:
La Biblia; - la Geología y la Arqueología... nos cuentan la misma Historia. -
La «teoría general de la relatividad» ; - a parte de valerse de su conocimiento profundo de las innovadoras ideas geométricas de Bermhard Rieman y de Pierre Simón de Laplace: En “su primer desarrollo de los conceptos de probabilidad y estadística”; actuó como el abrebocas de la “teoría cuántica”. -
En el concepto metafísico - de lo espiritual o sea, de lo que no vemos por ser inmaterial; existen en los llamados “Seres de Luz” (tan antiguos como la materia misma) diversas potestades; o, clasificaciones, de acuerdo a su ministerio de oficio y beneficio; como seres portadores de noticias, a veces pletóricas de sabiduría otras, mensajeras éticas, de acuerdo a su relación con Dios. -
¿Enigmas?
Nota:
El valor matemático - de Pi «π» (3,1416) no fue calculado por civilización alguna, hasta que los griegos(Arquímedes) lo descubrieron por casualidad. (Siglo III a.C.) O sea, la relación con altura de la gran pirámide = 146,73 Mtrs.; y que, tuviera la misma relación con el perímetro de la base = 921,45; que es la de cualquier circunferencia con su radio. Esta relación es Pi «φ» a saber 146,729 x 2 x 3,14 = 921,45 Mtrs. -
Muy pesados (Tons.) símbolos indatables (roca viva) y anónimos nos rodean, por todo el planeta; demostrando que poderosas “civilizaciones” nos antecedieron; y que al parecer, no evolucionamos, sino que involucionamos; y que solo de ello, la memoria genética nos quedó. Por ejemplo: Las pruebas geológicas indican, según una estimación muy conservadora, que la “Esfinge” de Egipto, fue construida entre el año 7000 y el año 5000 a.C. como mínimo, según los egiptólogos; y entre 7000 y 10000 a.C.; según los geólogos; o sea, al final de la última glaciación. *Cuyos restos más evidentes, deben encontrarse sumergidos por la arena o, en el fondo del Mediterráneo, ya que éste, estaba seco, durante la última glaciación. *Nota: (¿Sería entonces, como el centro de la Pangea?)
La necrópolis de Gizeh, enclave de la Esfinge y de las tres grandes pirámides de Egipto; es, desde cualquier punto de vista, un verdadero enigma de la arquitectura y de la arqueología. (Fueron armadas “in situ”.) No son sepulcros ni templos. *Fueron, definitivamente, construcciones heredadas de épocas pasadas; renovadas y adaptadas para nuevos fines; algo parecido ocurrió en todo el planeta con edificaciones análogas. Luego su construcción inicial (armada “in situ”, con precisión de relojería; tanto por dentro como por fuera) obedece a razones puramente locativas, indicando zonas especiales; y sitios relacionados con el contexto astral que las rodea. *Nota: (Como una copia del cielo.)
Son rasgos comunes, de todas estas antiguas y anónimas construcciones; su rigurosa austeridad de estilo y el empleo de enormes megalitos: Luego, no podemos sino recordar un texto egipcio (al igual que otras culturas) que nos habla de hombres augustos, consagraos al cultivo de la sabiduría; que vivían antes del “diluvio” cuya civilización fue destruida. Construcciones ubicadas sobre las mismas paralelas, de longitud y de latitud, en diferentes puntos, pero análogas; como relacionadas entre sí. Desde luego, utilizadas en el tiempo, para diferentes fines, fuera del fin original; utilizando como símbolo, barcazas transportadoras de almas.
Igualmente. Imposible, por lo menos para unas gentes, como los antiguos egipcios, que según (mal) se supone; ellos nada sabían, acerca, de la verdadera forma y tamaño de “La Tierra”; es la relación de la escala (1:43.200); que existe entre las dimensiones de la pirámide y las del planeta. Sin entrar, en más cábalas; por él, si se trata; o, no; de una coincidencia; podemos comprobar que la altura original del monumento = 146,73 Mtrs. ; por 43.200 = 6.338.70 Klmtrs., aproximada al radio polar terrestre. Igualmente, el perímetro de la base del monumento 921,46 Mtrs. por 43.200 = 39.807,03 Klmtrs.; medida aproximada, de la circunferencia terrestre, en su ecuador. Y esta precisión (de reloj atómico) la consiguieron, los constructores de la “Gran Pirámide”; (tumba, pero del saber) hace unos 4.500 años. Al igual, que las matemáticas, en “base 60”; que nadie sabe, dónde ni cuando tuvieron su origen. Al parecer fueron utilizadas en los cálculos geodésicos y astronómicos; que se hicieron para situar la “Gran Pirámide”. (O, gran complejo astronómico, todavía inexplorado, completamente, tanto en sus entrañas, como en sus cámaras subterráneas, ubicadas a unos 27 metros, por debajo del foso principal; que son como un reloj del tiempo; de construcción antisísmica.) Porque. Además, el monumento, está ubicado a poco más de un kilómetro al sur de la latitud 30; es decir, casi exactamente, a una tercera parte, de la distancia existente, entre el “ecuador” y el “polo norte” y su base, encuadra extraña y ligeramente, con los ejes cardinales, con gran y sospechosa exactitud. (Lo mismo pasa en el planeta Marte; e igual relación, existe en las demás construcciones megalíticas – con bloques de piedra de +200 Tons; en promedio, halladas en el resto de “La Tierra”.)
El pasado.
Nota:
En el 52 d. De C. Una compilación histórica china, especulaba con ideas de que antes de haber alcanzado su presente nivel cultural, los hombres habían pasado a través de las edades de piedra, bronce y hierro; las mismas designaciones que se usan actualmente. (Tomado en paráfrasis de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991.)
La arqueología, tal como la conocemos, no comenzó sino hasta el Renacimiento: cuando nobles y cardenales, papas y otros de vida fácil, (repitiendo, aquello de que el vivo, vive del bobo) coleccionaron esculturas griegas y romanas, convirtiéndose en mecenas, patrocinadores de otras tantas excavaciones para encontrar piezas esculpidas, avivados por el descubrimiento de las ruinas de Herculano, Pompeya y otras ciudades (minas de arte) sepultadas en el tiempo por el Vesubio. Los “anticuarios” investigaron reliquias: Los escandinavos, explotaron las tumbas y los dólmenes ancestrales, encontrando una sorprendente cantidad de objetos de oro hábilmente trabajado. En Francia, algunas tumbas megalíticas de Bretaña fueron excavadas y se publicaron informes. En Inglaterra. J. Aubrey, desenterró antiguas parihuelas y estudió monumentos circulares que puntean las isla británicas; incluyendo los Stonehenge. Atribuyó éstos a los druidas de la época romana; y que hoy se sabe que son aún más primitivos. La fiebre alcanzó el “Nuevo mundo”; solo acertaron a pensar que tales túmulos indios, fueron producidos por razas desconocidas. Solo hasta el descubrimiento de la “Piedra de Roseta”, gravada en tres lenguajes antiguos diferentes; J. F. Champollion, pudo descifrar los caracteres egipcios.
El S. XIX; época de notable en arqueología. Por Ejem, el redescubrimiento de las pirámides mayas y de las ciudades de Yucatán y de Honduras (curiosamente, como las egipcias; orientadas norte a sur; con una muy breve desviación - debido a que hace 5 mil años, por a un cambio en el circuito solar en los paralelos, el Sol nace ahora un grado más al norte y sobre equidistantes paralelos, con el eje ecuatorial terrestre. - Además, las pirámides, son como pilas receptoras e impulsoras de fuerzas magnéticas que atraviesan el planeta.) También hoy, nos alejamos de los antiguos parajes con un sentido de respeto por la ilimitada creatividad de la mente humana. Los “yelmos” espaciales que se asegura, ver en los relieves mayas y las franjas para aterrizar platos voladores; no son nada de esto, ni cosa que se le parezca. Son, aunque misteriosos, monumentos hechos por el hombre y sin ninguna ayuda. Ya que la especie humana, ha estado y estará, por muy largo tiempo, en el planeta tierra. (Tomado en paráfrasis de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Págs. 15-25.)
¿Búsqueda... desde hace más de 5-6 millones de años?
Nota:
Según la Biblia, geográficamente, parece que la creación (10 mil años atrás) más no el génesis, ocurrió bajo el mar del golfo Pérsico; en la desembocadura del Tigris y el Eufrates; Sumeria (hoy Israel.) En otras palabras, cada día de la creación, tendría un millón de años.
No es fácil, conocer cómo ocurrieron los hechos. Ya que, para complicar aún más la cosa; resulta que en África (desierto de Afar, Etiopía); se descubrió que una pequeña familia, compuesta por: de tres a cinco adultos y dos niños; aparecieron acampando, en una hondonada y como tomados por sorpresa por una violenta inundación, murieron ahogados hace entre 3.8 y 3.2 millones de años.
Aunque Darwin, había adelantado que África, podía probar ser la cuna de la humanidad; el continente al sur del Sahara, no tenía parte en el drama evolucionista, maquinado por sus sucesores. En razón de que los habitantes de la región, se encontraban a varios milenios, detrás de aquellos de Europa: el Levante Medio y Oriente, en sus valores culturales, de la zona considerada como un callejón sin salida; dentro del cual el hombre ha derivado hacia alguna relativa cercana fecha prehistórica. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Págs. 25-31.)
Con estas y otras sorprendentes revelaciones, la tradicional teoría de la evolución se derrumbó. Ya que hoy está claro que el hombre como tal, ha estado sobre la Tierra por lo menos de tres a cuatro veces más de lo calculado (en millones de años); que África fue probablemente la cuna de la humanidad y que en lugar de una sola casta, tres o más especies, han coexistido en el mismo sitio y tiempo. Que el número de cromosomas, de la especie humana, nunca encuadrará, con el de las otras especies. De esto dan cuanta, sendas huellas halladas en osamentas descubiertas y clasificadas, sin dejar una sola duda, de quien o quienes las originaron. Que una cosa es la evolución animal símica y muy otra, la existencia del hombre y su especie, con la cual se la ha querido emparentar. Que el paso por Bering, en por el Polo Norte, fue realizado muchas veces, desde hace más de 10 millones de años. Para finalmente establecer, una antigüedad soberbia, a las huellas humanas halladas en América.
¿Lo Ínter-dimensional? ; ¿Ciencia-ficción?
Notas:
A ciertas profundidades, se ha encontrado artefactos que no debían estar allí, pero que están.
Los creacionistas y evolucionistas modernos, se plantean la duda de qué fue: Si, una evolución; o, una involución.
Nadie, puede predecir cuán lejos atrás en el tiempo, pueden ser rastreados los hombres y sus civilizaciones; pues, las fechas están retrocediendo, aún más lejos, desde que el Arzobispo Irlandés Ussher, usando genealogías del “Génesis” como su fuente; calculó que el “mundo” (seguramente que el Judeo-cristiano) fue creado en el año 4004 A.C. el 24 de Octubre a las 9 a.m.
En resumen, la historia bíblica del Edén; es la historia de la vida y de la muerte, como símbolo de soberana vivencia del pasado; que fundamentalmente, busca unir, lo netamente humano, con lo divino; en un resumen llamado Génesis; donde Adán, nació dos veces: La primera como ser divino y la segunda como ser humano.
Se dice, recientemente, que fuera de la gigantesca Galaxia Andrómeda, el resto del Universo se está alejando. Además que Andrómeda se halla (peligrosamente) en proceso de unificarse con nuestra Galaxia La Vía Láctea.
El arqueólogo J. Adovasio, comenzó sus trabajos de excavación, en terrenos lodosos de Meadowcrof Rockshelter; en un borde ancho voladizo de roca en el valle de un riachuelo en el sudoeste de Pensilvania. Descortezando los sucesivos estratos de tierra, como en las páginas de un libro, los excavadores encontraron casquillos de botellas, papeles de caramelo y otros desechos dejados por asistentes a fiestas campestres; luego, botones del S. XIX; balas de plomo; agujas herrumbradas y trozos de lentes de aumento. Y (sorprendente) una calavera perfecta de cristal finísimo, usada por los aborígenes, como elemento productor de fuego. Finalmente, elementos como relojes, con los cuales pretendían copiar la maquinaria celeste.
Basados en análisis de diversos tipos de sangre; en diferencias en las dentaduras y en la similitud de ciertas palabras en los dialectos indígenas; los antropólogos suponen que los inmigrantes llegaron en tres contingentes separados: El primer grupo, que provino de Siberia, llamado los Paleo-indios; fue sindicado como el de los ancestros de la gran mayoría de los pobladores de América del Norte y del Sur. Los siguientes en llegar, fueron los Nadene, ancestros de las tribus actuales de la costa noroeste; los Athabaskas, del oeste de Canadá y los Navajos y Apaches del sudoeste de E.U. Puede que hayan sido los últimos en atravesar el puente de hielo (Bering); antes que éste se inundara hace 11 mil años. La última oleada consistió en esquimales y Aleutianos; quienes se presume llegaron en Kayac o, atravesando el hielo en invierno; entre 9 mil y 4 mil años atrás. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 67.)
Aunque, concediendo. - Que pudieran haber sucedido algunos contactos transpacíficos, lo que explicaría algunas de estas similitudes; los historiadores, no obstante, creen que tales encuentros eran esporádicos e involucraban a un pequeño número de personas; dado que han tenido tan poca influencia en la cultura americana. La civilización, desarrollada por los indios de América media y Perú, era, en varios aspectos, superior a aquella de sus conquistadores europeos. Sabían más acerca de algunos aspectos de la astronomía y tenían un calendario más preciso; fueron los primeros en usar el sistema decimal y el concepto del cero aritmético; algunas de sus ciudades eran más ricas (mejor dotadas) y una de ellas más grande que ninguna otra en Europa. Eran agricultores refinados, quienes realizaban cultivos (que, en la actualidad, satisfacen la demanda alimenticia de más de la mitad del planeta y abastece a sus industrias.) Pero los “nativos” americanos, cometieron un error fatal que los condujo a su decadencia: olvidaron inventar la pólvora y los carros de guerra. (Les faltó, creo, en su escala y tiempo, un Leonardo Da Vinci.1452-1519.) (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 73.)
Resumiendo. Algunas de las tumbas megalíticas, sus pinturas, esculturas y demás reliquias pétreas y aún metálicas halladas (en Stonehenge.) Sus conocimientos astrológicos, además, señalan que los antiguos “astrónomos” debieron practicar matemáticas de alto nivel; ya que el éxito de los círculos y ángulos de visión tan perfectos, requiere el uso de teoremas geométricos, cuyo descubrimiento se atribuye (erróneamente) a los griegos, 15 y más siglos después. Luego, son más antiguos que las “Pirámides de Egipto”, en por lo menos cientos de miles de años; y aún que la famosa “Torre de Babel” (de ladrillo cosido) de 892 Mtrs. Cuentan también, que emplearon un sistema de numeración que dividía la hora en 60 minutos y el círculo del cielo en 360 grados. Siendo además, capaces de calcular los cursos y las verdaderas extensiones de los años solares y lunares, con una aproximación de minutos, con errores de 10 segundos. También tuvieron éxito con los circuitos y con la duración de las revoluciones de cada uno de los planetas visibles; desde los 40 meses del largo cielo de Mercurio hasta los 29 años del círculo de Saturno. (Este logro es muy destacable, para gente que usaba instrumentos “primitivos”.) Para terminar, nuestro actual sistema de medir el tiempo, es una mezcolanza heredada desde varias fuentes. Obtuvimos nuestras horas de 60 minutos, de los babilonios; nuestros días de 24 horas de los egipcios; y la semana de siete días, de los hebreos (aunque sus nombres sean paganos.) Nuestros meses vienen de los griegos antiguos, vía los romanos. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 136.)
No existe monumento sobre la tierra que haya inspirado tan grande temor y reverente admiración, una curiosidad tan cercana a la codicia, o una especulación más salvaje que las “Pirámides de Gizeh”, en Egipto. La llamada “Gran Pirámide de Khufu” (Keops); siendo la estructura sólida jamás levantada. Sus 2.300.000 de bloques de piedra; con un peso, que va desde las 2.5 a las 5 Tons. / Bloque, de piedra. Se encumbra hasta un pico de 137.18 Mtrs., de altura. Cuando se completó, fue cubierta con piedra caliza blanca que “brillaba como un espejo”. Aún en su aparente estado de desnudez, la pirámide encierra excelencias arquitectónicas que raramente han sido igualadas y en algunos casos superadas. Son tan exactos, el corte y las juntas de las piedras, que difícilmente puede insertarse una hoja de papel, entre los pocos bloques remanentes de su superficie. Este logro, ha llevado a algunos investigadores a sugerir, con toda seriedad, que la construcción de la pirámide, sólo pudo concretarse con la ayuda de calculadoras; quizá por mentes privilegiadas, que usaron láser para cortar las piedras y dispositivos antigravedad para elevarlas. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 147.)
También en Centroamérica.
Teotihuacan, 40 Klmtrs., al noroeste de la ciudad de México; es el sitio de una batalla que cambió el curso de la historia. Fue allí que Hernán Cortés y una pocas docenas de españoles, derrotaron a 50.000 guerreros Aztecas en el año 1520. Por aquel tiempo, el sitio era descrito como “un atractivo valle situado entre altas colinas”; los que los invasores españoles no sabían, y los Aztecas, sólo sospechaban a medias, era que las colinas fueron hechas por el hombre. Dos magníficas pirámides de piedra que habían sido abandonadas más de 4 mil años antes, y que estaban ocultas bajo la tierra, arbustos y árboles. La más grande, la pirámide del Sol; es de tres a cuatro veces y media de la gran “Pirámide de Gizeh” en Egipto. La otra, la “Pirámide de la Luna”; es cerca de un tercio más pequeña.
Excavando a través de la tierra y las piedras que llenaban el valle alrededor de ellas, en los comienzos del S. XX.; los exploradores descubrieron una increíble ciudad olvidad, un laberinto con disposición geométrica de grandes patios; templos; carreteras; viviendas y sitios extendidos por más de 33.5 Klmtrs.²; más grande en superficie que la “Roma Imperial”: y casi... tan populosa. Luego investigando en el costado de la pirámide más pequeña de Quetzalcoalt en 1919; el arqueólogo mexicano Manuel Gamio, descubrió otra pirámide, aún más elaborada, que se encontraba intacta debajo de la grande espesura. Ornamentada desde el tope a la base con soberbias esculturas de cabezas de serpientes emplumadas y dioses de la lluvia, conformando una de las atracciones del arte precolombino. Igual que su construcción como su abandono; no se sabe de ello nada.
Para levantar estos gigantescos edificios. - Se ha requerido un enorme trabajo y una fe monumental; especialmente para los mesoamericanos que no empleaban la rueda, excepto en juguetes y no tenían animales de carga, poleas ni herramientas de metal de ninguna clase. Los bloques de piedra caliza, pesando hasta 45 toneladas, tenían que ser extraídos de las canteras con escoplos de piedra más dura, la tierra suavizada con arena y obsidiana, arrastrada muchos kilómetros, hasta lugares de construcción por ejércitos de hombres; luego izarlas a través de rampas de piedra, con ayuda de sogas de fibra. Los arqueólogos estiman que todo ello llevó dos siglos, en especial el caso de Teotihuacan y mil años levantar la pirámide de Tikal en Guatemala, hasta su máxima altura. Finalmente la pirámide de Cholula, cerca de México, está reputada por ser el edificio más sólido de la Tierra, levantado por el hombre. El parecido de los astrónomos participantes y los símbolos de las ciudades de las cuales provenían, puede verse sobra las paredes. La habitabilidad de estos tempranos observadores, asombra a los modernos astrónomos. Precedían el tiempo exacto para los eclipses de Sol y de la Luna; calculaban que el año solar tenía 365,2420 días; con un error de sólo 17 segundos y estimaban la revolución de Venus, con una diferencia de sólo 7 segundos, en 50 años; cifras que no han sido mejoradas, sino en fechas relativamente recientes. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 197.)
Capítulo VII
Nota:
La tarea del filósofo, es pedir razones o, mientras pueda legítimamente, exigirlas; y tomar nota de las posiciones que dan las última razones que se pueden alcanzar. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell en sus “Ensayos Filosóficos” Ed. Altaya 1993. Pág. 10.)
El hombre, - debe estar preparado para la estandarización de la “cibernética inteligente”; por sus características sui-géneris, muchas veces superiores a las humanas; por su rapidez, exactitud y cobertura. Hasta llegar, casi a substituirlo; por lo que se la debe programar, para ayudar y compartir; y no para competir, pues al darle autonomía total, ésta, se desligaría de su dominio. Aquí, si que el “libre albedrío” no funciona; como no trabaja, para el reino animal y mineral, debido a. su falta del «yo» espiritual; lo que nos diferencia eternamente. -
Fuerzas como el “electro dinámica”; cambiarán la vida en forma rotunda, pues al alternar la energía propulsora, las variabilidades en la dinámica laboral se harán notorias. Los “robots”, generalizados, harán el trabajo pesado o, peligroso y hasta “sucio”. En la navegación aérea se producirán los principales grandes cambios; ya que esta se hará, combinando fuerzas eléctricas de atracción y repulsión (gravedad y magnetismo); operadas mediante una fuerza naturalmente “robotizada”; como origen o, directora; origen de los grandes cambios laborales se basará pues, en la interacción de poderosas fuerzas que producirán energía dinámica controlada por computador así:
1. Combinación de fuerzas.
2. Utilización de la electricidad, como principal foco de energía.
3. Dinámica, capaz de producir giros en diferentes ángulos, velocidades y ritmos.
4. Sistemas altamente controlados por computadora.
5. Serán fuerzas, que producirán más fuerzas; de acuerdo a la necesidad.
Capítulo VI
“Cómo lograr, que no se seque
una sola gota de agua,
arrojándola al mar”.
Se pueden satisfacer mil ilusiones,
pero solo desarrollar una... la que más soñamos.
Notas:
La Biblia; - la Geología y la Arqueología... nos cuentan la misma Historia. -
La «teoría general de la relatividad» ; - a parte de valerse de su conocimiento profundo de las innovadoras ideas geométricas de Bermhard Rieman y de Pierre Simón de Laplace: En “su primer desarrollo de los conceptos de probabilidad y estadística”; actuó como el abrebocas de la “teoría cuántica”. -
En el concepto metafísico - de lo espiritual o sea, de lo que no vemos por ser inmaterial; existen en los llamados “Seres de Luz” (tan antiguos como la materia misma) diversas potestades; o, clasificaciones, de acuerdo a su ministerio de oficio y beneficio; como seres portadores de noticias, a veces pletóricas de sabiduría otras, mensajeras éticas, de acuerdo a su relación con Dios. -
¿Enigmas?
Nota:
El valor matemático - de Pi «π» (3,1416) no fue calculado por civilización alguna, hasta que los griegos(Arquímedes) lo descubrieron por casualidad. (Siglo III a.C.) O sea, la relación con altura de la gran pirámide = 146,73 Mtrs.; y que, tuviera la misma relación con el perímetro de la base = 921,45; que es la de cualquier circunferencia con su radio. Esta relación es Pi «φ» a saber 146,729 x 2 x 3,14 = 921,45 Mtrs. -
Muy pesados (Tons.) símbolos indatables (roca viva) y anónimos nos rodean, por todo el planeta; demostrando que poderosas “civilizaciones” nos antecedieron; y que al parecer, no evolucionamos, sino que involucionamos; y que solo de ello, la memoria genética nos quedó. Por ejemplo: Las pruebas geológicas indican, según una estimación muy conservadora, que la “Esfinge” de Egipto, fue construida entre el año 7000 y el año 5000 a.C. como mínimo, según los egiptólogos; y entre 7000 y 10000 a.C.; según los geólogos; o sea, al final de la última glaciación. *Cuyos restos más evidentes, deben encontrarse sumergidos por la arena o, en el fondo del Mediterráneo, ya que éste, estaba seco, durante la última glaciación. *Nota: (¿Sería entonces, como el centro de la Pangea?)
La necrópolis de Gizeh, enclave de la Esfinge y de las tres grandes pirámides de Egipto; es, desde cualquier punto de vista, un verdadero enigma de la arquitectura y de la arqueología. (Fueron armadas “in situ”.) No son sepulcros ni templos. *Fueron, definitivamente, construcciones heredadas de épocas pasadas; renovadas y adaptadas para nuevos fines; algo parecido ocurrió en todo el planeta con edificaciones análogas. Luego su construcción inicial (armada “in situ”, con precisión de relojería; tanto por dentro como por fuera) obedece a razones puramente locativas, indicando zonas especiales; y sitios relacionados con el contexto astral que las rodea. *Nota: (Como una copia del cielo.)
Son rasgos comunes, de todas estas antiguas y anónimas construcciones; su rigurosa austeridad de estilo y el empleo de enormes megalitos: Luego, no podemos sino recordar un texto egipcio (al igual que otras culturas) que nos habla de hombres augustos, consagraos al cultivo de la sabiduría; que vivían antes del “diluvio” cuya civilización fue destruida. Construcciones ubicadas sobre las mismas paralelas, de longitud y de latitud, en diferentes puntos, pero análogas; como relacionadas entre sí. Desde luego, utilizadas en el tiempo, para diferentes fines, fuera del fin original; utilizando como símbolo, barcazas transportadoras de almas.
Igualmente. Imposible, por lo menos para unas gentes, como los antiguos egipcios, que según (mal) se supone; ellos nada sabían, acerca, de la verdadera forma y tamaño de “La Tierra”; es la relación de la escala (1:43.200); que existe entre las dimensiones de la pirámide y las del planeta. Sin entrar, en más cábalas; por él, si se trata; o, no; de una coincidencia; podemos comprobar que la altura original del monumento = 146,73 Mtrs. ; por 43.200 = 6.338.70 Klmtrs., aproximada al radio polar terrestre. Igualmente, el perímetro de la base del monumento 921,46 Mtrs. por 43.200 = 39.807,03 Klmtrs.; medida aproximada, de la circunferencia terrestre, en su ecuador. Y esta precisión (de reloj atómico) la consiguieron, los constructores de la “Gran Pirámide”; (tumba, pero del saber) hace unos 4.500 años. Al igual, que las matemáticas, en “base 60”; que nadie sabe, dónde ni cuando tuvieron su origen. Al parecer fueron utilizadas en los cálculos geodésicos y astronómicos; que se hicieron para situar la “Gran Pirámide”. (O, gran complejo astronómico, todavía inexplorado, completamente, tanto en sus entrañas, como en sus cámaras subterráneas, ubicadas a unos 27 metros, por debajo del foso principal; que son como un reloj del tiempo; de construcción antisísmica.) Porque. Además, el monumento, está ubicado a poco más de un kilómetro al sur de la latitud 30; es decir, casi exactamente, a una tercera parte, de la distancia existente, entre el “ecuador” y el “polo norte” y su base, encuadra extraña y ligeramente, con los ejes cardinales, con gran y sospechosa exactitud. (Lo mismo pasa en el planeta Marte; e igual relación, existe en las demás construcciones megalíticas – con bloques de piedra de +200 Tons; en promedio, halladas en el resto de “La Tierra”.)
El pasado.
Nota:
En el 52 d. De C. Una compilación histórica china, especulaba con ideas de que antes de haber alcanzado su presente nivel cultural, los hombres habían pasado a través de las edades de piedra, bronce y hierro; las mismas designaciones que se usan actualmente. (Tomado en paráfrasis de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991.)
La arqueología, tal como la conocemos, no comenzó sino hasta el Renacimiento: cuando nobles y cardenales, papas y otros de vida fácil, (repitiendo, aquello de que el vivo, vive del bobo) coleccionaron esculturas griegas y romanas, convirtiéndose en mecenas, patrocinadores de otras tantas excavaciones para encontrar piezas esculpidas, avivados por el descubrimiento de las ruinas de Herculano, Pompeya y otras ciudades (minas de arte) sepultadas en el tiempo por el Vesubio. Los “anticuarios” investigaron reliquias: Los escandinavos, explotaron las tumbas y los dólmenes ancestrales, encontrando una sorprendente cantidad de objetos de oro hábilmente trabajado. En Francia, algunas tumbas megalíticas de Bretaña fueron excavadas y se publicaron informes. En Inglaterra. J. Aubrey, desenterró antiguas parihuelas y estudió monumentos circulares que puntean las isla británicas; incluyendo los Stonehenge. Atribuyó éstos a los druidas de la época romana; y que hoy se sabe que son aún más primitivos. La fiebre alcanzó el “Nuevo mundo”; solo acertaron a pensar que tales túmulos indios, fueron producidos por razas desconocidas. Solo hasta el descubrimiento de la “Piedra de Roseta”, gravada en tres lenguajes antiguos diferentes; J. F. Champollion, pudo descifrar los caracteres egipcios.
El S. XIX; época de notable en arqueología. Por Ejem, el redescubrimiento de las pirámides mayas y de las ciudades de Yucatán y de Honduras (curiosamente, como las egipcias; orientadas norte a sur; con una muy breve desviación - debido a que hace 5 mil años, por a un cambio en el circuito solar en los paralelos, el Sol nace ahora un grado más al norte y sobre equidistantes paralelos, con el eje ecuatorial terrestre. - Además, las pirámides, son como pilas receptoras e impulsoras de fuerzas magnéticas que atraviesan el planeta.) También hoy, nos alejamos de los antiguos parajes con un sentido de respeto por la ilimitada creatividad de la mente humana. Los “yelmos” espaciales que se asegura, ver en los relieves mayas y las franjas para aterrizar platos voladores; no son nada de esto, ni cosa que se le parezca. Son, aunque misteriosos, monumentos hechos por el hombre y sin ninguna ayuda. Ya que la especie humana, ha estado y estará, por muy largo tiempo, en el planeta tierra. (Tomado en paráfrasis de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Págs. 15-25.)
¿Búsqueda... desde hace más de 5-6 millones de años?
Nota:
Según la Biblia, geográficamente, parece que la creación (10 mil años atrás) más no el génesis, ocurrió bajo el mar del golfo Pérsico; en la desembocadura del Tigris y el Eufrates; Sumeria (hoy Israel.) En otras palabras, cada día de la creación, tendría un millón de años.
No es fácil, conocer cómo ocurrieron los hechos. Ya que, para complicar aún más la cosa; resulta que en África (desierto de Afar, Etiopía); se descubrió que una pequeña familia, compuesta por: de tres a cinco adultos y dos niños; aparecieron acampando, en una hondonada y como tomados por sorpresa por una violenta inundación, murieron ahogados hace entre 3.8 y 3.2 millones de años.
Aunque Darwin, había adelantado que África, podía probar ser la cuna de la humanidad; el continente al sur del Sahara, no tenía parte en el drama evolucionista, maquinado por sus sucesores. En razón de que los habitantes de la región, se encontraban a varios milenios, detrás de aquellos de Europa: el Levante Medio y Oriente, en sus valores culturales, de la zona considerada como un callejón sin salida; dentro del cual el hombre ha derivado hacia alguna relativa cercana fecha prehistórica. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Págs. 25-31.)
Con estas y otras sorprendentes revelaciones, la tradicional teoría de la evolución se derrumbó. Ya que hoy está claro que el hombre como tal, ha estado sobre la Tierra por lo menos de tres a cuatro veces más de lo calculado (en millones de años); que África fue probablemente la cuna de la humanidad y que en lugar de una sola casta, tres o más especies, han coexistido en el mismo sitio y tiempo. Que el número de cromosomas, de la especie humana, nunca encuadrará, con el de las otras especies. De esto dan cuanta, sendas huellas halladas en osamentas descubiertas y clasificadas, sin dejar una sola duda, de quien o quienes las originaron. Que una cosa es la evolución animal símica y muy otra, la existencia del hombre y su especie, con la cual se la ha querido emparentar. Que el paso por Bering, en por el Polo Norte, fue realizado muchas veces, desde hace más de 10 millones de años. Para finalmente establecer, una antigüedad soberbia, a las huellas humanas halladas en América.
¿Lo Ínter-dimensional? ; ¿Ciencia-ficción?
Notas:
A ciertas profundidades, se ha encontrado artefactos que no debían estar allí, pero que están.
Los creacionistas y evolucionistas modernos, se plantean la duda de qué fue: Si, una evolución; o, una involución.
Nadie, puede predecir cuán lejos atrás en el tiempo, pueden ser rastreados los hombres y sus civilizaciones; pues, las fechas están retrocediendo, aún más lejos, desde que el Arzobispo Irlandés Ussher, usando genealogías del “Génesis” como su fuente; calculó que el “mundo” (seguramente que el Judeo-cristiano) fue creado en el año 4004 A.C. el 24 de Octubre a las 9 a.m.
En resumen, la historia bíblica del Edén; es la historia de la vida y de la muerte, como símbolo de soberana vivencia del pasado; que fundamentalmente, busca unir, lo netamente humano, con lo divino; en un resumen llamado Génesis; donde Adán, nació dos veces: La primera como ser divino y la segunda como ser humano.
Se dice, recientemente, que fuera de la gigantesca Galaxia Andrómeda, el resto del Universo se está alejando. Además que Andrómeda se halla (peligrosamente) en proceso de unificarse con nuestra Galaxia La Vía Láctea.
El arqueólogo J. Adovasio, comenzó sus trabajos de excavación, en terrenos lodosos de Meadowcrof Rockshelter; en un borde ancho voladizo de roca en el valle de un riachuelo en el sudoeste de Pensilvania. Descortezando los sucesivos estratos de tierra, como en las páginas de un libro, los excavadores encontraron casquillos de botellas, papeles de caramelo y otros desechos dejados por asistentes a fiestas campestres; luego, botones del S. XIX; balas de plomo; agujas herrumbradas y trozos de lentes de aumento. Y (sorprendente) una calavera perfecta de cristal finísimo, usada por los aborígenes, como elemento productor de fuego. Finalmente, elementos como relojes, con los cuales pretendían copiar la maquinaria celeste.
Basados en análisis de diversos tipos de sangre; en diferencias en las dentaduras y en la similitud de ciertas palabras en los dialectos indígenas; los antropólogos suponen que los inmigrantes llegaron en tres contingentes separados: El primer grupo, que provino de Siberia, llamado los Paleo-indios; fue sindicado como el de los ancestros de la gran mayoría de los pobladores de América del Norte y del Sur. Los siguientes en llegar, fueron los Nadene, ancestros de las tribus actuales de la costa noroeste; los Athabaskas, del oeste de Canadá y los Navajos y Apaches del sudoeste de E.U. Puede que hayan sido los últimos en atravesar el puente de hielo (Bering); antes que éste se inundara hace 11 mil años. La última oleada consistió en esquimales y Aleutianos; quienes se presume llegaron en Kayac o, atravesando el hielo en invierno; entre 9 mil y 4 mil años atrás. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 67.)
Aunque, concediendo. - Que pudieran haber sucedido algunos contactos transpacíficos, lo que explicaría algunas de estas similitudes; los historiadores, no obstante, creen que tales encuentros eran esporádicos e involucraban a un pequeño número de personas; dado que han tenido tan poca influencia en la cultura americana. La civilización, desarrollada por los indios de América media y Perú, era, en varios aspectos, superior a aquella de sus conquistadores europeos. Sabían más acerca de algunos aspectos de la astronomía y tenían un calendario más preciso; fueron los primeros en usar el sistema decimal y el concepto del cero aritmético; algunas de sus ciudades eran más ricas (mejor dotadas) y una de ellas más grande que ninguna otra en Europa. Eran agricultores refinados, quienes realizaban cultivos (que, en la actualidad, satisfacen la demanda alimenticia de más de la mitad del planeta y abastece a sus industrias.) Pero los “nativos” americanos, cometieron un error fatal que los condujo a su decadencia: olvidaron inventar la pólvora y los carros de guerra. (Les faltó, creo, en su escala y tiempo, un Leonardo Da Vinci.1452-1519.) (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 73.)
Resumiendo. Algunas de las tumbas megalíticas, sus pinturas, esculturas y demás reliquias pétreas y aún metálicas halladas (en Stonehenge.) Sus conocimientos astrológicos, además, señalan que los antiguos “astrónomos” debieron practicar matemáticas de alto nivel; ya que el éxito de los círculos y ángulos de visión tan perfectos, requiere el uso de teoremas geométricos, cuyo descubrimiento se atribuye (erróneamente) a los griegos, 15 y más siglos después. Luego, son más antiguos que las “Pirámides de Egipto”, en por lo menos cientos de miles de años; y aún que la famosa “Torre de Babel” (de ladrillo cosido) de 892 Mtrs. Cuentan también, que emplearon un sistema de numeración que dividía la hora en 60 minutos y el círculo del cielo en 360 grados. Siendo además, capaces de calcular los cursos y las verdaderas extensiones de los años solares y lunares, con una aproximación de minutos, con errores de 10 segundos. También tuvieron éxito con los circuitos y con la duración de las revoluciones de cada uno de los planetas visibles; desde los 40 meses del largo cielo de Mercurio hasta los 29 años del círculo de Saturno. (Este logro es muy destacable, para gente que usaba instrumentos “primitivos”.) Para terminar, nuestro actual sistema de medir el tiempo, es una mezcolanza heredada desde varias fuentes. Obtuvimos nuestras horas de 60 minutos, de los babilonios; nuestros días de 24 horas de los egipcios; y la semana de siete días, de los hebreos (aunque sus nombres sean paganos.) Nuestros meses vienen de los griegos antiguos, vía los romanos. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 136.)
No existe monumento sobre la tierra que haya inspirado tan grande temor y reverente admiración, una curiosidad tan cercana a la codicia, o una especulación más salvaje que las “Pirámides de Gizeh”, en Egipto. La llamada “Gran Pirámide de Khufu” (Keops); siendo la estructura sólida jamás levantada. Sus 2.300.000 de bloques de piedra; con un peso, que va desde las 2.5 a las 5 Tons. / Bloque, de piedra. Se encumbra hasta un pico de 137.18 Mtrs., de altura. Cuando se completó, fue cubierta con piedra caliza blanca que “brillaba como un espejo”. Aún en su aparente estado de desnudez, la pirámide encierra excelencias arquitectónicas que raramente han sido igualadas y en algunos casos superadas. Son tan exactos, el corte y las juntas de las piedras, que difícilmente puede insertarse una hoja de papel, entre los pocos bloques remanentes de su superficie. Este logro, ha llevado a algunos investigadores a sugerir, con toda seriedad, que la construcción de la pirámide, sólo pudo concretarse con la ayuda de calculadoras; quizá por mentes privilegiadas, que usaron láser para cortar las piedras y dispositivos antigravedad para elevarlas. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 147.)
También en Centroamérica.
Teotihuacan, 40 Klmtrs., al noroeste de la ciudad de México; es el sitio de una batalla que cambió el curso de la historia. Fue allí que Hernán Cortés y una pocas docenas de españoles, derrotaron a 50.000 guerreros Aztecas en el año 1520. Por aquel tiempo, el sitio era descrito como “un atractivo valle situado entre altas colinas”; los que los invasores españoles no sabían, y los Aztecas, sólo sospechaban a medias, era que las colinas fueron hechas por el hombre. Dos magníficas pirámides de piedra que habían sido abandonadas más de 4 mil años antes, y que estaban ocultas bajo la tierra, arbustos y árboles. La más grande, la pirámide del Sol; es de tres a cuatro veces y media de la gran “Pirámide de Gizeh” en Egipto. La otra, la “Pirámide de la Luna”; es cerca de un tercio más pequeña.
Excavando a través de la tierra y las piedras que llenaban el valle alrededor de ellas, en los comienzos del S. XX.; los exploradores descubrieron una increíble ciudad olvidad, un laberinto con disposición geométrica de grandes patios; templos; carreteras; viviendas y sitios extendidos por más de 33.5 Klmtrs.²; más grande en superficie que la “Roma Imperial”: y casi... tan populosa. Luego investigando en el costado de la pirámide más pequeña de Quetzalcoalt en 1919; el arqueólogo mexicano Manuel Gamio, descubrió otra pirámide, aún más elaborada, que se encontraba intacta debajo de la grande espesura. Ornamentada desde el tope a la base con soberbias esculturas de cabezas de serpientes emplumadas y dioses de la lluvia, conformando una de las atracciones del arte precolombino. Igual que su construcción como su abandono; no se sabe de ello nada.
Para levantar estos gigantescos edificios. - Se ha requerido un enorme trabajo y una fe monumental; especialmente para los mesoamericanos que no empleaban la rueda, excepto en juguetes y no tenían animales de carga, poleas ni herramientas de metal de ninguna clase. Los bloques de piedra caliza, pesando hasta 45 toneladas, tenían que ser extraídos de las canteras con escoplos de piedra más dura, la tierra suavizada con arena y obsidiana, arrastrada muchos kilómetros, hasta lugares de construcción por ejércitos de hombres; luego izarlas a través de rampas de piedra, con ayuda de sogas de fibra. Los arqueólogos estiman que todo ello llevó dos siglos, en especial el caso de Teotihuacan y mil años levantar la pirámide de Tikal en Guatemala, hasta su máxima altura. Finalmente la pirámide de Cholula, cerca de México, está reputada por ser el edificio más sólido de la Tierra, levantado por el hombre. El parecido de los astrónomos participantes y los símbolos de las ciudades de las cuales provenían, puede verse sobra las paredes. La habitabilidad de estos tempranos observadores, asombra a los modernos astrónomos. Precedían el tiempo exacto para los eclipses de Sol y de la Luna; calculaban que el año solar tenía 365,2420 días; con un error de sólo 17 segundos y estimaban la revolución de Venus, con una diferencia de sólo 7 segundos, en 50 años; cifras que no han sido mejoradas, sino en fechas relativamente recientes. (Tomado en paráfrasis, de “Secretos Lejanos”, de Ronald Schiller Ed. Vergara 1991. Pág. 197.)
Capítulo VII
Nota:
La tarea del filósofo, es pedir razones o, mientras pueda legítimamente, exigirlas; y tomar nota de las posiciones que dan las última razones que se pueden alcanzar. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell en sus “Ensayos Filosóficos” Ed. Altaya 1993. Pág. 10.)
En el estudio de la ética, es escencial comprender que hay un sentido impersonal. Y en este sentido, si algo es bueno, debe existir por sí mismo, no en razón de sus consecuencias, ni de quién pueda disfrutar de ellas. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell en sus “Ensayos Filosóficos” Ed. Altaya 1993. Pág. 18.)
La Ética.
Se la debe estudiar, con relación al tipo de acciones humanas a ejecutar y diferenciar lo virtuoso, de lo vicioso; pues, a veces se habla de bueno y verdadero, como si fuesen reinos independientes y pertenecientes el primero, a la ética; y el segundo a la ciencia. Pero esta proposición es defectuosa, porque el fin primordial de la ética es descubrir proposiciones verdaderas acerca de la conducta y no de la práctica. Ahora, la concepción que debemos examinar aquí, limita indebidamente el ámbito de la ética; cuando se nos indica, que debemos realizar o evitar acciones de determinados tipos; luego, podemos exigir legítimamente razones para ello; teniendo en cuenta que el objetivo, en la vida corriente, no es la práctica, sino las proposiciones sobre la misma práctica. En el caso de la ética, debemos preguntarnos, ¿el, por qué? de las acciones que deben ser realizadas y luego sí, continuar con la investigación (la experiencia) en el pasado; en busca de más razones, hasta llegar al tipo de proposición, cuya prueba es imposible, porque es tan sencilla o, tan obvia, que no puede hallarse nada más fundamental para deducirla.
Sin embargo, cuando preguntamos las razones de las acciones que recomiendan los moralistas; estas razones son, usualmente, que las consecuencias de las acciones son plausiblemente buenas; o, sino, enteramente buenas, al menos, las mejores posibles en las circunstancias dadas. De ahí que todas las cuestiones acerca de la conducta, presupongan, la decisión, acerca de qué cosas distintas de la conducta, son buenas y cuáles malas. Se llama buena conducta, a aquella que es un medio para otras cosas que son buenas por sí mismas; de ahí que sea necesario el estudio de lo que es bueno o, de lo que es malo, por sí mismo; antes de que podamos decidir sobre las reglas de la conducta. Y el estudio de lo bueno o, de lo malo por sí mismo, debe incluirse en la ética, que de este modo deja de ocuparse solamente de la conducta. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell en sus “Ensayos Filosóficos” Ed. Altaya 1993. Pág. 13.)
Hasta aquí, la parte filosófica general. - Concerniente a la ética; pero, aún, debemos tener en cuenta a Dios, quien nos reglamentó y nos enseñó; y que inclusive, nos dio su “Ley”. Ante esto, no hay nada que hacer (o, pensar); todo queda dicho; y por ríos de tinta que corran, la “Ley Divina”; (también llamada “Ley Mosaica”); no se puede cambiar, ni se podrá jamás. Ante esto, no hay preguntas ni respuestas, solo obediencia y culto. Practicarla, es la única diferencia entre lo bueno y lo malo y aún mejor, entre el bien y el mal. Es más, si queremos salvar nuestra *alma (que es lo único que tenemos para salvar); debemos observarla, al pié de la letra. Así nos parezca dogmático; o, fanático; la historia lo demuestra; quién (s) sigue al mandato divino, salva su *alma, y la proyecta a la eternidad; quien (s) no, sufre sus consecuencias y de paso pierde su *alma; condenándola a la desintegración eterna.
Nota:
Jesús dijo: «De que le sirve al hombre ganar todo el mundo, si pierde su alma.»
La Historia.
Nota:
De todos los estudios, mediante los cuales, los hombres adquieren la ciudadanía, en la comunidad intelectual; ninguno es tan indispensable, como los del pasado. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell, en sus “Ensayos Filosóficos”. Ed. Taltaya 1993 Pág. 82)
Saber cómo se ha desarrollado el mundo, hasta el momento en que empieza nuestro recuerdo individual; saber cómo han llegado a ser lo que son las religiones, las instituciones, las naciones en las que vivimos; estar familiarizados con los (nombres de los) grandes hombres de otros tiempos, cuyas costumbres y creencias, diferían ampliamente de las nuestras; es, todo ello, indispensable, para tener conciencia de nuestra situación; y además, para emanciparnos de las circunstancias accidentales de nuestra educación. La historia, no es solamente valiosa para el historiador, para el estudioso de archivos y documentos, sino también, para cuantos son capaces de un examen contemplativo de la vida humana. Con todo, el valor de la historia, es tan multiforme; que aquellos a quienes, uno de sus aspectos, llama la atención, con especial fuerza; están en peligro constante, de descuidar todos los demás. Finalmente, debe procurarse, la objetividad ante todas las cosas; hay que limitarse, a narrar los hechos y dejar que estos hablen por sí mismos.
Sería absurdo discutir la opinión de que la narración histórica, ha de basarse en el estudio de los documentos; solo éstos dan prueba de lo que realmente ocurrió; y está claro que la historia no verdadera, no puede tener gran valor. Por otra parte, hay más vida en un documento, que en 50 historias; por el mero hecho de contener lo que pertenece al tiempo pasado real; el documento tiene una vida muerta extrañamente viva, como la que pertenece al tiempo pasado, cuando un conocido olor nos lo evoca. Y una historia escrita después de los acontecimientos difícilmente puede hacernos sentir que los actores ignoraban el futuro. Pero, si los documentos, son en tantos sentidos, superiores a cualquier historia reflexionada. ¿Qué función le queda al historiador? Está, para empezar, la tarea de selección. Es fácil que todos estén de acuerdo en este punto, pues los materiales son tan abundantes que resulta imposible presentarlos todos de manera exhaustiva. Sin embargo, lo que no siempre se comprende, es que la selección, supone un patrón de valor entre los hechos e implica, consiguientemente, que la verdad no es el único objetivo que la acción de registrar el pasado se propone.
Bien, puede decirse, sin embargo. Que el único principio de selección verdadero, es el puramente científico; pues, deben considerarse muy importantes a los hechos que conduzcan a la determinación de Leyes generales. Es imposible adivinar si existirá alguna vez una ciencia de la historia; en todo caso, lo cierto es que esta ciencia, como tal, en la actualidad no existe, salvo en cierto grado, en cuanto al campo económico y matemático. Para que sea aplicable el criterio científico de importancia en la selección de los hechos, es necesario que se elaboren dos o más hipótesis; cada una de las cuales explique gran número de hechos y que se descubra un hecho crucial que sirva para elegir alguna de ellas. La historia, consideraba como cuerpo de verdades, parece destinada a continuar siendo por mucho tiempo, casi puramente descriptiva. Se argüía que todas las revoluciones finalizan en tiranías militares y se predijo el advenimiento de Napoleón. Finalmente.
El estudio de la historia, se recomienda a menudo, por su utilidad respecto de los problemas de la política actual. Es imposible negar que la historia tiene gran utilidad en este terreno, pero, es necesario limitar y definir muy cuidadosamente el tipo de orientación que debe esperarse de ella. Las enseñanzas de la historia, presuponen el descubrimiento de Leyes casuales, generalmente de muy amplio alcance; y las enseñanzas de esta clase, aunque en determinados casos pueden no ser perjudiciales, siempre son teóricamente infundadas. El mal es mayor, cuando se considera que la historia enseña veladamente, alguna doctrina filosófica general. Pues, a menudo, resulta difícil descubrir, de qué lado está el Derecho, mientras que el Poder es visible a todos los hombres; de este modo, la doctrina de que el Derecho es Poder, se convierte, insensiblemente, en la creencia de que el Poder es Derecho.
Pero, pese a todo. La historia tiene una función con respecto a las cuestiones corrientes; pues, se trata de una función menos directa, menos precisa y menos decisiva. En primer lugar, pueden sugerirse máximas menores cuya verdad, cuando se proponen por primera vez; pueden advertirse, sin la ayuda de los acontecimientos que las sugirieron. Así, ocurre en las Ciencias Económicas, donde la mayoría de los temas implicados son sencillos. Igual en la Estrategia. Cuando, a partir de los hechos, puede obtenerse un razonamiento sencillo, deducible de premisas indudables, la historia puede proporcionar preceptos útiles. Pero, solamente serán aplicados, cuando el fin esté ya determinado y serán, por lo tanto, de naturaleza técnica. Nunca enseñarán al estadista, qué fin debe éste proponerse; sino, solamente, dentro de ciertos límites; cómo pueden ser alcanzados algunos fines más definidos; tales, como: La riqueza; o. la victoria en la guerra.
La historia, tiene, sin embargo, otra utilidad distinta y mayor; amplía la imaginación y sugiere posibilidades de acción y de sentimientos, que no se le habrían ocurrido a espíritus no instruidos. Selecciona, los elementos significativos e importantes de las vidas pasadas; llena nuestros pensamientos de ejemplos espléndidos y del deseo de fines mayores que los que una reflexión desamparada, podría haber descubierto: Relación del presente con el pasado; y con ello el futuro con el presente. Hoy, acción, éxito y cambio, son como lemas. Que la acción sea noble; que el éxito lo sea de una buena causa; o, que el cambio, una mejora en algo distinto de la riqueza; son cuestiones que ahora no hay tiempo de plantear. Contra este espíritu en el que toda ociosidad, toda preocupación por los fines de la vida, se sacrifican a la lucha por ser los primeros en una carrera sin sentido, la historia y el hábito de vivir con el pasado; son antídotos seguros, y en nuestra época, estos antídotos son más necesarios que nunca.
Es bueno considerar de vez en cuando, el presente, como si fuera ya el pasado; y examinar, cuáles de sus elementos enriquecerán el depósito de posesiones permanentes del universo; cuáles vivirán y darán vida; cuando, nosotros y toda nuestra generación, hayamos desaparecido. A la luz de esta contemplación, toda la experiencia humana, se transforma; y se elimina lo sórdido o, lo personal. A medida que crecemos en sabiduría, se abre para nuestros ojos la caja de los tesoros de todas las épocas; cada vez más aprendemos a conocer; a amar a los hombres, por cuya entrega, es nuestra esa riqueza. Gradualmente, por la contemplación de las grandes existencias del pasado, se hace posible una comunión mística, que llena el alma, como de música de un coro invisible y desde el pasado, nos llaman voces heroicas.
Entonces, solo el pasado. Es verdaderamente real; el presente, no es más que el penoso nacimiento al ser inmutable de lo que ya no es. Solo lo muerto existe plenamente. Las vidas de los vivos, son fragmentarias, inciertas y cambiantes; las de los muertos, completas, libres del yugo del tiempo, hoy todopoderoso y señor del mundo. Sin embargo, el pasado, devorando siempre los productos del presente, vive por la muerte universal. Firme e irresistiblemente añade nuevos trofeos a su templo silencioso, construido para todas las épocas; allí están enterradas todas las proezas y los fracasos heroicos. Por las orillas del río del tiempo; la triste procesión de las generaciones humanas camina lentamente hacia la tumba; en el apacible País del pasado; la marcha finaliza; ahí se quedan los cansados, los vagabundos y todos sus llantos enmudecen.
El Pragmatismo.
Nota:
La aparición en el mundo de una filosofía auténticamente nueva, es siempre u acontecimiento de la mayor transcendencia Y lo es más, particularmente, cuando la nueva filosofía encarna el carácter que prevalece en una época mejor que cualquier otra de sus rivales más antiguas; pues, si es así, resulta probable que consiga el favor popular, coloree las ideas del público culto y semiculto; y refuerce los elementos del ambiente espiritual, a los que debe su propio éxito.
Sería un error, suponer, que las nuevas filosofías, están siempre adaptadas a la época en la cual aparecen; pero, cuando no lo están, no consiguen una amplia aceptación; independientemente de los demás méritos que puedan tener. La filosofía denominada “Pragmatismo” o, “Humanismo”; es auténticamente nueva, y está singularmente bien adaptada, al talante intelectual (predominante) de nuestra época. Pues, sus autores, nos muestran una modestia excesiva. Sin embargo, pragmatismo, para algunos es como: “Un hombre nuevo, con viejos modos de pensar”. La expresión “pragmatismo”, fue inventada en 1878; y se aplicó a la doctrina que sostiene que: La significación de una idea, reside en las acciones a las que conduce. La tesis que propugna es que, en ciertos casos, ante dos alternativas, es justo creer enteramente en una de ellas, incluso aunque no haya pruebas acerca de cuál es la verdadera. Y este caso se suscita, cuando nos vemos obligados a elegir entre dos hipótesis, de las cuales, ambas nos parecen posibles; aún cuando, la gran diferencia entre la que elegimos, sea importante; ya que los ejemplos que se citan, son principalmente cuestiones de moral y de religión. Pues, para empezar: Emociones y deseos, aunque a menudo son incapaces de alterar nuestras creencias, cuando éstas han sido ya establecidas, desempeñan, pese a todo, un gran papel, al decidir inicialmente lo que han de ser nuestras creencias. Para ello, debemos conocer la verdad y evitar el error. Luego, se plantea paradójicamente: Si, en los caos en que falta la evidencia, nos abstenemos totalmente de cualquier creencia; estamos seguros de no incurrir en el error; pero, por otra parte, además estamos seguros de no conocer la verdad. (La vemos lejana, muy alta.) Luego, nos planteamos: que si nos abstenemos de creer, en caso de falta de evidencia, es porque consideramos más importante, evitar el error que conocer la verdad. O sea, miedo a ser engañados.
Generalmente el hecho de creer o de no creer, en el caso de la religión; la elección posee todas las características de las opciones que, deben ser decididas por las emociones. Se presume tácitamente, que no hay pruebas a favor o en contra de la religión, y se señala, que al negarnos a creer o a no creer; perdemos los beneficios de la religión, tanto como decidiendo no creer. La conclusión es que, aunque no hay evidencias a favor de la religión, debemos creer en ella pese a todo, si hallamos satisfacción al hacerlo. Es lo que nos hace pensar que una cierta práctica de la voluntad de creer, es casi un preliminar indispensable para la aceptación del pragmatismo y a su vez una vez aceptado el pragmatismo, se llega a dar plena justificación a la voluntad de creer.
Es errónea la presunción pragmática. - De que creo que el camino que he escogido, es el correcto. Inferir la creencia de la acción, del modo tosco implicado en la presunción de que aceptar esta vedado, prescindir de ella; es ignorar el simple hecho de que nuestras acciones se basan constantemente en probabilidades y que, en todos estos casos, no aceptamos una verdad ni prescindimos de ella, sino, que sostenemos una hipótesis. Sin embargo, la cuestión es más complicada en el caso de las creencias religiosas, cuyo principal beneficio se deriva de la satisfacción emocional de la creencia misma y no de las acciones útiles que promueve directamente.
Examinaremos a continuación la tesis de que en los casos dudosos, el precepto “debemos conocer la verdad”; nos conduce a creer en una hipótesis al azar; puesto que, si no creemos en ninguna hipótesis, ciertamente no conocemos la verdad. Así. Si en el caso de una opción para cuya decisión no disponemos de medios racionales, creemos en una alternativa al azar. De ahí que el precepto”debemos, conocer la verdad” que se invoca; sea irrelevante para la cuestión. Pero, sin embargo, ir por el mundo creyéndolo todo, con la esperanza de que consiguientemente, creeremos tanta verdad como es posible; es como practicar la poligamia, con la esperanza de que entre tantas mujeres, encontraremos alguna que nos haga felices.
Resumiendo: El pragmatismo, ignora la distinción entre creer y sostener una hipótesis; y presume equivocadamente que si no creemos completamente una hipótesis, entonces debemos: O bien, no creer en ella, en absoluto o, bien suspender el juicio. De ahí que pueda presentar la opción: “Acepte esta verdad o, prescinda de ella”; como algo ineludible; cuando lo cierto es que todo experimento, tanto en la ciencia, como en la vida diaria, implica un estado de ánimo que no acepta ninguna de las dos alternativas. Presume que conocemos una verdad; cuando creemos en ella; y esto conduce a que personas diferentes, deben tener creencias incompatibles.
La verdad. La teoría pragmática de la verdad, se acredita por una consideración apropiada al error. Pues, llamamos error, si creemos parcialmente en él. O, queremos creer en él. Así, el pragmatismo destaca que se debe mostrar la distinción entre error y falsedad. Igual, en la ética, no se distingue lo bueno de lo malo, sino, que se dedican aprobar que todo es bueno. Sin embardo, para descubrir la diferencia entre verdad y falsedad, el pragmatismo inicia una socrática investigación inductiva, sobre las cosas que pueden ser llamadas verdaderas o falsas. La respuesta del pragmatismo, es que, si la creencia favorece al objetivo que nos ha llevado a preguntarnos por su verdad, la *creencia se considera verdadera; y si favorece a ese objetivo, se considera falsa.
*Nota:
Las ideas que en sí mismas no son sino, parte de nuestra experiencia; se convierten en verdaderas, en la medida que nos ayudan a establecer relaciones satisfactorias, con otras partes de nuestra experiencia.
Luego, el pragmatista, sostiene que hay diferentes tipos de acuerdo y de realidad; esto, para los diferentes casos presentados. Entonces, la gran presunción de los intelectualistas, nos dice: Que verdad, significa esencialmente, una relación estática inerte. Pero, volviendo a la definición de verdad, como acuerdo con la realidad, se distinguen tres tipos: Hechos concretos; tipos abstractos de cosas y de relaciones percibidas intuitivamente entre ellos; y *verdades que ya poseemos.
*Notas:
Verdadero es lo conveniente a nuestro modo de pensar; de la misma manera que lo justo, es solamente lo conveniente a nuestro modo de comportarnos.
Para juzgar, si una creencia es verdadera, solo es necesario descubrir si tiende a la satisfacción del deseo. La naturaleza del deseo a satisfacer, sólo es relevante en la medida en que puede implicar un conflicto con otros deseos. Así, la sicología, prevalece no solamente sobre la lógica y la teoría del conocimiento, sino, también sobre la ética.
La mayoría de las filosofías, quedan determinadas por sus planteamientos iniciales y por los hechos que habitualmente llenan a la imaginación del filósofo. Pero ¿qué características conducen de hecho a los hombres a considerar a unas como verdades; y a otras como falsas? La respuesta esta cuestión, proporcionará el significado de verdad y falsedad. Los hechos que llenan a la imaginación de los pragmatistas, son hechos físicos; mientras, que otros pensarán en el cielo estrellado, los pragmatistas, piensan en la percepción del cielo estrellado; mientras que otros pueden pensar en Dios, los pragmatistas, piensan en la creencia en Dios. Entonces, al discurrir sobre las ciencias, no piensan como especialistas científicos, en los hechos sobre los que se basan las teorías científicas; piensan en las teorías mismas. Finalmente, en la realidad de las “Leyes”; éstas, son inducidas a partir de los hechos. Luego, no podemos decir que este o aquel hecho, prueba esta o aquella Ley; es todo el conjunto de los hechos, lo que prueba a todo el conjunto de las Leyes.
Epílogo
En “Origo”; o, “Maya”, “La Pata y el Huevo”: Independientemente de preocuparnos por ¿Qué fue primero? Fuimos, poco a poco, narrando las causas del porqué, en cuestiones religiosas, ya no tenemos que creer, solamente por Fe; ya que hoy, por ejemplo, todo... (lo narrado en la Biblia) es comprobable científicamente; dejando pasmados a los ateos. Descubrimos entretanto, cómo los diferentes «yo»; son los verdaderos protagonistas principales, de los relatos bíblicos, ya que siempre, han viajado y viajarán, por el espacio-tiempo. Establecimos, además, que en todo el Universo: Dios, es una fuerza, y un solo principio de “Luz” primigenia: Luz de luces, principio y fin. Entonces, contamos los hechos y las vivencias, con los diferentes «yo», como protagonistas y coprotagonistas.
Dentro de la búsqueda de Dios; nuestra alma, va surcando el mundo y los diferentes mundos; apoyados por la Biblia, como fondo de inspiración en la investigación de la verdad; advertimos, como Dios, se expone en una forma pura y más aún, como una llama simbólica: Que nos enseña, que nos guía; y finalmente; a través de Jesucristo, nos ama y nos perdona. Así, esotéricamente, La Biblia, nos representa a la “creación”; personificado nuestro verdadero pasado, como “seres de luz”; y nos relata, cómo dejamos de serlo; para luego, prometernos, su perdón, por medio del sacrificio de su propio hijo Jesús. La Biblia, principalmente, nos muestra el camino para llegar a Dios; y nos enseña, las consecuencias de desobedecerlo y ofenderlo; al desconocerlo, suplantándolo mediante la imposición y la herejía, de obedecer a otros dioses y por medio de ellos, al mismo Satanás disfrazado.
Mediante el Éxodo, nos representó toda la traji-comedia (simbólica) de su pueblo, atravesando el inmenso desierto de la vida; y precisamente es allí, cuando resolvió darnos su sagrada “Ley”; enseñándonos además, que nunca nos abandonará. Entretanto, nos recordó sus designios y sus preferencias; seguidas de su gran poder y gloria. Nos manifestó su sabiduría, riqueza y poder, por medio de Salomón; su inmenso amor (descrito en 158 salmos) y justicia, a través de David; en una forma genérica, nos enseñó, como seguir la verdadera Fe; para finalmente, por medio de las parábolas de Cristo; ética y pedagógicamente, nos dijo como comportarnos en la vida, ya que nos espera (simbólicamente) un final, según nuestro libre albedrío.
Entonces, nunca como hoy. Estamos en la capacidad de ver, cómo todos, absolutamente todos, los supuestos... “milagros” bíblicos; son comprobables científicamente: La creación del mundo de la nada; El Arca de Noé; La Torre de Babel; Las 7 plagas de Egipto; El cruce del Mar rojo (Moisés); Las Tablas de la “Ley”; El Éxodo; Sodoma y Gomorra; El paro del Sol (Josué.); La destrucción de las murallas de Jericó; La fortaleza de Sansón; La ballena de Jonás; y las “Profecías”. En general, todos los libros sagrados, desde el Génesis, hasta el Apocalipsis, son comprobables científicamente.
Para terminar: - La magnificencia divina, nos enseña que a lo largo de los siglos, los esfuerzos de nuestros grandes matemáticos; quienes, en estados mentales especiales, lograron dotarnos de una mayor profundidad, en la comprensión de la naturaleza. Así: Que la Tierra es redonda; que la misma fuerza que hace caer una manzana, es también la responsable del movimiento de los cuerpos celestes; que el espacio es finito y no es eterno; que tiempo y espacio, están entrelazados y envueltos por materia y energía; que el futuro, sólo puede determinarse a través de la probabilidad.
Resumiendo: Como ocurrió en el pasado, el desarrollo futuro de las matemáticas (el idioma esotérico de Dios); afectará sin duda, en forma directa o indirecta, a nuestra condición de vivir y de pensar. Las maravillas del mundo antiguo, como las pirámides de Egipto, que fueron físicas; son sin embargo, la mayor maravilla planetaria; pero, sin embargo, la mayor de éstas, se encuentra en nuestro propio entendimiento, y en la luz, que nos viene del Creador. - (Tomado en paráfrasis, de “Dios creó los números” de S. Hawking. Ed. Crítica, Barcelona. Ed. 2007.)
La ciencia-ficción:
Después de la segunda guerra mundial, los grandes valores desaparecieron de la faz de los principales países europeos; hasta el grado de que la gente quería ser otra cosa; o viajar, a otro mundo; un mundo diferente... Así fue como tomó fuerza la “ciencia-ficción”. La literatura, entonces se apoderó de las mentes, sobretodo jóvenes; tornándose en una fuerte crítica del presente y de las causas que apresuraron la “hecatombe”. Después de preguntarse, por lo que realmente le pasó a la humanidad; se preguntaron especialmente, a través de la sicología; el, por qué de tal desgracia.
Luego, la “ciencia-ficción”, como respuesta; sueña, con un “Estado Mundial” libre y democrático, que ejerza el control, con base en las computadoras. Con base en una nueva forma de pensar. En el cual se pregunta y se cuestiona todo; desde el principio hasta el final. Para, en dicha forma, llegar, a la trascendencia de cosas sorprendentes. Y en que solo, basados en la ciencia... se hace ficción; con verdaderas raíces, como preámbulo de lo que podría ser.
Con escenarios pasados, presentes y futuros, la ciencia-ficción, descubre lo inmortal, lo trascendental. Para terminar, y para ejemplificar la situación; se llegará a la ficción; De que solo se puede ser reconocido, en la comunidad humana; sin ella, desapareceríamos como tales.
Cristo, regresa pronto.
Nota:
El juicio en el cielo ya empezó: Gran reunión de almas se prepara; como cuando, la gran caída de los ángeles; que se revelaron a Dios; pero ahora, se trata de una “gran reunión de almas”; para justificar su ascenso (al ser transformadas, si, son salvas) al cielo o, no. Como una: “Gran Evacuación”; Cristo para presidirla, se hará presente muy pronto, ante la faz de La Tierra. Así, todos los que adoraron otros dioses (el dinero y los vicios; principalmente); serán juzgados como reos, ante Dios. Luego, estamos en los últimos tiempos; o, en la última era de la humanidad. Entonces, los aprovechadores y engañadores, serán aplastados y ya no habrá más injusticia y desamor. Solo la Luz de Dios, nos acompañará por la eternidad. (1ª Tesalonicenses 4:13-18; 1ª Corintios 15:51-53; Pedro 4:5-6; Sn. Juan 11:25; Sn. Lucas 14:14; Apocalipsis I:3; y 22:17-20.)
Fin
La Ética.
Se la debe estudiar, con relación al tipo de acciones humanas a ejecutar y diferenciar lo virtuoso, de lo vicioso; pues, a veces se habla de bueno y verdadero, como si fuesen reinos independientes y pertenecientes el primero, a la ética; y el segundo a la ciencia. Pero esta proposición es defectuosa, porque el fin primordial de la ética es descubrir proposiciones verdaderas acerca de la conducta y no de la práctica. Ahora, la concepción que debemos examinar aquí, limita indebidamente el ámbito de la ética; cuando se nos indica, que debemos realizar o evitar acciones de determinados tipos; luego, podemos exigir legítimamente razones para ello; teniendo en cuenta que el objetivo, en la vida corriente, no es la práctica, sino las proposiciones sobre la misma práctica. En el caso de la ética, debemos preguntarnos, ¿el, por qué? de las acciones que deben ser realizadas y luego sí, continuar con la investigación (la experiencia) en el pasado; en busca de más razones, hasta llegar al tipo de proposición, cuya prueba es imposible, porque es tan sencilla o, tan obvia, que no puede hallarse nada más fundamental para deducirla.
Sin embargo, cuando preguntamos las razones de las acciones que recomiendan los moralistas; estas razones son, usualmente, que las consecuencias de las acciones son plausiblemente buenas; o, sino, enteramente buenas, al menos, las mejores posibles en las circunstancias dadas. De ahí que todas las cuestiones acerca de la conducta, presupongan, la decisión, acerca de qué cosas distintas de la conducta, son buenas y cuáles malas. Se llama buena conducta, a aquella que es un medio para otras cosas que son buenas por sí mismas; de ahí que sea necesario el estudio de lo que es bueno o, de lo que es malo, por sí mismo; antes de que podamos decidir sobre las reglas de la conducta. Y el estudio de lo bueno o, de lo malo por sí mismo, debe incluirse en la ética, que de este modo deja de ocuparse solamente de la conducta. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell en sus “Ensayos Filosóficos” Ed. Altaya 1993. Pág. 13.)
Hasta aquí, la parte filosófica general. - Concerniente a la ética; pero, aún, debemos tener en cuenta a Dios, quien nos reglamentó y nos enseñó; y que inclusive, nos dio su “Ley”. Ante esto, no hay nada que hacer (o, pensar); todo queda dicho; y por ríos de tinta que corran, la “Ley Divina”; (también llamada “Ley Mosaica”); no se puede cambiar, ni se podrá jamás. Ante esto, no hay preguntas ni respuestas, solo obediencia y culto. Practicarla, es la única diferencia entre lo bueno y lo malo y aún mejor, entre el bien y el mal. Es más, si queremos salvar nuestra *alma (que es lo único que tenemos para salvar); debemos observarla, al pié de la letra. Así nos parezca dogmático; o, fanático; la historia lo demuestra; quién (s) sigue al mandato divino, salva su *alma, y la proyecta a la eternidad; quien (s) no, sufre sus consecuencias y de paso pierde su *alma; condenándola a la desintegración eterna.
Nota:
Jesús dijo: «De que le sirve al hombre ganar todo el mundo, si pierde su alma.»
La Historia.
Nota:
De todos los estudios, mediante los cuales, los hombres adquieren la ciudadanía, en la comunidad intelectual; ninguno es tan indispensable, como los del pasado. (Tomado en paráfrasis, de Bertrand Russell, en sus “Ensayos Filosóficos”. Ed. Taltaya 1993 Pág. 82)
Saber cómo se ha desarrollado el mundo, hasta el momento en que empieza nuestro recuerdo individual; saber cómo han llegado a ser lo que son las religiones, las instituciones, las naciones en las que vivimos; estar familiarizados con los (nombres de los) grandes hombres de otros tiempos, cuyas costumbres y creencias, diferían ampliamente de las nuestras; es, todo ello, indispensable, para tener conciencia de nuestra situación; y además, para emanciparnos de las circunstancias accidentales de nuestra educación. La historia, no es solamente valiosa para el historiador, para el estudioso de archivos y documentos, sino también, para cuantos son capaces de un examen contemplativo de la vida humana. Con todo, el valor de la historia, es tan multiforme; que aquellos a quienes, uno de sus aspectos, llama la atención, con especial fuerza; están en peligro constante, de descuidar todos los demás. Finalmente, debe procurarse, la objetividad ante todas las cosas; hay que limitarse, a narrar los hechos y dejar que estos hablen por sí mismos.
Sería absurdo discutir la opinión de que la narración histórica, ha de basarse en el estudio de los documentos; solo éstos dan prueba de lo que realmente ocurrió; y está claro que la historia no verdadera, no puede tener gran valor. Por otra parte, hay más vida en un documento, que en 50 historias; por el mero hecho de contener lo que pertenece al tiempo pasado real; el documento tiene una vida muerta extrañamente viva, como la que pertenece al tiempo pasado, cuando un conocido olor nos lo evoca. Y una historia escrita después de los acontecimientos difícilmente puede hacernos sentir que los actores ignoraban el futuro. Pero, si los documentos, son en tantos sentidos, superiores a cualquier historia reflexionada. ¿Qué función le queda al historiador? Está, para empezar, la tarea de selección. Es fácil que todos estén de acuerdo en este punto, pues los materiales son tan abundantes que resulta imposible presentarlos todos de manera exhaustiva. Sin embargo, lo que no siempre se comprende, es que la selección, supone un patrón de valor entre los hechos e implica, consiguientemente, que la verdad no es el único objetivo que la acción de registrar el pasado se propone.
Bien, puede decirse, sin embargo. Que el único principio de selección verdadero, es el puramente científico; pues, deben considerarse muy importantes a los hechos que conduzcan a la determinación de Leyes generales. Es imposible adivinar si existirá alguna vez una ciencia de la historia; en todo caso, lo cierto es que esta ciencia, como tal, en la actualidad no existe, salvo en cierto grado, en cuanto al campo económico y matemático. Para que sea aplicable el criterio científico de importancia en la selección de los hechos, es necesario que se elaboren dos o más hipótesis; cada una de las cuales explique gran número de hechos y que se descubra un hecho crucial que sirva para elegir alguna de ellas. La historia, consideraba como cuerpo de verdades, parece destinada a continuar siendo por mucho tiempo, casi puramente descriptiva. Se argüía que todas las revoluciones finalizan en tiranías militares y se predijo el advenimiento de Napoleón. Finalmente.
El estudio de la historia, se recomienda a menudo, por su utilidad respecto de los problemas de la política actual. Es imposible negar que la historia tiene gran utilidad en este terreno, pero, es necesario limitar y definir muy cuidadosamente el tipo de orientación que debe esperarse de ella. Las enseñanzas de la historia, presuponen el descubrimiento de Leyes casuales, generalmente de muy amplio alcance; y las enseñanzas de esta clase, aunque en determinados casos pueden no ser perjudiciales, siempre son teóricamente infundadas. El mal es mayor, cuando se considera que la historia enseña veladamente, alguna doctrina filosófica general. Pues, a menudo, resulta difícil descubrir, de qué lado está el Derecho, mientras que el Poder es visible a todos los hombres; de este modo, la doctrina de que el Derecho es Poder, se convierte, insensiblemente, en la creencia de que el Poder es Derecho.
Pero, pese a todo. La historia tiene una función con respecto a las cuestiones corrientes; pues, se trata de una función menos directa, menos precisa y menos decisiva. En primer lugar, pueden sugerirse máximas menores cuya verdad, cuando se proponen por primera vez; pueden advertirse, sin la ayuda de los acontecimientos que las sugirieron. Así, ocurre en las Ciencias Económicas, donde la mayoría de los temas implicados son sencillos. Igual en la Estrategia. Cuando, a partir de los hechos, puede obtenerse un razonamiento sencillo, deducible de premisas indudables, la historia puede proporcionar preceptos útiles. Pero, solamente serán aplicados, cuando el fin esté ya determinado y serán, por lo tanto, de naturaleza técnica. Nunca enseñarán al estadista, qué fin debe éste proponerse; sino, solamente, dentro de ciertos límites; cómo pueden ser alcanzados algunos fines más definidos; tales, como: La riqueza; o. la victoria en la guerra.
La historia, tiene, sin embargo, otra utilidad distinta y mayor; amplía la imaginación y sugiere posibilidades de acción y de sentimientos, que no se le habrían ocurrido a espíritus no instruidos. Selecciona, los elementos significativos e importantes de las vidas pasadas; llena nuestros pensamientos de ejemplos espléndidos y del deseo de fines mayores que los que una reflexión desamparada, podría haber descubierto: Relación del presente con el pasado; y con ello el futuro con el presente. Hoy, acción, éxito y cambio, son como lemas. Que la acción sea noble; que el éxito lo sea de una buena causa; o, que el cambio, una mejora en algo distinto de la riqueza; son cuestiones que ahora no hay tiempo de plantear. Contra este espíritu en el que toda ociosidad, toda preocupación por los fines de la vida, se sacrifican a la lucha por ser los primeros en una carrera sin sentido, la historia y el hábito de vivir con el pasado; son antídotos seguros, y en nuestra época, estos antídotos son más necesarios que nunca.
Es bueno considerar de vez en cuando, el presente, como si fuera ya el pasado; y examinar, cuáles de sus elementos enriquecerán el depósito de posesiones permanentes del universo; cuáles vivirán y darán vida; cuando, nosotros y toda nuestra generación, hayamos desaparecido. A la luz de esta contemplación, toda la experiencia humana, se transforma; y se elimina lo sórdido o, lo personal. A medida que crecemos en sabiduría, se abre para nuestros ojos la caja de los tesoros de todas las épocas; cada vez más aprendemos a conocer; a amar a los hombres, por cuya entrega, es nuestra esa riqueza. Gradualmente, por la contemplación de las grandes existencias del pasado, se hace posible una comunión mística, que llena el alma, como de música de un coro invisible y desde el pasado, nos llaman voces heroicas.
Entonces, solo el pasado. Es verdaderamente real; el presente, no es más que el penoso nacimiento al ser inmutable de lo que ya no es. Solo lo muerto existe plenamente. Las vidas de los vivos, son fragmentarias, inciertas y cambiantes; las de los muertos, completas, libres del yugo del tiempo, hoy todopoderoso y señor del mundo. Sin embargo, el pasado, devorando siempre los productos del presente, vive por la muerte universal. Firme e irresistiblemente añade nuevos trofeos a su templo silencioso, construido para todas las épocas; allí están enterradas todas las proezas y los fracasos heroicos. Por las orillas del río del tiempo; la triste procesión de las generaciones humanas camina lentamente hacia la tumba; en el apacible País del pasado; la marcha finaliza; ahí se quedan los cansados, los vagabundos y todos sus llantos enmudecen.
El Pragmatismo.
Nota:
La aparición en el mundo de una filosofía auténticamente nueva, es siempre u acontecimiento de la mayor transcendencia Y lo es más, particularmente, cuando la nueva filosofía encarna el carácter que prevalece en una época mejor que cualquier otra de sus rivales más antiguas; pues, si es así, resulta probable que consiga el favor popular, coloree las ideas del público culto y semiculto; y refuerce los elementos del ambiente espiritual, a los que debe su propio éxito.
Sería un error, suponer, que las nuevas filosofías, están siempre adaptadas a la época en la cual aparecen; pero, cuando no lo están, no consiguen una amplia aceptación; independientemente de los demás méritos que puedan tener. La filosofía denominada “Pragmatismo” o, “Humanismo”; es auténticamente nueva, y está singularmente bien adaptada, al talante intelectual (predominante) de nuestra época. Pues, sus autores, nos muestran una modestia excesiva. Sin embargo, pragmatismo, para algunos es como: “Un hombre nuevo, con viejos modos de pensar”. La expresión “pragmatismo”, fue inventada en 1878; y se aplicó a la doctrina que sostiene que: La significación de una idea, reside en las acciones a las que conduce. La tesis que propugna es que, en ciertos casos, ante dos alternativas, es justo creer enteramente en una de ellas, incluso aunque no haya pruebas acerca de cuál es la verdadera. Y este caso se suscita, cuando nos vemos obligados a elegir entre dos hipótesis, de las cuales, ambas nos parecen posibles; aún cuando, la gran diferencia entre la que elegimos, sea importante; ya que los ejemplos que se citan, son principalmente cuestiones de moral y de religión. Pues, para empezar: Emociones y deseos, aunque a menudo son incapaces de alterar nuestras creencias, cuando éstas han sido ya establecidas, desempeñan, pese a todo, un gran papel, al decidir inicialmente lo que han de ser nuestras creencias. Para ello, debemos conocer la verdad y evitar el error. Luego, se plantea paradójicamente: Si, en los caos en que falta la evidencia, nos abstenemos totalmente de cualquier creencia; estamos seguros de no incurrir en el error; pero, por otra parte, además estamos seguros de no conocer la verdad. (La vemos lejana, muy alta.) Luego, nos planteamos: que si nos abstenemos de creer, en caso de falta de evidencia, es porque consideramos más importante, evitar el error que conocer la verdad. O sea, miedo a ser engañados.
Generalmente el hecho de creer o de no creer, en el caso de la religión; la elección posee todas las características de las opciones que, deben ser decididas por las emociones. Se presume tácitamente, que no hay pruebas a favor o en contra de la religión, y se señala, que al negarnos a creer o a no creer; perdemos los beneficios de la religión, tanto como decidiendo no creer. La conclusión es que, aunque no hay evidencias a favor de la religión, debemos creer en ella pese a todo, si hallamos satisfacción al hacerlo. Es lo que nos hace pensar que una cierta práctica de la voluntad de creer, es casi un preliminar indispensable para la aceptación del pragmatismo y a su vez una vez aceptado el pragmatismo, se llega a dar plena justificación a la voluntad de creer.
Es errónea la presunción pragmática. - De que creo que el camino que he escogido, es el correcto. Inferir la creencia de la acción, del modo tosco implicado en la presunción de que aceptar esta vedado, prescindir de ella; es ignorar el simple hecho de que nuestras acciones se basan constantemente en probabilidades y que, en todos estos casos, no aceptamos una verdad ni prescindimos de ella, sino, que sostenemos una hipótesis. Sin embargo, la cuestión es más complicada en el caso de las creencias religiosas, cuyo principal beneficio se deriva de la satisfacción emocional de la creencia misma y no de las acciones útiles que promueve directamente.
Examinaremos a continuación la tesis de que en los casos dudosos, el precepto “debemos conocer la verdad”; nos conduce a creer en una hipótesis al azar; puesto que, si no creemos en ninguna hipótesis, ciertamente no conocemos la verdad. Así. Si en el caso de una opción para cuya decisión no disponemos de medios racionales, creemos en una alternativa al azar. De ahí que el precepto”debemos, conocer la verdad” que se invoca; sea irrelevante para la cuestión. Pero, sin embargo, ir por el mundo creyéndolo todo, con la esperanza de que consiguientemente, creeremos tanta verdad como es posible; es como practicar la poligamia, con la esperanza de que entre tantas mujeres, encontraremos alguna que nos haga felices.
Resumiendo: El pragmatismo, ignora la distinción entre creer y sostener una hipótesis; y presume equivocadamente que si no creemos completamente una hipótesis, entonces debemos: O bien, no creer en ella, en absoluto o, bien suspender el juicio. De ahí que pueda presentar la opción: “Acepte esta verdad o, prescinda de ella”; como algo ineludible; cuando lo cierto es que todo experimento, tanto en la ciencia, como en la vida diaria, implica un estado de ánimo que no acepta ninguna de las dos alternativas. Presume que conocemos una verdad; cuando creemos en ella; y esto conduce a que personas diferentes, deben tener creencias incompatibles.
La verdad. La teoría pragmática de la verdad, se acredita por una consideración apropiada al error. Pues, llamamos error, si creemos parcialmente en él. O, queremos creer en él. Así, el pragmatismo destaca que se debe mostrar la distinción entre error y falsedad. Igual, en la ética, no se distingue lo bueno de lo malo, sino, que se dedican aprobar que todo es bueno. Sin embardo, para descubrir la diferencia entre verdad y falsedad, el pragmatismo inicia una socrática investigación inductiva, sobre las cosas que pueden ser llamadas verdaderas o falsas. La respuesta del pragmatismo, es que, si la creencia favorece al objetivo que nos ha llevado a preguntarnos por su verdad, la *creencia se considera verdadera; y si favorece a ese objetivo, se considera falsa.
*Nota:
Las ideas que en sí mismas no son sino, parte de nuestra experiencia; se convierten en verdaderas, en la medida que nos ayudan a establecer relaciones satisfactorias, con otras partes de nuestra experiencia.
Luego, el pragmatista, sostiene que hay diferentes tipos de acuerdo y de realidad; esto, para los diferentes casos presentados. Entonces, la gran presunción de los intelectualistas, nos dice: Que verdad, significa esencialmente, una relación estática inerte. Pero, volviendo a la definición de verdad, como acuerdo con la realidad, se distinguen tres tipos: Hechos concretos; tipos abstractos de cosas y de relaciones percibidas intuitivamente entre ellos; y *verdades que ya poseemos.
*Notas:
Verdadero es lo conveniente a nuestro modo de pensar; de la misma manera que lo justo, es solamente lo conveniente a nuestro modo de comportarnos.
Para juzgar, si una creencia es verdadera, solo es necesario descubrir si tiende a la satisfacción del deseo. La naturaleza del deseo a satisfacer, sólo es relevante en la medida en que puede implicar un conflicto con otros deseos. Así, la sicología, prevalece no solamente sobre la lógica y la teoría del conocimiento, sino, también sobre la ética.
La mayoría de las filosofías, quedan determinadas por sus planteamientos iniciales y por los hechos que habitualmente llenan a la imaginación del filósofo. Pero ¿qué características conducen de hecho a los hombres a considerar a unas como verdades; y a otras como falsas? La respuesta esta cuestión, proporcionará el significado de verdad y falsedad. Los hechos que llenan a la imaginación de los pragmatistas, son hechos físicos; mientras, que otros pensarán en el cielo estrellado, los pragmatistas, piensan en la percepción del cielo estrellado; mientras que otros pueden pensar en Dios, los pragmatistas, piensan en la creencia en Dios. Entonces, al discurrir sobre las ciencias, no piensan como especialistas científicos, en los hechos sobre los que se basan las teorías científicas; piensan en las teorías mismas. Finalmente, en la realidad de las “Leyes”; éstas, son inducidas a partir de los hechos. Luego, no podemos decir que este o aquel hecho, prueba esta o aquella Ley; es todo el conjunto de los hechos, lo que prueba a todo el conjunto de las Leyes.
Epílogo
En “Origo”; o, “Maya”, “La Pata y el Huevo”: Independientemente de preocuparnos por ¿Qué fue primero? Fuimos, poco a poco, narrando las causas del porqué, en cuestiones religiosas, ya no tenemos que creer, solamente por Fe; ya que hoy, por ejemplo, todo... (lo narrado en la Biblia) es comprobable científicamente; dejando pasmados a los ateos. Descubrimos entretanto, cómo los diferentes «yo»; son los verdaderos protagonistas principales, de los relatos bíblicos, ya que siempre, han viajado y viajarán, por el espacio-tiempo. Establecimos, además, que en todo el Universo: Dios, es una fuerza, y un solo principio de “Luz” primigenia: Luz de luces, principio y fin. Entonces, contamos los hechos y las vivencias, con los diferentes «yo», como protagonistas y coprotagonistas.
Dentro de la búsqueda de Dios; nuestra alma, va surcando el mundo y los diferentes mundos; apoyados por la Biblia, como fondo de inspiración en la investigación de la verdad; advertimos, como Dios, se expone en una forma pura y más aún, como una llama simbólica: Que nos enseña, que nos guía; y finalmente; a través de Jesucristo, nos ama y nos perdona. Así, esotéricamente, La Biblia, nos representa a la “creación”; personificado nuestro verdadero pasado, como “seres de luz”; y nos relata, cómo dejamos de serlo; para luego, prometernos, su perdón, por medio del sacrificio de su propio hijo Jesús. La Biblia, principalmente, nos muestra el camino para llegar a Dios; y nos enseña, las consecuencias de desobedecerlo y ofenderlo; al desconocerlo, suplantándolo mediante la imposición y la herejía, de obedecer a otros dioses y por medio de ellos, al mismo Satanás disfrazado.
Mediante el Éxodo, nos representó toda la traji-comedia (simbólica) de su pueblo, atravesando el inmenso desierto de la vida; y precisamente es allí, cuando resolvió darnos su sagrada “Ley”; enseñándonos además, que nunca nos abandonará. Entretanto, nos recordó sus designios y sus preferencias; seguidas de su gran poder y gloria. Nos manifestó su sabiduría, riqueza y poder, por medio de Salomón; su inmenso amor (descrito en 158 salmos) y justicia, a través de David; en una forma genérica, nos enseñó, como seguir la verdadera Fe; para finalmente, por medio de las parábolas de Cristo; ética y pedagógicamente, nos dijo como comportarnos en la vida, ya que nos espera (simbólicamente) un final, según nuestro libre albedrío.
Entonces, nunca como hoy. Estamos en la capacidad de ver, cómo todos, absolutamente todos, los supuestos... “milagros” bíblicos; son comprobables científicamente: La creación del mundo de la nada; El Arca de Noé; La Torre de Babel; Las 7 plagas de Egipto; El cruce del Mar rojo (Moisés); Las Tablas de la “Ley”; El Éxodo; Sodoma y Gomorra; El paro del Sol (Josué.); La destrucción de las murallas de Jericó; La fortaleza de Sansón; La ballena de Jonás; y las “Profecías”. En general, todos los libros sagrados, desde el Génesis, hasta el Apocalipsis, son comprobables científicamente.
Para terminar: - La magnificencia divina, nos enseña que a lo largo de los siglos, los esfuerzos de nuestros grandes matemáticos; quienes, en estados mentales especiales, lograron dotarnos de una mayor profundidad, en la comprensión de la naturaleza. Así: Que la Tierra es redonda; que la misma fuerza que hace caer una manzana, es también la responsable del movimiento de los cuerpos celestes; que el espacio es finito y no es eterno; que tiempo y espacio, están entrelazados y envueltos por materia y energía; que el futuro, sólo puede determinarse a través de la probabilidad.
Resumiendo: Como ocurrió en el pasado, el desarrollo futuro de las matemáticas (el idioma esotérico de Dios); afectará sin duda, en forma directa o indirecta, a nuestra condición de vivir y de pensar. Las maravillas del mundo antiguo, como las pirámides de Egipto, que fueron físicas; son sin embargo, la mayor maravilla planetaria; pero, sin embargo, la mayor de éstas, se encuentra en nuestro propio entendimiento, y en la luz, que nos viene del Creador. - (Tomado en paráfrasis, de “Dios creó los números” de S. Hawking. Ed. Crítica, Barcelona. Ed. 2007.)
La ciencia-ficción:
Después de la segunda guerra mundial, los grandes valores desaparecieron de la faz de los principales países europeos; hasta el grado de que la gente quería ser otra cosa; o viajar, a otro mundo; un mundo diferente... Así fue como tomó fuerza la “ciencia-ficción”. La literatura, entonces se apoderó de las mentes, sobretodo jóvenes; tornándose en una fuerte crítica del presente y de las causas que apresuraron la “hecatombe”. Después de preguntarse, por lo que realmente le pasó a la humanidad; se preguntaron especialmente, a través de la sicología; el, por qué de tal desgracia.
Luego, la “ciencia-ficción”, como respuesta; sueña, con un “Estado Mundial” libre y democrático, que ejerza el control, con base en las computadoras. Con base en una nueva forma de pensar. En el cual se pregunta y se cuestiona todo; desde el principio hasta el final. Para, en dicha forma, llegar, a la trascendencia de cosas sorprendentes. Y en que solo, basados en la ciencia... se hace ficción; con verdaderas raíces, como preámbulo de lo que podría ser.
Con escenarios pasados, presentes y futuros, la ciencia-ficción, descubre lo inmortal, lo trascendental. Para terminar, y para ejemplificar la situación; se llegará a la ficción; De que solo se puede ser reconocido, en la comunidad humana; sin ella, desapareceríamos como tales.
Cristo, regresa pronto.
Nota:
El juicio en el cielo ya empezó: Gran reunión de almas se prepara; como cuando, la gran caída de los ángeles; que se revelaron a Dios; pero ahora, se trata de una “gran reunión de almas”; para justificar su ascenso (al ser transformadas, si, son salvas) al cielo o, no. Como una: “Gran Evacuación”; Cristo para presidirla, se hará presente muy pronto, ante la faz de La Tierra. Así, todos los que adoraron otros dioses (el dinero y los vicios; principalmente); serán juzgados como reos, ante Dios. Luego, estamos en los últimos tiempos; o, en la última era de la humanidad. Entonces, los aprovechadores y engañadores, serán aplastados y ya no habrá más injusticia y desamor. Solo la Luz de Dios, nos acompañará por la eternidad. (1ª Tesalonicenses 4:13-18; 1ª Corintios 15:51-53; Pedro 4:5-6; Sn. Juan 11:25; Sn. Lucas 14:14; Apocalipsis I:3; y 22:17-20.)
Fin
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